𝐒𝐎𝐌𝐄𝐎𝐍𝐄 𝐘𝐎𝐔 𝐋𝐎𝐕𝐄𝐃

175 24 10
                                    

Una castaña bastante apresurada trotaba con rapidez hacia la sala de descanso del hospital. Había estado marcando al localizador de su novio desde hace bastante tiempo y este aún no contestaba.

El Hospital Rose Mercy West había recibido el ingreso de una paciente embarazada de quintillizas, de las cuales al menos 4 presentaban problemas serios, desde una con hidrocefalia hasta otra con sus intestinos fuera de su cuerpo. Por esta razón tanto médicos titulares, especialistas, residentes e internos debían estar pendientes al momento de que la madre entrara en proceso de parto.

La señora Adams en esos momentos se encontraba dando a luz y todos los internos debían estar presentes para quedar a cargo de una de las bebés, pero faltaba un interno, el novio de Sofía. La noche anterior se había quedado haciendo rondas por lo cual debía estar muy cansado, así que lo lógico es que se haya quedado dormido en la sala de descanso (o eso es lo que pensaba Sofía).

Pero la realidad era otra y lo supo cuándo su mano se posó en la perilla de la puerta y al momento de girarla la puerta se abrió dejando ver a su novio sobre una de las enfermeras. Debido al rechinar de la puerta ambos se voltearon a ver a la castaña.

—Sofía...— murmuró su novio al verla ahí parada, mirándolo con asco.

—Las quintillizas ya van a nacer— dijo agachándose para recoger la bata blanca de su ahora exnovio—Más te vale estar ahí Reiner, si no Ackerman te pateará tu asqueroso trasero— finalizó tirándole la bata y saliendo a paso rápido de ahí.

—Las quintillizas ya van a nacer— dijo agachándose para recoger la bata blanca de su ahora exnovio—Más te vale estar ahí Reiner, si no Ackerman te pateará tu asqueroso trasero— finalizó tirándole la bata y saliendo a paso rápido de ahí

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—Sofía, yo— Reiner se iba a acercar a la chica quién estaba sentada al lado de la incubadora dónde yacía una de las recién nacidas, para ser más específicos Valerie, una de las quintillizas que había nacido con hipoplasia ventricular.

—Cállate— respondió Sofía seria mientras se giraba a verlo —Largo de aquí, estás muy ocupado seduciendo enfermeras— le dijo dándose la vuelta y centrando su atención nuevamente en la bebé dejando sorprendidos a sus demás compañeros —Dudo que ver bebés prematuras sea más importante que la vagina de Reiss— Reiner no dijo nada, solo vio la espalda de la castaña y se retiró del lugar hecho una furia.

Sofía ni siquiera volteó a ver la rabieta que el rubio había hecho, tenía cosas más pendientes cómo vigilar a su bebé a cargo.

—¿De verdad?— preguntó Sasha, su compañera y amiga —¿Viste a Reiner y a Historia teniendo sexo?— Sofía chasqueo la lengua.

—Y no solamente sexo— Sofía volteo a ver al resto de sus amigos, quienes la miraban atentos —Sexo en la sala de descanso, más específicos en la cama donde se recuesta Mikasa— la nombrada hizo una mueca de asco, "definitivamente no volveré a dormir ahí" pensó la asiática.

—No quiero decir te lo dijimos, pero si te lo dijimos— habló Connie desde una esquina.

—Eso te ganas por dormir con el doctor engendro del diablo— dijo Mikasa con media sonrisa —Era obvio que pasaría tarde o temprano— Sofía la miró enojada —Oye es la verdad— se defendió la chica.

꒰𝐒𝐨𝐦𝐞𝐨𝐧𝐞 𝐲𝐨𝐮 𝐥𝐨𝐯𝐞𝐝━━𝐄𝐑𝐄𝐍 𝐉𝐀𝐄𝐆𝐄𝐑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora