La vie en noir ✦ bdsm [ls] [PAUSADA]

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Louis Tomlinson es lo más parecido a un genio. Una especie de visionario creativo que roza un idealismo que sobrepasa los estándares predispuestos de lo que podría ser el futuro de la moda invernal de un año que va transcurriendo con una velocidad sorprendente. Es probablemente el salvador de toda una generación fashionista y las que le precedieron, y aun así, tiene ciertos problemas considerándose como tal.

No es que piense de sí mismo como alguien mediocre ni esté lleno de inseguridades absurdas relacionadas a su trabajo y sus capacidades, pero cada vez que puede, se mantiene dentro de la línea de lo razonable y se mantiene alejado de los pensamientos vanidosos y soberbios que sabe que pueden inundar la mente de un hombre.

Ha conocido muchos casos de ese tipo, así como también se ha rodeado y relacionado con mucha gente que mira a los otros por encima del hombro y que no conocen lo que es la discreción y el respeto por los demás. Al haber convivido con esa clase de personas y saber de primera mano lo que se siente estar en la otra cara de la moneda, hace todo lo posible por no convertirse en una de ellas, así como tampoco permite que toda la atención que recibe se le suba a la cabeza.

Sí, es el heredero de una de las marcas de ropa más reconocidas del mundo y uno de los mejores diseñadores de dicha marca, pero eso no le mueve un solo músculo del corazón ni de la razón, y en cambio, lo ayuda a mantenerse recordando todas las cosas que tuvo que pasar para llegar hacia donde está. Su fama le recuerda lo difícil y deprimente que fue su existencia antes de descubrir la bondad del hombre que lo acogió entre sus brazos muy tarde en su adolescencia y le dio la oportunidad que el resto de la sociedad le había negado en su juventud temprana.

Pasó de ser nadie a serlo todo, y en lugar de dejarse arrastrar por la mediocridad y la prepotencia que el cambio pudo haber traído consigo, permanece dentro de unos principios que nadie le enseñó mientras crecía y que adquirió por la misma buena voluntad de aquel a quien considera su padre de verdad.

Es algo que se mantiene en su memoria y que, después de todo, aún no lo deja descansar por las noches en algunas condiciones. La vida que tuvo antes de renacer y las cosas que tuvo que pasar para sobrevivir en ocasiones se mezclan con sus desgracias de años no muy lejanos para perseguirlo, acosarlo y provocarle estas nauseas espantosas que se ligan con algo muy parecido a la taquicardia, y se presentan en forma de un dolor en las tripas que no lo deja respirar o incluso una espantosa migraña que lo obligan a permanecer en cama hasta la recuperación.

Ha estado mejor que antes, de todas formas. Últimamente ha mejorado mucho a pesar de todo e incluso se atrevería a decir que incluso lo ha superado todo, más o menos, casi. Lo ha hecho en la medida de lo posible si habla honestamente, y considera que está cada vez más cerca de la superación si se permite ser franco consigo mismo.

Podría decir que es un hombre feliz si alguien se lo pregunta, un tanto solitario, sí; melancólico, definitivamente, pero no es nada demasiado alarmante, nada que requiera medicamentos que bloqueen sus malos sentimientos ni una cantidad excesivas de sesiones de terapias que de todas formas ya no tiene tiempo para tomar, al menos no con la misma frecuencia de antes.

Está bien. Se siente bien. Siempre y cuando no reciba preguntas que no pueda barrer con una sonrisa y un movimiento descuidado de mano que alcanza la cortesía y la discreción. La gente ha empezado a darse cuenta de su manera de huir a esa clase de interrogantes, todas las relacionadas a su proceso en el mundo de la moda y cómo fue esa niñez innombrable que mantiene en secreto por motivos que él considera razonables, y las que no tienen nada con ver con su perspectiva y su visión en la revolución fashionista y su marca de ropa.

Evade, asimismo, todo lo referente a su vida amorosa, a su pareja anterior y el motivo de por qué hoy en día, un príncipe tan guapo y poderoso como él se encuentra gobernando el reino de la soltería. Hace caso omiso de todas y cada una de esas cuestiones demasiado incómodas para su corazón, y en recompensa, domina el arte de desviar el tema a su manera de crear prendas, a ese proceso de diseño y trabajo que lo mantiene en lo más alto de la pirámide vanguardista.