Dicen que los ojos reflejan el alma, pero nunca creí que esto sea verdad. Si los ojos reflejan algo, estoy seguro de que es la mente, no solo porque sea el homólogo del alma, a demás es porque conozco los ojos de esa chica.
Esa chica tenía una mente que ardía y quemaba, era enorme como el mar, ágil como un hobbit y fuerte como un gigante, deslumbrante como el amanecer cuando no la entendías, pero si lograbas entenderla aunque sea una parte, era como la aurora, llena de colores y majestuosa en su inmensidad celestial.
El alma humana es imposible que sea negra pero os digo que nunca existió un alma tan negra como aquella, mas estaba dividida y sus mitades siempre discutían y luchaban y creaban un alma que llamarla falta de piedad no sería exacto pues esta era como una roca, como el sol, como la tierra, como las estrellas y como el viento: indiferente ante la vida.
Ahora pues entenderéis la prueba de que los ojos reflejen la mente y no el alma, pues si hubiera sido así sus ojos hubiesen sido negros como la noche algunas veces y rojos ardientes como el sol otras, pero estos eran profundos, complejos, penetrantes y brillantes, azules de color y bellos, hermosos como la aurora.
Su piel era tersa y blanca, suave como el metal pulido, pero blanda como el algodón y fina como la seda.
Su cara tenía expresiones inocentes pero siempre llevaba los ojos entre cerrados con gesto indiferente, incluso en los momentos más duros y su pelo, que lo solía llevar corto, era liso y negro como el cuero, tanto que contrastaba con su piel y sus ojos.Sus manos estaban manchadas de sangre por el pasar de los años y por la lucha que suponía sobrevivir entre gente que te usa y no te apoya, tuvo que adaptarse y sobrevivir, de allí salió su alma oscura.
Le gustaba esconderse en sitios oscuros y ocultarse ante el mundo, como su frío sótano donde solía vivir, dormir, comer y dónde a veces hacía algunos trabajos sucios. Podrías decir qué es de esas personas que cagan donde comen, pero no es así, porque su verdadera vida era más al este, la montaña del árbol solitario, o como la llamaba ella en su mente. Era una colina que estaba al este del pueblo donde vivía.
Digo que vivía allí porque es donde hacía lo único que llenaba su mente, escribía cuentos. Probablemente los cuentos más originales e inteligentes que la humanidad se ha perdido, pues nadie nunca a parte de ellas los leyó a pesar de su genialidad. Lo demás de su pueblo, ella lo odiaba y odiaba su gente pues desde que nació por culpa de su pobreza este había sido su yugo y ella pensaba que algún día sería su verdugo, a demás estaba más alla del culo de la humanidad. Es irónico que en realidad el mismo Dios creara el universo con objetivo de aquel pueblo, pero eso es adelantarse a los eventos.
Y estos eventos que hablo empezaron una buena tarde donde la chica, por cierto, llamada Aurora por ella misma, pues no hubo nadie para ponerle un nombre, subía por la colina hacia el gran árbol que se alzaba en la cima, y donde siempre se apoyaba para escribir. Olvidemos la sangre de sus manos pues es pasado y todas las almas tienen redención, o por lo menos la mitad de esta.
Llegó al pequeño claro dónde el árbol de raíces infinitas y tronco tosco se encontraba y se sentó a descansar como siempre. Pasó unos instantes, mientras se limpiaba la sangre de las manos y se dio cuenta del objeto que tenía al lado. Era una pluma negra, grande como un antebrazo, limpia y brillante como si el plumaje del mismísimo Satanás se tratara. La cogió y comprobó que pesaba mucho más que una pluma ordinaria. Por alguna razón acercó la pluma al cuaderno y la utilizó como si escribiera con ella. Aunque parezca absurdo y aunque la pluma estaba completamente seca, esta escribió en negro, aunque no era negro de tinta, era el propio abismo que abrió donde tocó.
Entonces y sin que le diera tiempo a reaccionar, escuchó que alguien la llamaba, miró hacia arriba y vio en el árbol una chica, lo que la hizo dar un salto hacia atrás por el susto e incorporarse.
-Aurora, sube y te enseñaré algo importante.
Ella estaba tan conmocionada que le hizo caso sin decir nada. Poco a poco empezó a subir por las ramas y después de un rato y varios resbalones vio la luz. Siguió hacia ella y llegó a la zona más alta del árbol donde la chica la esperaba.
Miró a su al rededor y vio su pueblo que surgía de una gran explanada como si una colonia de hormigas se tratara. Miró a la chica: era alta y fuerte, tenía los cojos marrones y el pelo castaño y largo, era guapa.
- Este encuentro es innecesario porque he llegado demasiado tarde- empezó la chica mirando hacia el horizonte con una voz que sorprendió a Aurora porque era más ronca de lo que había escuchado antes- pero solo quería ver esos ojos unos momentos más, y aunque tú no sepas quién soy, lo sabrás, pero yo no lo sabré y me querrás y yo te querré. Esta vez no nos destruiremos y esta vez no te llevará el señor pues él me ha encomendado a mí para eso. Es demasiado tarde ahora, te llevaré mañana.
Aurora no sabía que contestar cuando la chica calló, pues no entendía una sola de las palabras que le decía y solo le salió una débil voz cortada.
-Demasiado tarde... Para qu...
-La niebla lo cubrirá todo, todo acabará.
Entonces aurora miró hacia el horizonte y vio una oscuridad como una niebla negra que avanzaba y lo cubría todo. La chica del pelo castaño alzó la mano y un arma en forma de tridente apareció de la nada como un rayo. Dio un salto con tanta fuerza que tiró a Aurora del árbol de las raíces infinitas y cuando aún las dos se encontraban en el aire, lanzó el tridente que se llenó de un brillo como si de un meteorito se tratara, y a esa velocidad avanzó hasta chocar con el suelo mucho más allá de la niebla de horizonte. Se escucho un sonido como el de una bomba que hizo sangrar sus oídos y la empujó en el aire mientras seguía cayendo del árbol. Todo se quedó oscuro.
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Auroras y rocas negras
FantasyMás allá del culo del mundo vive una chica peculiar, y como todas las personas diferentes, su historia también lo es, y mucho. No sé si la escribiré entera porque es muy largo pero iré subiendo capítulo a capítulo a ver a donde llego :)