Capitulo 5

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No pasó mucho tiempo cuando mi madre Alura regresó a Argo, J'ohnn entró anunciando la aproximación de otra nave, Eliza y Cat se ofrecieron a cuidar a Lorna mientras nosotras nos dirigimos a recibir a la nueva nave con esperanza de que no haya sido Lillian nueva mente; en cambio un relámpago rojo salió de esta mostrando a uno de mis mejores amigos
—Barry
—hola Kara
Me acerqué a él para darle un gran abrazo
—¿qué haces aquí? ¿Como encontraste Terra?—bueno Cisco me ayudo a buscarte después de saber lo qué pasó en Tierra 38... por cierto no vengo solo.
Varias personas salieron de la nave, recocí a Iris, Cisco y Caithline pero a los no
—¿Barry que ocurrió en Tierra 1?
— bueno hay un asesino de meta humanos, no pude detenerlo ninguno de nosotros pudo... son todos los metas de Tierra 1 que saben y no que son metas... necesitamos donde quedarnos
—vinieron al planeta correcto. Me dirigí al grupo de gente con Lena a lado mío tomando mi mano —Bienvenidos a Terra, somos un planeta donde convivimos pacíficamente alienígena y humanos después de haber sido desterrados de nuestra Tierra, ustedes son bienvenidos a permanecer aquí, tendrán una nueva vida, empezarán de cero, solo deben seguir tres simples reglas, no robar, no matar y llevarse bien entre humanos y alienígenas. Soy Kara Zor- El, reina de Terra, a mi lado esta Lena Luthor es mi prometida y también es reina, el palacio mantiene las puertas abiertas para lo que necesiten, tendremos un parlamentó en un par de meses, aquellos que en Tierra 1 fueron criminalmente tienen la oportunidad de reinventarse ¿alguna pregunta o comentario?
—larga vida a las reinas! Escuche gritar a un hombre con un ojo muy extraño, el resto de las personas repitieron el grito. Me despedí de Barry ya que debían instalarse además de que mañana pasarían a conocer a la pequeña Lorna; Lena y yo regresamos para estar con nuestro pequeño ángel, agradecimos a Cat y a Eliza, después de explicar nuestros nuevos huéspedes en Terra nos dejaron a solas
—pero qué día
—es demasiadas cosas que ocurrieron en un día, tengo ganas de dormir de inmediato con mi hermosa prometida y nuestra pequeña princesita
—ya somos dos Lena
Ambas intercámbianos sonrisas, acomodo un mechón de la melena de Lena acomodándola detrás de su oreja sin dejar de sonreír enamorada, mañana será un largo día.

El exilió  [suspendida por falta de creatividad]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora