El olor a bosque inundaba mis narices, por fin después de 80 años "durmiendo", me habían dejado libre pero solo por que el actual Alfa no podía con lo que se avecinaba, así que no les quedo de otra al consejo que despertar a la primera hembra lobo, para que fuera a su ayuda, inhale tan fuerte para que mis pulmones se acostumbraran a trabajar nuevamente, mis músculos estaban un poco atrofiados, pero mi mente trabajaba a mil, esta vez no dejaría que me encerraran aunque no encontrara a mi impronta, lucharía para estar libre.
Llegue al punto del encuentro, que me había indicado Billy, me posicione atrás del que supongo que es el menor de la manada, sus pensamientos apenas y me llegaban, no me sorprendió esto ya que esta no es mi manada, y por lo tanto no deberíamos de tener ninguna conexión, sin embargo podía percibir un poco de todos, me sorprendí al ver el pensamiento de una chica, al fin a no sería la única rara, eso me alegro.
Dirigí mi mirada hacia el frente, donde todos se encontraban mirando, había un grupo de vampiros, me alegre de verlos, ellos fueron amigos míos, la mayoría ya que vi que Carlisle agrego más vampiros a la familia, eso me sorprendió ya que se suponía que él no podía convertir a nadie, tal vez me perdí de mucho.
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-El es Jasper ha tenido muchas batallas contra los neófitos-dijo Edward el único chico aparte de Carlisle que conocí en el pasado.
-¿Qué es un neófito?- pregunto uno de los lobo que se encontraban enfrente de mí, como no me intereso quien pregunto, no busque de dónde provino la pregunta, sin en cambio espere la respuesta.
-Son vampiros recién convertidos-respondió el chico llamado Jasper, sin mirarnos.
-¿Qué los diferencian a ustedes?- ahora la pregunta vino de la chica lobo.
-Aún tienen sangre en su sistema, por eso son más rápidos y fuertes a nosotros, si queremos salir victoriosos debemos evitar que se nos acerque tanto como sea posible, arrancarles la cabeza, desmembrarlos y quemarlos-volvió a hablar el chico rizado.
- ¿Quién es voluntario, para ensayarles como evitar el contacto?-cuestiono.
Los lobos no confiaban en ellos, así ninguno quería participar, me sombre que la desconfianza era el único sentimiento que parece no a ver cambiado.
-Dicen que no confían, que mejor solo observan-comunico Edward, aun sin percatarse de mi presencia.
Así que decidí hacer mi entrada triunfal, para saludar a mis viejos amigos, rodee al grupo hasta quedar a un lado de Jasper, obviamente no se dieron cuenta de mi presencia porque me escondí detrás de los arboles, cuando iba a comenzar a entrenar con Edward, salte por encima del rubio, y caí encima de Edward.
-¡Hola Eddy!- salude en mi mente, el abrió tontamente sus ojos, y en vez de atacarme me abrazo como su peluche.
-Suéltame maldita sanguijuela- fue lo primero que pensé cuando no me soltaba, Carlisle, Esme y Rosalie me veían sorprendidos.
