DÍA 28. HACIENDO ALGO RIDÍCULO

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La pareja de erizos se encontraba en el supermercado junto con su pequeña hija que estaba sentada tranquilamente en el asiento especial en el auto de compras y miraba todos los productos con fascinación

-Bien, ustedes vayan por la comida mientras yo busco los pañales para Zoey y los productos de limpieza, no quiero nada de travesuras y cuando terminen nos vemos enfrente de la panadería ¿de acuerdo?-

-Si papa-su novio miraba los juguetes sin prestarle la más mínima atención a lo que decía

-Ti papi-

-Bueno, los veo más tarde-besó la mejilla de su novio, la frente de la pequeña y se fue perdiéndose entre la gente, Scourge no esperó mucho y comenzó a caminar con su carrito mientras su hija tenía la lista en sus pequeñas manos

-Muy bien, vamos a ver los juguetes-

-Pedo da dista-

-Ahorita vamos con la lista, primero los juguetes-miraban todo fascinados por tanta variedad que ofrecían-Oye mira un dinosaurio gigante-Zoey miró el gigante juguete y presionó un botón haciendo que rugiera con fuerza asustándola en el acto, su papa no pudo evitar reírse pero rápidamente la consoló

Siguieron mirando los juguetes y echando unos cuantos al carrito como una pelota, una muñeca, otra pelota y una tortuga de peluche sabiendo que si ponían una cara triste Zonic no podría decirles que no

Al terminar sus compras improvisadas se enfocaron en la lista caminando por los pasillos llenos de comida, lo malo es que tanta comida comenzaron a abrir los apetitos de padre e hija y eso que habían desayunado

-Mierda, tengo hambre y no están dando muestras-

-Mada padaba papi-Zoey lo señaló al escucharlo decir dicha palabra que tenía prohibido decir

-Sí, pondré el dinero cuando lleguemos, lo siento princesita-

-Eta bie-una de las tantas reglas de Zonic era que si alguien en el castillo decía una mala palabra en presencia de su hija debía de dejar en un pequeña moneda frasco como castigo

Agarraban varias cosas que iban encontrando mientras trataban de aguantar el hambre y trataban de resistir la tentación de abrir algo pero la pequeña no pudo aguantar más y "discretamente" comenzó a comerse un poco del chocolate que habían comprado embarrándose por completo su pequeña cara

-Muy bien, que sigue en la lista Zoey...¿pulguita?-la gatita miraba al lado contrario al de su padre con tal de que no la viera-¿Qué traes en la boca?-su hija se tapó la cara con su pequeño suéter-Si le mientes a papi entonces me comeré yo solito los dulces que guarda el Robocop y no te dejaré ni uno-al ver que no se movía para nada tuvo que hacer su amenaza aún más fuerte-y no te compraré tus jugos de mango-al ver que sus jugos favoritos estaban en riesgo ella mostró toda su cara manchada y la bolsa abierta

-Tedia ambe, do sieto-

-¿Quedó uno para mí?-Scourge sin dudarlo se comió el ultimo chocolate que quedaba y guardó la bolsa en su chaqueta-Descuida, lo voy a pagar y de paso compramos más-

-Do sieto, doy mada-la gatita bajó sus orejas temerosa de recibir un regaño pero el erizo verdoso tan solo acaricia su cabeza

-No lo eres, solamente tenías hambre y ya está, no te pongas triste que no es para tanto y si tienes hambre dímelo a la próxima y te compro algo de afuera pulguita-

30 días con mi OTPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora