Dos 👁️Una princesa color negro👁️

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—Me alegra que comiences a tener amigos otra vez mi niña —mi madre dice con su voz dulce, poniéndome un mechón de cabello detrás de la oreja, después de haberle dicho que Axel se quedará

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—Me alegra que comiences a tener amigos otra vez mi niña —mi madre dice con su voz dulce, poniéndome un mechón de cabello detrás de la oreja, después de haberle dicho que Axel se quedará

—Si.. mamá —miro hacia abajo

—Tienes que olvidar lo que pasó con esa muchacha hija —toca mi hombro, y me mira con lástima

Entonces la miro
enojada —Nunca la voy a olvidar mamá, ¿Entiendes? —y lo
repito— ¡Nunca la voy a
olvidar! —salgo de su habitación y cierro la puerta fuertemente

—¿Axel? —miro a izquierda y derecha, preguntándome si escuchó lo que sucedió

—Qué pasó con.. ¿La muchachita?

—La muchachita no,
Shanon —respondo recordándola

—Bueno.. ¿Qué.. pasó con
Shanon? —pregunta, siempre con la misma timidez de al principio

—No quiero hablar de eso, ¡Y no voy a hablar de eso! —digo entre dientes, aguantando emociones

Siempre hablar de Shanon me hace explotar
Miro la puerta cerrada de mamá, me siento mal por haber actuado así.
¡Pero siempre pido perdón!
Mi madre sabe lo que causa en mi escuchar de Shanon, y ella sigue hablando de ella como si nada

Axel no tiene la culpa.

—Oye, lo.. siento —me disculpo tomando su brazo antes de que se aleje más.

El me mira fijamente
—No te preocupes, está
bien —sonríe cálidamente

—Bueno, vamos a mi habitación, debes estar cansado —comento antes de que pregunte más sobre Shanon

Caminamos hacia mí habitación, y ponemos una colchoneta con unas cobijas encima para Axel.
Estamos acostados, él mirando hacia la ventana, y yo a el otro lado.
Estaba a punto de dormir, pero Axel me despierta con los ruidos que hace, al parecer no puede dormir

—¿No puedes dormir? —me volteo, y me asomó hacia abajo viendo a Axel
Él también me mira

—N..o —tartamudea —Perdona si te molesto, ya dormiré

—Tranquilo, a veces pasa
—sonrío —Y si.. ¿Te cuento un cuento?

Él ríe por un segundo, y cambia su cara a una seria, arrepentido.

—Existe una princesa, la más hermosa, solidaria y humilde de todas —digo empezando el cuento —Pero tiene una oscura realidad —hago suspenso— Desde que Tom, su hermano murió, sus padres maltratan a la hermosa princesa, golpeándola sin razón.
Axel se sienta en posición "flor de loto" poniéndome atención

>>A pesar de que su vida es terrible, ella trata siempre de ser buena persona, ella es un ángel —sonrío, imaginando el cuento— Su nana, es la única que la ama, un día, esa hermosa persona, decide sacarla de ese terrible lugar..

>>-No hagas ruido Tania, nos van a
escuchar -susurra la nana saliendo de la mansión

>>—Es que.. estoy tan feliz, esto al fin va a terminar —la toma de las manos con emoción

>>—Si mi niña, pero, tenemos que irnos ya, o nos van a ver

>>La nana, y Tania, logran salir de la pesadilla, y al fin, después de tanto tiempo, Tania es libre, los moretones se borrarán, y todo será sólo un mal recuerdo

—Que lindo cuento —habla
Axel —Pero.. no siempre hay un final feliz —me mira fijamente, y con un toque de tristeza

—Creéme que lo sé —él me mira con confusión, y yo decido dejarlo con la
duda- Bueno, ya vamos a dormir, mis ojos están a punto de cerrarse

Él, sin decir algo, se acuesta de nuevo, y se voltea hacia la ventana
Yo hacía el lado contrario, como al principio.

Y mi sueño comienza..

—¡Ya vete! —le grito— ¡Vete ya!, ¡Ve a descansar, y déjame a mí en paz! —corro, y corro, buscando algún escondite

—No me mires, no me hables, no me escuches, ¿Lo recuerdas? —me mira melancólica.
Y de pronto, ya no puedo correr, no avanzo, a pesar de el esfuerzo que hago.
Una imagen de Axel en el bosque, justo como lo ví hoy, se hace presente, tan grande como el universo, frente a mí.

—No me mires, no me hables, no me escuches —me susurra al
oído —Debes creerle, el dice la verdad

—¿De qué hablas? —mi respiración aumenta junto con mis
latidos —¡Cállate
ya! —siento como todo me da vueltas, la cabeza comienza a dolerme, y estoy perdiendo la respiración

Sólo tienes que escucharlo, él podrá mostrarte..

Y despierto

Como si hubiera salido de el agua, siento como mis pulmones se llenan de aire.
La tranquilidad llega para mi organismo.
Pero no para mi mente.

Ella quiere que yo le crea.

Al reaccionar por completo, noto que Axel no está en el suelo.

—¿Axel? —pregunto sabiendo que no responderá.

Me levanto rápidamente, y salgo de mi habitación, al recorrer la casa, veo que mamá se ha ido al trabajo.
Axel no está.

—¡Por favor no! —escucho un grito desgarrador a una distancia no tan larga
Camino, mis oídos me guían

—¡Lo siento! —escucho a Axel —¡No es lo que yo quiero! Pero si no lo hago, me matarán

BUM

Un disparo inunda al rededor, silenciando todo, todos.

—Axel.. —lo miro, temerosa y preocupada
Tengo miedo de él
Creo que va a dispararme.

Pero él, tira el arma, y se suelta a llorar, desesperado

—Yo no quiero hacerlo
Michel —puedo ver una lágrima en su mejilla —Lo siento, lo siento, lo siento

—Te ayudaré Axel, lo
prometo —digo, sin pensar, recordándola diciéndome que debo creerle, y lo abrazo.
El se queda estático, llorando aún.

—Vas a quedarte más tiempo, para poder descubrir cómo
ayudarte —tomo su barbilla, y la levanto— Escucha Axel, lo lograremos
Le muestro una pequeña sonrisa, y vuelvo a sus brazos.

Le creo, claro que sí

No Soy Un Chico BuenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora