¿Eso era todo?
Llevaba toda mi vida preparándome para este momento y aún así no me había hecho a la idea, todavía era muy pronto. Antes esperaba más de mi futuro; ir a la universidad, tener amigos, salir de fiesta, etc. Aun así desde que mamá murió sabía que esto iba a suceder antes.
El ambiente que se respiraba en la casa parecía más de funeral que de futura boda, el señor Jones, Mike Jones, se había presentado ayer mismo para que firmara los papeles tan pronto como pudiera para irme de una vez a vivir a su casa y que pudiera conocer a su hijo.
No esperaba mucho de mi relación con Jack, según me contó Beatriz al parecer solo quieren buscarle esposa porque es un chico un tanto particular. No sabía qué quería decir con ello y me encontraba demasiado deprimida como para ni siquiera preocuparme por ese asunto. Solo esperaba poder hacer mi vida a mi manera aunque tuviera que estar atada a alguien por lo menos durante los próximos diez años.
Mi padre me esperaba en la puerta principal, decaído, mirando hacia cualquier lado en el que no estuviera yo, igual que había estado haciendo durante las dos últimas semanas. Podía llegar a entender su comportamiento hasta cierto punto, pero no sé porqué siempre esperaba más de lo que los demás me podían ofrecer
–Adiós Beth, iré a la casa de los Jones la semana que viene para terminar con los trámites - cogió aire, intentando no romperse en ese mismo momento- recuerda seguir estudiando, no te distraigas de tus deberes y se respetuosa con tu nueva familia. –terminó de decirme y yo solo asentí y caminé hacia el coche que me esperaba en la calle.
Iba mirando el paisaje de Cooperstown mientras intentaba no llorar y hacerme a la idea de que no volvería a vivir como lo hacía antes y de que dentro de nada me casaría casi en contra de mi voluntad.
Salí del coche para ser recibida por la sirvienta, Anne, una mujer relativamente joven que recogió mis maletas y me guió hacia el interior de la mansión.
–Buenos días, señorita Beth, el señor Jones estará de viaje hasta el viernes por trabajo asique no podrá recibirla. Aún así ha pedido tener una llamada con usted mañana mismo para saber cómo estas llevan–contaba mientras yo miraba cada rincón a mi alcance.
En ese momento salió un chico desde la habitación izquierda, tenía el cabello negro y una sonrisa plasmada en la cara. ¿Sería él? Tenía que ser él. Eché un mechón de mi pelo detrás de mi oreja e intenté mostrarme feliz.
–Tú debes ser Elisabeth. – Dijo él y se giró hacia Anne– Dame sus maletas, yo la llevaré hasta su habitación. –Ella hizo un gesto de afirmación y se retiró. Él comenzó a subir las escaleras hacia el segundo piso.
–Entones... Jack ¿no?– de repente empezó a reírse como si no hubiera un mañana, me encontraba desconcertada, ¿Quién si no podía ser?.
–Perdona, perdona– dijo mientras intentaba calmarse –no me había dado cuenta de que no me he presentado, mi nombre es Jules y supongo que seré tu cuñado.– giró un momento la cabeza hacia mi para darme una sonrisa.
Me sentía avergonzada, era mi primer día en esta casa y ya la había cagado monumentalmente.
–Esta es tu habitación– me dijo, a la vez que abría una puerta del pasillo – la de Jack es aquella, espero que o te importe. lo eligió mi padre – miró a la puerta cerrada que había enfrente– pero no te recomiendo hacer una visita a Jack hoy, está de mal humor– sonrió sin darle mucha importancia al tema y metió las maletas en la habitación.
–Gracias por la ayuda– respondí yo mientras entraba en la estancia y ponía las maletas encima de la cama para deshacerlas.
–No es nada, tranquila– se echó el pelo hacia atrás – si necesitas algo avísame– se acercó a la puerta para salir– recuerda bajar en una hora para comer – me guiñó un ojo y se fue.
Me senté en la cama, pensando en lo de antes. Sabía que el matrimonio que iba a contraer era una mentira, pero al menos esperaba algún tipo de recibimiento por parte de mi prometido. Quizás él no estaba muy contento con la idea de casarse, quizás ni siquiera quería verme la cara y por eso se encerró en la habitación. Esperaba que no fuera así, no quería sufrir más de lo que ya había sufrido.
Decidí no pensar más en ello y ponerme a organizar la habitación.
Al terminar salí para ir al comedor, en ese momento la puerta frente a mí se abrió. Mi pulso se aceleró y solo pude quedarme quieta mirándole. Cuando él se dio cuenta de mi mirada no hizo nada más que bufar e irse hacia las escaleras.
Me quedé atónita, tanto que ni siquiera reaccioné.
¿Había bufado? ¿En serio?
¿Qué era, un crio?
Sacudí la cabeza intentando olvidar ese momento y seguí mi camino.
Jules me regaló una sonrisa cuando estaba sentándome, yo le contesté con una mueca y el hizo una expresión de pregunta. Después se levantó y salió del salón. Jack se encontraba frente a mí, de vez en cuando notaba su mirada, pero no quería prestarle atención después de eso.
–Asique eres tú –dijo de repente como si nada, le miré sin decir nada –pensaba que serias rubia –mi cara en ese momento lo decía todo, aun así seguí en silencio. –¿Qué? ¿Te ha ofendido? ¿Acaso eres muda? – puso ambos brazos sobre la mesa para acercarse a mi.
–No tengo nada que decir. –respondí seriamente, no estoy aquí por gusto.
–Oh, bueno si tiene carácter y todo. –se rio de mi mientras volvía a colocarse en la silla.
De repente se escuchó un grito de Julián desde el pasillo
–¡Anne ¿Dónde está la comida?, me muero de hambre!Anne apareció en el salón para disculparse por la tardanza y dijo que tardaría 10 minutos más en poder traer todo. La sonreí agradeciéndole la atención y Jules se volvió a sentar.
–¿Qué? ¿Ya se han conocido los tortolitos?– preguntó este último con cara de burla hacia su hermano.
–Ni te imaginas cuanto–contestó él sonriéndome como si nada hubiera pasado – ¿Verdad querida? – dirigió su vista hacia mi.
–Claro – susurré después de un momento de desconcierto. La expresión de Jules volvió a ser de extrañeza.
Tras ese momento Anne trajo los platos y comenzamos a comer.
Para quien lea esto, espero que os guste el primer capítulo.
Con mucho amor,
Livy.
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Cuando perdí la cordura [En proceso]
RomanceUna nueva vida no es siempre lo mejor... O sí? Beth tiene que afrontar los retos de la familia Jones e intentar no caer en la desesperación. Lo conseguirá? Lo conseguirás tú? Entra si quieres averiguarlo.