𝖒𝖚𝖘𝖊 𝖔𝖋 𝖍𝖊𝖑𝖑

El Laberinto

- Ezra, quiero que sepas que cualquier cosa pueda llegar a salir mal en estos días puede ser horrible, es la fiesta de Halloween.
- Lo se, por eso no quiero arruinar nada.
- Si lo se, pero bueno, tal vez no fue tan buena idea agregare, eres nuevo miembro de nuestro comité.
Soy Ezra Browkz, estudio el tercer año de preparatoria, por alguna razón quise entrar al comité estudiantil, solo fue un impulso, algo que llamaba a estar aquí, que aquí encontraré algo.
- Hola Ezra, suerte en tu primer día.
- Oh... gracias Alyssa...
Esa chica es Alyssa Sanderson, alta, delgada y con un cabello rubio y rizado muy largo, su piel me hacía despertar toda una escalofriante sensación en mi cuerpo. Y su voz, su voz es tan atragante, que quisiera escucharla por horas y horas.

- creo que ya se por que entre.

- Aly, ¿qué harás para tu parte de la fiesta?.
- haré un pequeño huerto de dulces y calabazas al final del laberinto que estamos planeando, me ofrecí como voluntaria para esa parte pero creo que necesitaré ayuda.
- Oh, yo podría ayudarte Aly, puedo llevar una carretilla y herramientas, estoy a tu disposición con lo que gustes.
Alyssa sonríe un poco y toma la mano de Alan.
- Gracias Alan, eres muy amable, pero creo que necesitaré una ayuda más especial para este caso...
- ¿ah?, ¿como quien?
- Creo que... como Ezra, el sería de una gran ayuda para esta ocasión.
- ¿que?, pero Aly, es el nuevo, no creo que pueda ayudarte en el...
- Yo se que él puede, para ser exactos, el es muy bueno para estas cosas, creo que iré a buscarlo, nos vemos.

Durante días, antes de entrar al comité, observaba cómo Alyssa me miraba, en el recreo parecía que su cabello me observaba, como si tuviera ojos por detrás, incluso un día antes de mi entrada... soñé con ella. No recuerdo casi nada de lo qué pasó, pero si recuerdo su suave y bella piel junto a mi cuerpo, todo tan real. Desperté con varios rasguños en mi pecho, supongo que por la forma en la que me imaginé con ella.
Mi querida Aly, era lo que más anhelaba en esos instantes.

- Hola Ezra, ¿cómo estás?
- Ho... Hola Aly, estoy muy bien, gracias, ¿tu qué tal?
- estoy excelente, oye... quería pedirte un favor, quiero que me ayudes a hacer mi parte del laberinto, no pensé en nadie más que tú para esta tarea.
- ¿Yo?, pero... ¿por que...? !CLARO QUE SI!, yo te ayudo.
- Ok, nos vemos esta noche en la entrada del laberinto.

Había algo que me hacía preguntarme el por que yo, sabiendo qué hay chicos más expertos en el comité. Pero algo era seguro, no faltaría.

6:50 PM

Llegue 10 minutos antes, mis piernas temblaban mucho y trataba de no sudar.
- Hola Ezra, llegaste muy temprano también, mira lo que traje para empezar.
Alyssa trajo una carretilla con tres grandes calabazas, algo muy pesado para una sola chica.
- Son increíbles Alyssa, pero, ¿como las trajiste tu sola? Se ve que están muy pesadas.
- No las traje yo sola, algunos me ayudaron, fueron tan amables.
- oh, ¿y donde están ahora ellos?
- Pues se fueron por otro lado.

Todo parecía normal, decoramos en el centro del laberinto muy esmeradamente, por alguna razón, Alyssa avanzaba muy rápido, tanto que parecía que muchas otras personas la ayudaban.

- Me canse un poco, ¿y tu?
- mmm, pues aún no mucho.
- Ezra, ¿por que estas tan nervioso?
- ¿de que... hablas?
- Lo noto muy rápido, ¿que esperas que pase?, yo se que quieres.

Alyssa se levantó y se acostó en las calabazas que pusimos en el centro, me sentía muy atado, pude sentir como olía un humo extraño, perdí la noción del tiempo completamente... pero no me disgustaba, su cuerpo me llamaba.
Todo empezó realmente rápido,  el tiempo se perdía, algo... algo se siente en mis piernas... ¿que es lo qué pasa?...
Procedía a observar que era cuando Alyssa tomó mi cabeza y susurró algo a mi oído.

- Ezra... ¿esto sentías cuando lo hacías con... Rossana?

Mi cuerpo se paralizó, un mareo llegó, pude sentir como el sudar bajaba de mi frente.

- ¿acaso no recuerdas como gritaba?, ¿como te pateaba y arañaba? Como sus uñas se rompieron al intentar hacerte algún daño, ¿o recuerdas más su blusa amarilla y su pantalón negro?

En ese momento desperté de lo que me tenía petrificado, pero... ¡NO ESTA!... ¿que... esta?.
Ezra pudo observar como en lugar de Alyssa estaban las calabazas muy podridas y que tenían un líquido carmesí muy espeso.
- todo este tiempo... ¿fueron las calabazas?... ¿que mierda esta...?

- No hiciste esa cara al terminar con Rossana, tu cara fue más de... Satisfacción... ¿no te satisfacío este gran encuentro?, no te arrepentiste con Rossana.

- ¡¿QUE CARAJOS TE PASA?, ¿DE QUE HABLAS?!
Trate de correr en ese instante pero tropecé con las calabazas, entonces pude observar algo que me dejo aún más pálido, el pánico me consumió.
Tres cabezas de tres chicos estaban dentro de estas... sus expresiones eran de un susto inexplicable y horrible.
Corrí lo más fuerte que pude, pero el laberinto parecía nunca terminar, el cielo estrellado parecía descender en una niebla espesa que quemaba mi piel, un calor sofocante recorría mi cuerpo.
- ¿Cuanto he recorrido?....
Parecían horas, pero me sentía ahora a salvo. De pronto pude ver tres siluetas a lo lejos.

- ¡OIGAN!, ¡AYUDA POR FAVOR!, ¡¿ME ESCU...?!

Pude notar que aquellos chicos no eran normales, algo... algo led faltaba.

Tres chicos sin cabeza y con un humo saliendo de su cuello sangriento venían lento pero parecían dar saltos en el tiempo pues se acercaban muy rápido a la vez.
- ¡¿QUE DEMONIOS?!
Corrí con las pocas fuerzas que me quedaban mientras que escuchaba risas detrás de mi. En un momento pude ver como unos orbes o sombras salían del suelo hasta que sentí que lograron atraparme. De pronto solo todo se oscureció.

- Ezra, despierta... ya es hora de hablar.
- ¿que?, ¿Alyssa?
- Ve más de cerca...
- aah, ¡¿QUE?!, ?¡¿COMO PUEDES SEGUIR VIVA?!
El miedo más aterrador se expresó en la cara de Ezra.

- ¡SORPRESA!, ¡¿TE FASCINA VERME DE NUEVO?, ¡SOY LA CHICA A LA QUE DESEABAS!, ¡ROSSANA!

- Pero... yo.... yo te elimine....
- Pues... no lo hiciste bien... te enseñaré como, ¿que dices?, déjame enseñarte cómo se elimina realmente la cordura de un enfermo.
Ezra solo empezó a llorar y a marearse, pues estaba atado y casi desnudó a una ruleta que giraba lentamente.
- Ahora dime, descuida, solo usare tu cuerpo sin tu permiso, no creo que te moleste, tú lo hiciste.

- ¡MALDITA!, ¡ALYSSA O ROSSANA SOY CAPAZ DE TOMARTE HASTA LA MUERTE!
- Pues, yo soy capaz de destruirte mientras sigues viviendo... ... recuerdo que dijiste que te pasarías horas escuchando mi voz... bueno... te lo concederé...

3 de noviembre

"Joven es encontrado en estado psicótico, causa horror en festival de Halloween"

- ¿estuviste ahí?, todo fue tan raro.
- Se descubrió luego de meses quien hizo tales y horribles cosas a Rossana.
- escuché que su mente quedó dementé para siempre.

No importa que haga o que intente... ahora ella tiene el control...y nadie me escucha por más que grite... mi agonía nunca acabará... solo escuchó su voz... su maldita voz... y solo siento las horribles torturas y golpes que me da Rossana...

- Es todo tuyo... un castigo peor que la muerte... que lo disfrutes, Rossana.
- Claro que lo haré, gracias...

Se acercó a la pobre víctima y la tomó suavemente.
- Hasta luego, Ezra, saldré de aquí... fue un gusto... mi nombre es Oriana.

Ezra quedó internado en un asilo para toda su vida mortal, la cual sólo gastó gritando y admitiendo eternamente los actos contra Rossana. Pero por dentro y en su vida después de la muerte, esta acompañado por siempre por ella sin ningún respiro o descanso alguno.