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Ya nos encontrábamos frente al cuarto de Sunmi y por una parte no quería que ella se encontrara en su habitación, pero por otra parte si quería que estuviera ya que necesitaba saber o al menos tener alguna pista de si ella era mi asesina o no.

Porque vamos, ahora sabía que unos de mis asesinos era mujer. Además de que era la misma que se había preocupado por haber acuchillado a Jungkook.

Todas las pistas daban a ella y bueno no sabía del todo si eso la volvía la más sospechosa o no, porque en las películas de misterio y suspenso siempre era el tipo que menos te esperabas y el más sospechoso siempre era inocente en la mayoría de los casos.

Salí de mis pensamientos al escuchar como la puerta era abierta y nos encontrábamos a una chica de cabello negro algo adormilada, al parecer que se había levantado apenas.

-¿Jungkook?- frunció el ceño al ver a mi acompañante y quise reírme en su cara porque vamos ¿Cuántas veces te encuentras a tu rival en el amor desarreglada y con una mascarilla mal puesta?

-Queremos hablar contigo sobre un pastel y una carta que Taehyung recibió- fue directo al grano.

Ella frunció aún más el ceño sin saber muy bien a qué se refería, pero de inmediato al terminar de procesar las palabras abrió los ojos con sorpresa.

-Yo... yo no mande ningún pastel- susurro desviando la mirada.

Y me di cuenta de que estaba mintiendo de una manera bastante obvia.

-No eres buena mintiendo- respondió Jungkook enojado, pude notar como sus puños eran apretados con fuerza. De seguro si ella no fuera mujer ya la hubiera agarrado de su ropa para amenazarla y para que así le dijera todo lo que sabía.

Ella se mordió el labio inferior mirándonos a ambos.

-Si mande aquel pastel- soltó un suspiro mordiéndose el labio inferior –pero juro que siento haber puesto laxantes en él. Me pareció divertido- Se disculpó de inmediato haciéndole una pequeña reverencia.

Y yo la mire con la boca abierta ¿Había sido capaz de regalarme un pastel con laxante? Ella estaba loca, lo bueno es que jamás me lo había comido o hubiera ido a parar al baño instantáneamente.

-¿Tu hiciste que?- pregunté con enojo. Ya sabía yo que le caía mal, pero nunca pensé que podría llegar a esos extremos.

-¡Lo siento tanto!- se disculpó de inmediato cerrando la puerta.

Nos fuimos lejos de su habitación o más bien de los dormitorios

-Qué bueno que jamás probaste el pastel- me comento poniendo su mano sobre mi hombro.

-Debo de admitir que prefiero comerme el pastel entero y sufrir dentro del baño, a que me asesinen- le comenté sentándome en unas de las bancas.

Solté un suspiro mirando hacia el cielo. Pude notar como Jungkook se sentaba aun lado de mí.

Pasamos minutos en completo silencio. Aún no encontraba las pistas suficientes de quienes me asesinaban y lo peor es que cada vez se acercaba más la hora de mi cruel destino.

-Deberías de regresar a tu cuarto- le comente con un leve sonrojo en mis mejillas. Estar cerca de él me ponía extremadamente nervioso y ¿Quién no lo estaría con el chico que le gusta? Además ya sabía que mis sentimientos eran correspondidos y habíamos hecho el amor.

-No te dejaré solo, te protegeré- Me comentó entrelazando nuestros dedos y yo me sonroje por aquel contacto tan tierno de él.

-No puedes- negué de inmediato su propuesta, en verdad no quería que le pasara nada y si estaba conmigo él corría el riesgo de sufrir el mismo destino que yo.

-Me asesinan ¿no es así?- me tensé ante sus palabras y solo me limite a asentir -¿Como me asesinan?- pregunto y yo me mordí los labios ante aquella pregunta.

-Tu me tratas de proteger y acabas en el piso desangrado- confesé.

Omitiendo claramente el hecho de que nos acostamos, no era momento de que yo le confesara tales cosas.

-Te protegeré y prometo no morir- me confesó posando ambas manos en mis mejillas antes de que me depositara un pequeño beso en mis labios que correspondí de inmediato.

-Si todo sale bien quiero ser tu novio- confesé con un ligero sonrojo en mis mejillas y no pude evitar emocionarme al ver una tierna sonrisa de parte de Jungkook quien me miraba muy emocionado.

-Me encantaria- me susurro y volvimos a besarnos.

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Este capitulo es corto, pero la buena noticia es que ya solo faltan al rededor de dos capítulos para que la historia termine. Quiero a visar que no habrá una segunda temporada, pues a pesar de que la película tiene segunda parte, no se me ocurrió como continuarla.

Feliz dia de tu muerte (KookV)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora