CAPÍTULO 1

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Martes 11, junio de 202x.

Era mediodía cuando los estudiantes se preparaban para sus clases respectivas de música y arte, como yo debería estar haciendo. Pero, lamentablemente, me encontraba atrapada en un lugar apartado del campus. Estaba contra una pared mientras un grupo de chicas bloqueaba el paso.

—¿No te dije que debías rechazar ese papel?— Aclamo Vanessa, contraria a su apariencia encantadora y hermosa era detestable. 

—Oye, ¿qué te pasa? ¿ahora no puedes hablar?— Dijo ahora otra chica, era una las amigas de Vanessa.

—Deberías dejar de cantar y buscar algo más 'adecuado' para vos, pobretona.— Continuó la chica, que apodó más original para la becada, ¿verdad? Aunque lo que dijo no es una mentira.

Estoy cursando mi penúltimo año en el prestigioso Instituto de Edensville, donde todos los estudiantes pertenecen a familias de magnates; con padres influyentes que tienen grandes empresas o conglomeraciones, incluso algunos son actrices o cantantes. A diferencia de mí, que no tiene dónde caerse muerta.

Mis padres fellecieron hace unos años ocasionando que me quede en un orfanato, pero gracias a mis esfuerzos puede conseguir una beca 100% con la residencia incluida.

Tratando de ignorar las provocaciones, estaba buscando una salida. Sin embargo, no encontré ninguna, nos encontrábamos cerca las escaleras que daban a la azotea del edificio de los dormitorios, Vanessa y su amiga estaban delante de mí. Mientras tanto, en medio de las escaleras, dos chicas más se encontraban vigilando por si ocurría algo. 

—Déjenme en paz.— Murmure, pero entonces Vanessa le hizo una señal a su amiga y ella fue por un balde, no puede ver muy bien lo que contenía, tampoco quería saberlo. Pero lo siguiente que vi, o más bien sentí, fue el contenido del balde vertiéndose sobre mí; era basura, tanto papeles arrugados como la comida que servían para el almuerzo.

—Ya te lo dije, si sigues interponiéndote en mi camino te haré la vida miserable.— Dijo Vanessa con un tono amenazante, para luego irse del lugar con las demás chicas.

Cuando por fin me quedé sola sentí un nudo en la garganta, me sentía frustrada e impotente. Aunque esto no es algo nuevo para mí, nunca podría acostumbrarme. 

Recuerdo cada insulto cruel, cada burla mordaz que he soportado a lo largo de los años. Siento como si estuviera atrapada en un abismo sin fondo, tal vez no valía tanto la pena seguir aguantado.

Luego de un tiempo me dirigí a mi dormitorio, claramente no podía ir así a las clases. Afortunadamente, no había nadie en los pasillos supongo que la mayoría ya estaba en clases.

Ya dentro de mi cuarto, me quité el uniforme dirigiéndome al baño. Los dormitorios eran espaciosos e individuales, estaba conformado por un baño cerca de la puerta de entrada, al igual que el armario, una cama individual, donde en cada mañana se reflejaba la luz del sol y al costado de la misma estaba el escritorio. 

Los dormitorios están divididos en dos edificios uno para chicas y otro para chicos, cada uno de 3 pisos. No todos los estudiantes se quedaban en acá, en si era para los estudiantes que vivían lejos, de intercambio o becados como yo.  Aunque tampoco hay tanto becados, creo que solo hay 5 en todo el instituto.

En fin, ya con ropa más cómoda mire mi celular y eran las 3:00pm así que decidí ver las redes sociales.

De pronto recibí un mensaje, era mi única amiga; Emilia. Ella era amable y divertida, cuando entré al instituto pensé que sería difícil hacer alguna amistad, pero luego apareció y me empezó a hablar alegremente mientras me ofrecía su ayuda para cualquier cosa, desde entonces empezamos a hablar poco a poco y nos convertimos en buenas amigas.

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⏰ Última actualización: Jul 18 ⏰

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