Dreams

1.2K 97 32
                                    

Summary:

A veces creemos que seguimos nuestros sueños, cuando en verdad vamos detrás de nuestras pesadillas.

Qué no se note que no se hacer resúmenes(?)
.

.

.

.

Ese día fue como de costumbre, se había levantado a las 5 de la mañana para iniciar sus actividades. Se despidió de Wei WuXian y partió a algunas conferencias a las que tenía que estar presente en lugar de su hermano. Por estos días, el estrés en la secta GusuLan a empeorado, ha habido más trabajo que de costumbre. Razón por la que no ha pasado tanto tiempo con Wei WuXian cómo le gustaría, lo bueno es que su marido es compresivo y ha estado ayudando como puede en aligerar sus cargas, preocupándose además por el trabajo extra al que está siendo sometido.

"Tiene mucha suerte de tener a Wei WuXian para él", es el pensamiento más recurrente que ha tenido estos días. Su esposo puede ser bastante travieso e incorregible pero puede tener la certeza de que lo ama y se preocupa genuinamente por él. Las comisuras de los labios de Lan WangJi se curvaron en una pequeña sonrisa. 

El día transcurrió particularmente lento, las conferencias se hacían interminables. Solo pensaba en que quiere ir a descansar pero disimuló todo su estrés. Recordando siempre que debe dar su mejor cara como miembro de la secta GusuLan, teniendo una cara seria e imperturbable siempre. Así le enseñaron desde niño, no muestres emociones, no sientas demasiado. Está prohibido.

El sol se escondió y la luna llena se encargó de iluminar la noche, era tan tarde cuando terminó todo sus deberes. Ni siquiera llegó antes del toque de queda, todo el lugar está silencioso, a estas horas todos deben estar durmiendo cómodamente en sus habitaciones.

"Qué envidia"

Quiere darse un baño y descansar, acurrucarse un rato en la cama junto a Wei WuXian y besarse. Sí, sus besos siempre son consoladores. Wei WuXian tiene la costumbre de unir sus piernas cuando están acostados en la cama y darle muchos, muchos besos. El ama eso, nunca lo ha dicho en voz alta pero está seguro de que Wei WuXian lo sabe y por eso siempre lo hace.

Al estar frente al Jingshi vio una tenue luz adentro, sus labios se curvaron en una sonrisa. Abrió la puerta con cuidado de no hacer tanto ruido, el olor a sándalo inundó sus fosas nasales mezclado un poco con el olor a loto del cuerpo del cuerpo de Wei WuXian. 

Al entrar visualizó a Wei WuXian sentado en la cama mirando fijamente un papel en sus manos, cuando se percató de su presencia saltó de la cama tirando el papel a un lado y se acercó a Lan WangJi, rodeando su cuello con sus brazos y lo besó.

 —Lan Zhan, ya regresaste —sus labios estaban curvados en una sonrisa—. Te estaba esperando.

Lan WangJi dio otro pequeño beso en sus labios. 

—Mnn. Ya regresé—volvió a unir sus labios con los de Wei WuXian, sus dedos, que se habían colocado en la cintura masajearon sutilmente la zona.

Wei WuXian abrió la boca dejando que la lengua entrara a su cavidad bucal a causar estragos. Con sus manos jugueteó con la cinta de la frente, tironeándola y perdiéndose en el beso. Lan WangJi se movió de su lugar sin dejar de besarlo nunca, caminaron hasta la cama y recostó su cuerpo quedando encima de Wei WuXian, ahí se detuvo para admirar la vista.

Wei WuXian se veía tan hermoso frente a sus ojos, con la respiración jadeante y tan a su disposición, para que él hiciera todo lo que quisiera y como más le gustara. 

—Te extrañé— susurró Lan WangJi antes de volver a unir sus labios en un beso frenético. Wei WuXian trazó con sus dedos los músculos de su espalda, mientras lo besaba con vehemencia, clavando sus dientes en el labio inferior del contrario y rompiendo el beso.— Yo te extrañé más, Lan Zhan—le dedicó una amplia sonrisa.

InefableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora