🌺
.
.
.
.
.
.Ya ha pasado un tiempo desde que aquella mujer los había acogido en su hogar. Aquel pequeño pueblo estaba conformado por su mayoría personas mayores (ex cazadores) junto a sus aprendices. Seria mentira decir que al principio aquellas personas no querían dejarlos con vida ya que los veían como una amenaza para la comunidad.
Pero solo hizo unas palabras por parte de la jefa del pueblo (Yoshido) para que los civiles dejaran las armas atrás y dieran un intentan para creer en sus palabras.
Actualmente poseías la edad de 10 años; y hace un año tu entrenamiento había comenzado así que no sabias mucho, encanvio tu hermano había comenzado mucho antes por lo cual ya tenía bastante experiencia al lado tuyo.
Nuestra pecosa protagonista caminaba por el pequeño pueblo mientras algunos personas la saludaban; tu vista fue a dos desconocidos que se dirigían al dojo de su cuidadora.
Este era un hombre mayor acompañado de un chico de cabellos color melocotón en un corte raro. Ambos poseían máscaras.
No le tomaste importancia y solo seguiste con tu camino hasta llegar al final del pueblo; ante el fuerte olor de glicerina solo tapaste de tu rostro con tu kimono y caminaste hasta llegar aún gran campo de duraznos. Una amplia sonrisa remarco tus labios mientras caminabas hacia los árboles frutales.
Recogiste la parte baja de tu kimono haciendo un nudo para después tomar impulso hasta quedar sobre una de las ramas.
Miraste la fruta deleitándote por su hermoso color para después comenzar a meterlas dentro de tu canasta.
— (los duraznos tienen un delicioso olor este año).
Una vez que terminaste agarraste la fruta que se hallaba casi llegando a la punta dispuesta a comerla. Con cada bocado que dabas a la fruta, tus mejillas se tintaban de rosa mientras mecías tus pies.
El día era hermoso, el sol se encontraba en su mejor lugar dando bien contra los arboles, el viento danzaba acompañado de las hojas, y las flores esparcian aquel olor dulce que provocaba tu éxtasis, sin duda esto era mejor que estar encerrada en su antiguo hogar.
Una vez que te habías terminado la fruta solo te estiraste un poco para después agarrar la canasta con cuidado para no tirarla, pero como la vida te odia, al momento de intentar bajar la rama se rompió provocando que no solo se cayera la canasta si no que igual tu.
— (mierda!)
Estabas a punto de impactar contra el suelo cuando sientes como agarraron de tu cuerpo impidiendo que cayeras, pero aun así te dolió aquel golpe seco.
— tienes que tener más cuidado.
Tus ojos se abrieron al escuchar la voz de un chico. Subiste la mirada dispuesta a ver quien había sido tusalvador pero con lo primero que te topaste fue con una mascara de kitsune.
ESTÁS LEYENDO
𝓜𝓮𝓼𝓽𝓲𝔃𝓪 || kimetsu No Yaiba.
Adventure𝓜𝓮𝓼𝓽𝓲𝔃𝓪 Kimetsu No Yaiba x Lectora. _______________________________________ _______________________________________ Hija de un demonio y una humana, siendo el segundo hijo mestiza de aquella familia. Nacida de un deseo egoísta por parte de...