Cazadores de Brujas ✡𝒴𝑜𝑜𝓃𝑀𝒾𝓃✡ OMEGAVERSE

↝✡𝓟𝓻𝓸𝓵𝓸𝓰𝓸✡↜

Oscuridad... 

Eso era lo que podía ver a su alrededor, solo oscuridad, volteo a la derecha y pudo ver, un poco borroso claro, unos arboles. Se agacho en su lugar con miedo y con ayuda de sus manos se tapo los oídos; cerrando muy fuerte sus ojos; al escuchar de nuevo esa horrible risa, esa risa que le indicaba que iba a morir ahí mismo; empezó a temblar mas de lo que ya temblaba, cuando oyó un crujido cerca de el.

―Aquí estas― vio a esa horrible criatura frente a el, con una sonrisa que decía todo lo que iba a pasar en ese momento― Porque huyes de mi pequeño― pregunto mientras se acercaba a el haciendo que cayera de espaldas al duro suelo de tierra― Yo solo quiero que vayas con tus otros familiares... Que se encuentren en el mas haya― dicho esto se lanzo sobre el chico de cabellos negros para comérselo.

―No!!― grito intentando quitar a esa bruja negra de encima de el― Por favor no― de sus pequeños ojos empezaron a brotar lagrimas que empaparon sus mejillas pálidas por el frió que en ese bosque hacia; si solo no hubiera entrado al bosque, si solo me hubiera quedado con ellos, si yo solo... yo solo...; pesaba mientras con desespero trataba de escapar de las garras de esa bruja negra.

―Quédate quieto mocoso― demando la mujer con rostro horrible― No te podre comer si te mueves tanto― se quejo abriendo la boca y acercándose al cuello del niño que estaba bajo de ella.

―Oye tu, estúpida bruja― se escucho en medio de los gritos del niño esa voz un poco grave y desconocida para los dos― Deja al niño tranquilo― dijo aquella mujer de cabellos marrones apuntando a la bruja con una de esas armas especiales para cazadores de brujas.

―Bueno... Tu eres mas grade― sonrió de manera macabra y se alejo del niño quien al ver eso se levanto corriendo para esconderse detrás de un árbol que se podía ver entre la oscuridad― Si tu no me llenas... El niño sera mi postre― dicho eso la bruja se acerco rápidamente a la mujer que defendía al niño; eso de defender a otros en ese pueblo estaba prohibido por la seguridad de todos, solo dejaban que se los comiera las brujas a los que eran desafortunado, pero esa mujer era la muestra de que tenían que defenderse y no depender de cazadores.

Por otro lado, detrás de aquel árbol el pequeño niño temblaba al escuchar gritos y disparos, los gritos que daba aquella bruja lo hacían estremecer, tenia miedo, mucho miedo de morir como los demás integrantes de su familia, su pequeña hermana fue raptada por otras brujas y eso quería decir que la iban a matar y el temía de eso, ella no podía morir, Ella no puede morir. Salio de su escondite al percatarse de que ya no habían mas gritos, la mujer que lo había salvado estaba sentada en el suelo cerca de la bruja que ya estaba hecha polvo.

―Oye niño...― llamo la mujer haciendo dar un pequeño salto al niño― Estas bien― pregunto viéndolo con una sonrisa, a lo que el pequeño asintió en respuesta a la pregunta que le hizo la mujer― Acércate que no muerdo― el niño se acerco con cautela― Soy ChaeRin, Jeon ChaeRin, y tu como te llamas― pregunto sonriendo.

―S-soy YoonGi, Min YoonGi― se presento con timidez sacando le una risita a la mujer llamada ChaeRin.

―Cuantos años tienes... Parece tener unos 10 años― pregunto levantándose de donde estaba sentada.

―Tengo... 13 años― dijo en un susurro que casi no escucho ChaeRin...

...

―Hyung ya llegamos― dijo aquel chico de cabellos castaños al hombre que acababa de despertar de el sueño que siempre tenia, el hombre termino de despertar y observo todo a su alrededor encontrándose con el pueblo que seria su siguiente objetivo.

...

―Querido pueblo hoy les traigo a los mejores cazadores de brujas para que encuentren a todos los niños que se han perdido― dijo el viejo a la gente que estaba reunida en la plaza de aquel pobre pueblo- Ellos nos van a matar a la bruja que se llevo a los niños.

―Pero ese chico que esta hay no es una bruja― se escucho un grito desde el publico― Maten a esa bruja disfrazada.

―Si quémenlo― se volvió a escuchar.

―Quémenlo, quémenlo― empezaron a decir todo el pueblo reunido.