caffè per due, per favore

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Yoongi, estaba harto de la escuela y agradecido de estar en su último año y mes.

Planeaba conseguir un trabajo y vivir una vida tranquila en Corea, como a su padre le gustaría, tal vez, más adelante, conseguíria una esposa y dos niños, como su madre esperaba.

Y luego, envejeceria con esa mujer, mientras que sus hijos tenían una gran vida llena de lujos

Eso es lo que planeaba para su futuro, lo que un coreano promedio quería

Pero el, no era un coreano promedio, el era gay y bueno, eso era un gran inconveniente si deseaba tener una esposa

Yoongi no soportaba Corea, con sus constantes reglas, y vida estructurada, el quería hacer algo más, quería envejecer sabiendo que había disfrutado su vida y se había dedicado a lo que más quería en el mundo, la música. Pero, ovbio, sus padres no esperaban eso de él y estaba seguro que sí ellos se enteraban de su sexualidad y sus anbiciones se escandalizarian.

Apesar de saber eso, YoonGi se decidió, en la madrugada, cambiar el rumbo de su vida, apesar de aún ser muy joven, la noche de su graduación, tomó la tarjeta de crédito que sus padres le habían dado para emergencias, su tarjeta de débito,que sus padres no sabían que tenía, en la cual conservaba todos sus ahorros de toda la vida y los de la universidad, su documentación y la ropa que entraba en sus maletas, también un bolso. Bajo a la sala de la casa, obvervando que sus padres se habían ido a dormir hace mucho, y camino lo más silencioso que pudo a la mesita ratonera, para escribirle una carta a sus padres con toda la verdad y el detrás de su partida, el lugar donde estaría,también donde dejaría el auto de su padre y espefico que no volvería, pero que el estaría encantado de que ellos vayan a verlo triunfar, que lamentaba que las cosas resultarán así, pero el quería vivir de esta manera.

Algo triste yoongi dejo la casa en la que había vivido todos estos años, tomó su guitarra la cual estaba en el sillón y abrió la puerta, fue al garaje y sacó el auto de su padre, con el cuál condujo hasta el aeropuerto. Estaba seguro de que viviría de forma apretada y sin tomar muchos riesgos, tenía dinero suficiente para estar unos pocos meses sin trabajo, tenía que esforzarse para luego devolver el dinero que había utilizado para pagar el boleto de avión.

Entonces, al subir al avión se dio cuenta de que siempre estuvo solo, se percató que no podía llamar a nadie y eso le dolió un poco