𝐌𝐢 𝐩𝐞𝐪𝐮𝐞𝐧̃𝐚 𝐃𝐢𝐠𝐠𝐨𝐫𝐲| 𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐 𝑴𝒂𝒍𝒇𝒐𝒚

✔𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏|𝑫𝒆𝒗𝒖𝒆𝒍𝒕𝒂 𝒂 𝑯𝒐𝒈𝒘𝒂𝒓𝒅

Termine de peinar mi cabello para salir ya lista de mi habitación dirigiéndome a la sala de estar, donde se encontraba mi hermano y mi papá, esperándome.

Hoy, 31 de septiembre, vamos a salir con los Weasley y el famoso Harry Potter, hoy por fin lo iba a conocer.

—¿Lista, princesa? —preguntó mi querido hermano con una sonrisa.

—¡Siempre! —respondí entusiasmada.

No me habían querido decir para donde íbamos, pero tengo leves sospechas de que es un partido de quidditch.

Mi papá nos hizo una seña para que nos acercaramos y los tres tocar el traslador. En un abrir y cerrar de ojos ya estábamos en el bosque donde nos encontraríamos con los Weasley.

Cedric me tocó y empezó a correr para que lo alcanzara, solíamos jugar así muy seguido. Comportandonos como niños la mayor parte del tiempo.

Al cabo de unos minutos, vimos como los Weasley se acercaban, Cédric y yo nos miramos de una manera cómplice, para luego subir el árbol más cercano lo más rápido posible.

Mi papá saludo a la familia como si nada, y cuando preguntaron por nosotros, bajamos de un solo brinco del árbol, haciendo una especie de entrada sorpresa, dejando con un pequeño susto a los presentes.

—¡Oh, si es el apuesto Cédric y la pequeña ____! —exclamó contento el señor Weasley.

Mi papá había hablado bastante de él, pero hasta ahora, no lo conociamos, bueno, yo no lo conocía.  Es un señor de al menos 47 años, creo; con un cabello casi del mismo tono que una zanahoria, además de ser muy alegre. Me recuerda bastante al típico personaje de libro que su única función es hacerte reír y pasar un buen rato.

—Un placer en conocerlo Señor. —Extendió la mano mi hermano, saludando.

—Hola, un gusto conocerlo al fin señor Weasley —saludé con una sonrisa.

—El placer es mio chicos. —Sonrió mostrando sus algo amarillentos dientes.

—¡Bueno, vamonos entonces! —exclamó mí papá con entusiasmo empezando a caminar un poco mas alejado del árbol.

Mire por encima de mí hombro divisando que la hija de los Weasley y Hermione, no dejaban de mirarme a mi y a mi hermano de una forma que no pide descifrar.

Ahora que me pongo a pensar, no tengo el menor contacto con el trío de oro, solo los conozco desde lejos, y alguno que otro intercambio de palabras en el gran comedor cuando almuerzo con Ariana y Drinyam, mis mejores amigos.

Seguí caminado cuando un chico más alto que yo, de cabello castaño, ojos marrones y de varias pecas en el rostro, se acercó a hablarme, me parecía conocido de algún lado.

—Hola, soy Mikhail, mucho gusto en conocerte —saludó extendiendo au mano.

—Hola, soy _____, el gusto es mio —respondí con una sonrisa—. ¿Nos conocemos de alguna parte?, me pareces conocido —pregunté curiosa.

—Soy el hermano menor de Hermione, de hecho, estamos en el mismo año, tercero —contestó amable-

—Wow, ¿en serio? —Él asintió con una sonrisa— Con razón te me hacías conocido.

La verdad, no tengo ninguna intención de juntarme mucho con Hermione Granger, dudo mucho que nos llevemos bien.

—Sí, te he visto en clases y por los pasillos, pero nunca me animé a hablarte. —Rascó su nuca mirando el césped que pisabamos.

—Entiendo, normalmente me la paso siempre con mis amigos —aclaré mirando a Cédric para no perdernos.

—¡Ah!, si, el hijo de Snape y la chica pelinegra bajita. —Asentí con entusiasmo, aunque me parecía raro que supiera tanto de mi.