Monkey D. Luffy, un joven de 17 años, sueña con ser el rey de los piratas. Luffy se encontraba en un bote, hace poco había partido al mar para cumplir su sueño. Se encontraba durmiendo hasta que una extraña luz lo cubrió y desapareció.
Monkey D. Luffy, un joven de 17 años, sueña con ser el rey de los piratas. Luffy se encontraba en un bote, hace poco había partido al mar para cumplir su sueño. Se encontraba durmiendo hasta que una extraña luz lo cubrió y desapareció.
-Que rayos-habló un hombre alto y musculoso con bigote blanco
Sentado a su lado se encontraba sus "hijos" como el les llamaba. Dando un vistazo a la sala se encuentra con sus viejos enemigos, Garp el "héroe" y Sengoku el "buda".
La inmensa sala estaba llena de piratas y marines reconocidos y no reconocidos. Las personas al ver a sus enemigos quisieron usar sus habilidades otorgadas por su fruta del diablo y aquellos que poseían haki lo intentaron usar, todo normal todo correcto hasta que se dan cuenta que no pueden. Gritos de terror, de los débiles, se escuchan en la sala, debido a que la luz que los iluminaba se apagó.
Una faro ilumina una entrada y sale un rubio de ojos azules con una capa de nubes rojas y un bandana con el símbolo tachado/rayado *haya ustedes como lo entienden*
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-Bueno, un placer conocerlos. No intente hacer algo estúpido o les puede costar caro, elijan si quieren irse, me quedo con su vida o quedarse a ver lo que les voy a mostrar conservando su vida. *dice el recién llegado con una sonrisa de victoria sobre los piratas y marines.*
-Bueno, no es como si dieras a elegir-*dijo un rubio que se encontraba fumando un cigarrillo*
-Ya con esa parte aclarada, puedo continuar. Hagan sus preguntas yo las respondo, si quiero. *dijo y casi todos levantaron las manos* Haber tú el que parece una piña *dijo señalando a un hombre con peinado de piña*
-No soy una piña, mi nombre es Marco y soy el primer comandante de el grandioso pirata Shirohigue *dice con orgullo* Mi pregunta ¿quién eres? *señalando al rubio ojos celestes*
-Una persona que perdió una apuesta y ahora trabajo para alguien pendejo que me mandó con ustedes. Habiendo tantos me eligió a mi :"v *dijo y lo último lo susurró* Siguiente... *iba a seguir hablando hasta que un grito asustó a todos y voltearon a ver al causante*
Todos voltean a ver un joven de sombrero de paja, a los presentes se le vino a la mente "mugiwara", no sabían por qué, así que removieron esos pensamientos*
Luffy no sabía lo que había pasado, hace poco había zarpado en busca de aventuras al mar y ahora se encontraba en un lugar grande con muchos "bastardos", según él, que lo estaban viendo. Dio una vista a toda la sala y se encontró con la mirada de un pecoso que se encontraba al lado de un viejo grande*
-ACEEEEE!!! *gritó el muchacho, los de la sala le mandaron una mirada de muerte por no medir su tono de voz. Un peliverde que se encontraba dormido despertó de golpe ante el repentino grito. Quería cortar al estúpido que se atrevió a despertarlo y hacerlo sufrir*
-Luffy! deja de gritar maldición *le dice el pecoso dándole un golpe con su puño en la cabeza*
-Auch, Ace no me pegues cabrón!! *le valía lo que los demás digan de él, hablaría lo que quisiera y haría lo que quisiera. Por eso salió al mar, para ser el hombre más libre del mundo*
