Estrella Fugaz

COMIENZO

Aeropuerto Internacional de Tokio, Japón.

"Finalmente estoy aquí... finalmente cumpliré mi sueño", una gran sonrisa se formaba en el rostro animado y feliz del joven. "Además..." bajo un poco su mirada y su sonrisa se suavizo al recordar aquellos tiempos, "Además, podre volver a reencontrarme con Tenn-nii".

Sonido de llamada entrante - Ring...ring...

"¿Hola?", pregunto Riku, respondiendo la llamada entrante.

Al otro lado de la línea...

"Hola Riku, ¿Ya llegaste a Japón?"

"Sí, recién acabo de llegar mamá", respondió Riku.

"Ya veo, me alegro, por cierto, ¿Cómo te sientes?, ¿Te sientes cansado?, si es así descansa un poco, no quiero que te sobre esfuerces mucho, un viaje es cansado y agotador, deberí---", dijo en un tono preocupado.

Riku que escuchaba el tono preocupante de su madre, la interrumpió antes de que se preocupara aún más.

"Mamá, estoy bien, te preocupas demasiado", suspiro, no era la primera vez que ocurría algo así. "No me siento cansado ni agotado, de hecho, me siento con mucha energía", dijo con un tono de voz animado.

"Es bueno escucharlo, pero si algo malo suce---".

"¡Mamá!", Riku levanto un poco la voz, sabia el tipo de persona que era su madre, así que siempre trataba de interrumpirla antes de que dijera algo más.

"Está bien, está bien, no diré nada más, pero cuídate mucho y llámame todos los días ¿bien?----".

"¡Rikuuuuuuuuu!"

Una voz infantil se escuchó al otro lado de la línea interrumpiendo su conversación.

"¡Te extraño! ¿Cuándo volverás?", pregunto un niño, quien se encontraba un poco solo y triste. 

"¡Shun! Ya te he dicho cuándo volverá tu hermano, ¿porque siempre preguntas eso?, además mamá está aquí". La madre se molestó un poco y a modo de broma le dijo:
"¿Que acaso no quieres a mamá?".

"Si quiero a Mamá, pero ahora quiero a Riku...además Riku me da dulces, je je je".

"¿Qué?", la madre hizo una expresión plana, ante tal respuesta, pero solo Shun podría verla, sin embargo, Riku al escuchar la respuesta de su madre en ese tono, sabía que expresión estaba haciendo. 

Riku comenzaba a entrar en pánico, los dulces era un secreto entre él y su hermano menor, ya que sus padres no permitían que comieran golosinas, debido a las caries que podría provocarles.

"Mamá, debo irme ahora, si no se hará más tarde, nos vemos, bye bye", Riku hablo en un tono nervioso, estaba seguro de que lo reprenderían, y eso sería un problema, porque cuando era reprendido, era por un rato, y por rato, se refería a un rato largo.

"Espera jovenci—".

Llamado terminada.

"(Más tarde seré regañado)", pensó Riku para sí mismo, y con una expresión de cansancio en su rostro.