Un mundo de espejos-Albalia

capítulo 12: volver a conocerte II

Ya era en la mañana. Alba sabía que debía cruzar para ir al colegio humano, estaba nerviosa. Candela le había dicho que ya arregló todo para que pueda ingresar tranquilamente, le entrego un celular viejo de ella, que si quería pasar desapercibida era imprescindible.
Marina y Elena se levantaron a jugar hasta que ambas debieran entrar a clases.
Natalia por única vez estaba más que emocionada de volver al insti.

Ya todos entrando al colegio, con 10 minutos de antelación, minutos que Alba aprovechó para buscar a la morena que la trae loca.

Alba: hola Natalia! -la emoción era palpable en la rubia, Natalia mientras tanto se mostraba feliz de verla.

Natalia: eyy, Alba que tal? Cómo estás en tu segundo día?

Alba: si, segundo día... Sigo nerviosa pero bueno, ahora tengo con quien hablar.

Candela: gracias por lo que me toca, si señor.... -Susurra llegando a su lado- Alba nos vemos más tarde, tenemos algo de que hablar.

Alba: vale -dice extrañada- Nat, te sientas conmigo, es que sino quedó sola...

Natalia: no pasa nada, cuando quieras igual... Mirá, allá vienen mis amigas, ahora te las presento.

Llegando el cuarteto Natalia las va presentando.

Natalia: ella es Ici, María, Afri y Martuki.

Alba: hola, soy Alba- saluda sonriente.

María: con que Alba eh?, Y de dónde sos? - Se podía ver de fondo a Natalia, haciendo señas para que no se vaya de lengua.

Alba: de...de Elche, si, Elche.

Marta: va déjala en paz, que la pones nerviosa. Que tal?, yo soy Marta.

Alba: encantada Marta, espero poder llevarnos bien, con todas la verdad.- dice más tranquila.

Natalia: venga va, vamos a clases que al final llegamos tarde y la Sánchez nos mata.

------------------------------

Primer recreo

Candela: Alba, vení...

Alba: pero que pasa?, todo el día llamándome.

Candela: bueno sorry, pero es importante... Tené cuidado con el portal, por favor... Cuídalo y estudialo...no te olvides. No te puedo decir más.

Con eso, Candela desapareció, arrastrada por otra chica hacia quien sabe dónde.

Alba estaba preocupada, confundida y desorientada, que carajo, todo estaba bien, ¿qué sabía Candela que ella no? Justo ahora tenía que preocuparla. Pasó todas las clases en las nubes.

Natalia no entendía nada, se pasó el día mirando a Alba, como si tuviera un imán. Notó el cambio de actitud después del primer recreo, no sabía si preguntale o no, si bien a penas se conocían,
ella la había ayudado sin pensar. Por otro lado la perdía estar pendiente de ella tanto tiempo, sus amigas se lo hicieron ver, y las primeras burlas aparecieron.
La morena sabía lo que estaba comenzando, y no estaba segura si lo quería... No quería volver a pensar en alguien a todas horas, querer tenerla cerca, pero también sabía que si tenía que pasar, pasaría de forma inevitable.

Si, puede que le gustará, un poco... Pero era difícil, ya había pasado la experiencia de que le gustará una chica y la haya humillado. No pensaba que Alba fuera así, sin embargo el miedo estaba latente.

Natalia: mierda!- recomendó sus planes para luego de clases, ¿Sería buena idea salir con Alba, sabiendo lo que estaba naciendo?

Profesor: algún problema Lacunza?

Natalia: no, no profe, es que no me salen las cuentas...

Profesor: pregunte Lacunza, pregunte.

------------------------------

Ambas en su mundo, se encontraron en la puerta de salida. Al verse no pudieron evitar dejar de lado sus preocupaciones. Natalia sabía que era su oportunidad de saber que le pasaba en concreto, Alba de pasar el mayor tiempo posible con ella, aunque sea con sus amigas de por medio.

La votación  finalizó, dando como resultado ir a tomar un helado. Se habían sentado las protagonistas, una al lado de la otra, mientras Natalia reía con sus amigas de las anécdotas de Candela, Alba no podía apartar su atención de las risas de su morena.

No cambió nada de aquella risa que recuerdo. Por qué tuvimos que separarnos, joder con lo que te quiero. Estás más alta, el pelo más largo, más fuerte, pero tus ojos siguen como los que yo conservo en mi memoria. Nat, lo que te extrañé y tú ni me recuerdas

Alba comparaba a esta nueva Natalia con la niña de su mente, el bajón de ánimo en su cara no era notable, sin embargo la dueña de sus pensamientos, irrumpió en su pozo.

Natalia: ey, Alba, estás bien?, De hoy estás, no se, como lejos... Vamos para enfrente, ven... Que estás ni cuenta se dan.

O eso pensaban, tanto Candela como las demás habían notado los cuchicheos de la más alta. Sabían que no debían interrumpir. Candela más que nadie se culpaba, no debería haberle dicho nada hasta después, pero tampoco podía poner en riesgo a la enana.

En el banco de enfrente de sentaban cada una con su helado, Natalia esperando a que Alba quisiera hablar, ella ya había dejado el espacio para que le cuente lo que quiera.

Alba: sabes... Estos sabores son los que pedía mi amiga de la infancia... Por lo que se ahora cambió un poco- dice mirándola a los ojos y sonriendo apenas- pero bueno la vida es así, las cosas cambian.

Natalia: ey... No te pongas mal, la vida es así si, pero pensa que hay cosas que cambian para bien... Por ejemplo, si no te hubieras mudado, no te conocería... Y no me hubieras salvado de mi muerte prematura por un resfriado.

Alba no pudo evitar reírse, va a hacer que tanto no cambiaste Natinat.

Natalia: Así me gusta, sonrisas en las caras de la gente, va arriba el ánimo, que estamos comiendo heladitoooo.

Sus miradas conectaron, perdieron el tiempo en los ojos de cada una. Alba terminando por pensar, que no importa cuánto cambie su Nat por fuera, adentro seguía siendo una softy. Natalia cayendo en cuenta, que era imposible con esa cara que se traía la rubia, que no le gustase, con sus pequeños actos de lo más tiernos a su parecer y ese sentimiento de conocerla de toda la vida.

Esperaban no equivocarse con seguir adelante a pesar de todo.

_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-

Weno un capítulo. Al fin termine la secundaria, queda que me entreguen la libreta y soy libreeeee.

Perdón por la demora pero bueno, es lo que hay, espero que les haya gustado.

Temazo Nuestro nombre, es que Nat es una genia, necesitaría su genialidad la verdad. Ni hablar de cuando te fuiste, el bucle con ambas es real

A seguir staneando a nuestras reinas y darles amor

Besos y abrazos virtuales, todo por el coronavirusico

Se viene mi cumple y la mayoría de edad si señor wiiiuu

💜💜💜💜💜💜💜💜💜💜