Be Lazy ☾︎ hyunmin OS

Be Lazy

La noche anterior Seungmin había ido a la casa de su novio, ya que irían alguno de sus amigos.

Jugaron juegos, vieron películas, hicieron karaoke, comieron mucho y al final de la noche, todos se fueron.

Estaban exhaustos pero no querían admitirlo, así que decidieron ver una película en la habitación del mayor. Pero no salió como lo planearon porque a los diez minutos de haber empezado Seungmin se quedó dormido. El rubio se demoró más en dormirse porque se quedó admirando a seungmin, el cual ya se había pegado al mayor abrazándolo con su cabeza apoyada en su pecho.

Deseaba quedarse así todo el día, y ese fue su último pensamiento antes de caer dormido.

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Hwang se despertó antes de lo que acostumbraba, lo que era cuando sonaba la alarma de Seungmin para ir a trabajar.

Odiaba cuando el pelinegro tenía que irse, se sentía tan solo. Está bien, no se quedaba completamente solo ya que tenía un perro con quién jugar pero con kkami no era lo mismo, últimamente el pequeño chihuahua de pelo largo prefería a su novio antes que a él entonces cuando seungmin no estaba kkami desaparecía hasta que le de hambre y tenga que aparecer para que lo alimente.

Se desvío de sus pensamientos cuando sintió que Seungmin se alejaba de él y se acomodaba del otro lado de la cama, no había despertado aún o al menos así parecía. Se fijó que hora era y se dió cuenta de qué hacía muy poco que había amanecido. Se acomodó pegando su pecho a la espalda del menor mientras lo abrazaba, puso su cabeza en el cuello mientras respiraba el dulce aroma del otro chico. Y otra vez se quedó dormido con Seungmin en sus brazos.

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Seungmin escucho su despertador sonar, abrió los ojos y bufando lo apagó como pudo porque los brazos de cierto rubio apenas lo dejaban moverse.

Se dió la vuelta quedando cara a cara con el mayor, su respiración era tan tranquila, a veces solo quería quedarse en la cama junto a Hyunjin. Pero lamentablemente no podía por más que quisiera, tenía que trabajar y estudiar, no podía darse el lujo de ser perezoso.

Se estaba por levantar de la cama cuando sintió que Hyunjin lo aprisionaba con fuerza entre sus brazos impidiéndole levantarse.

— Jinnie, déjame ir tengo cosas que hacer.— Se quejó el menor.

El rubio gruño en respuesta, mientras comenzaba a dejar suaves besos en su cara.

— Por favor, suéltame o voy a llegar tarde por tu culpa.— Soltó una risita suave cuando giro la cabeza evitando que Hyunjin lo besara en los labios.— No me beses, no me lave los dientes aún, porqué mejor no me dejas levantarme, lavarme y así puedes besarme.

— Esta bien.— El mayor acercó más a Seungmin si era posible.— Pero, después vuelves a la cama conmigo.

— No puedo Jinnie y lo sabes bien.— Con sus dedos acarició las mejillas del rubio.

— Por favor, quedate en la cama todo el día conmigo, y si quieres algo pidemelo y te lo traeré para que no te levantes.

— Pero tengo que ir a trabajar Jinnie.— Insistió el menor.

— No, hoy no. Es más llamaré yo a tu trabajo y diré que estás muy enfermo así que no podrás ir. ¿Bien?

— Está bien, pero hoy es la primera y última vez. ¿Lo prometes?

Hyunjin podría ponerse a saltar y llorar de la alegría había querido esto por tanto tiempo y al fin podía quedarse todo un día con Seungmin, haciendo nada, solo ellos dos acostados y disfrutando estar al lado del otro.

Por otro lado estaba Seungmin quien por mucho que quisiera mostrar que estaba en desacuerdo con la idea, realmente se encontraba muy feliz de quedarse con Hyunjin en casa.

El más alto libero a Seungmin de la prisión que había formado con sus brazos dejándolo levantarse para que pueda ir al baño. Hyunjin le dijo que iría a preparar el desayuno y que no se moviera de la habitación.

Ya se había duchado y estaba sentado en la cama revisando sus redes sociales mientras esperaba a Hyunjin.

Cómo si lo hubiera llamado telepáticamente, el rubio entro por la puerta con el desayuno en mano.

— Mmm, huele delicioso ¿que preparaste?— Un dulce aroma mezclado con café inundó la habitación.

— Hice pancakes, uhm traje jarabe de chocolate y miel porque no me decidía. También corte algunas frutas y prepare el café como a ti te gusta.— Hyunjin dejo el desayuno en la mesita de noche y se sentó en la cama, se acercó al más jóven buscando sus labios. Se sumergieron en un dulce y suave beso con caricias entre medio, se separaron por la falta de oxígeno.

— Gracias por preparar el desayuno, no siempre tengo el honor de que cocines algo tú, además cuando estamos juntos casi siempre cocino yo.— Dijo Seungmin frunciendo sus labios.

— No hagas así o te besaré y el desayuno que prepare con tanto amor para ti se enfriará.— Seungmin asintió y dejo un corto beso en los labios de Hyunjin.

Desayunaron entre besos, bromas, caricias y risas. Fue una mañana de ensueño para ambos, el amor que se sentían el uno al otro se notaba a millas. 

— ¿Quieres ver una pelicula, jugar Monopoly o dormir? tu decides cariño.— Acarició su cabello y dejo un besito en su nariz.

Si vieron películas pero no jugaron Monopoly porque Seungmin siempre pierde y él no quería molestarse con el rubio por eso. Aunque para reemplazar el monopoly jugaron videojuegos.

Luego el menor de los dos dijo que tenía ganas de almorzar pizza, y eso almorzaron.

Seungmin paso todo el día junto a Hyunjin en la cama, y lo que pedía el mayor de lo llevaba hasta donde se encontraba.

Y como había dicho, todo lo que pidiera se lo llevaría, lo hizo solo para que Seungmin tuviera un día completo de descanso y un día completo junto a él.

— Me consientes tanto.— Hablo el pelinegro de la nada.— Me haces parecer un niño mimado y perezoso.

— Me gusta consentirte.— Sonrió el mayor mientras lo miraba a los ojos.— Y eres un niño mimado y perezoso.

— No es cierto.— Seungmin frunció su ceño para parecer enojado.

— Si lo es, pero no importa, así de mimado y perezoso te amo mucho.— Junto sus labios con los del menor mientras ponía sus manos en su cuello para profundizar el beso.

— Yo también te amo mucho, Jinnie.

Y ambos se acostaron abrazados hasta quedar profundamente dormidos por lo que restaba de la tarde.

Hyunjin consintió a Seungmin todo lo que pudo, y logro que se quedará en la cama junto a él para holgazanear todo ese día sin culpa alguna.

FIN