Costumbres |YeonHyun|

1 Capítulo.

La brisa correr por mi cabello al entrar era tan fresca, pura, libre, completamente libre al entrar y salir, como chocaba contra mi cara y de esta golpeaba por mi cuerpo, completamente amaba el ejercicio por la mañana, mientras corría con una gran sonrisa para que el sol no me alcanzara entre las sombras de los árboles, mi respiración acelerada por el tiempo que llevaba corriendo, la mejor sensación que se podría sentir.

Me detengo de poco secamente al escuchar abucheos por el sendero más cercano, vuelvo a correr rápido nuevamente atravesando arboles, arbustos, casi resbalando por la humedad de la reciente lluvia empezando a helar con finales de otoño a inicios de invierno; empiezo distinguir tablones de la misma madera debajo de mis pies y un árbol grande pegado a los tablones, poco a más empiezo a ver casas al igual que los abucheos aumentan una vez logró salir noto a bastantes personas que no me dejan mirar que es lo que pasa.

Pero rendirme no queda en mi vocabulario, tomó de mi collar y ahora siendo todo más grande que lo normal trepó por encima de una de las casas para finalmente ver lo que siempre se les aterra.

¿Ese era Jake?

Ladeo la cabeza tras mirar a el chico encerrado en las jaulas recibiendo tanto odio de la gente que llegó a ayudar y darles confianza.

Hipócritas...

-¡Dejenlo! -_Exclamaban sus padres con angustia siguiendo a los que llevaban enjaulado a él chico.

Voy perdiendolos conforme se mueven, no me queda de otra que saltar de techo en techo, lo cual no sería tanto problema.

"Maldito peligro" "Ojalá te pudras" "Vete a donde perteneces, inadaptado" Son tantos de los comentarios que reciben los jóvenes una vez un pedazo de metal que nos define en condena.

Miro a el chico, este está sentado de piernas cruzadas tapando sus oídos con sus manos negando ante los insultos de los que llegó creer buenas personas, con la cabeza baja encerrado entre barrotes de metal como "lo menos" que merece una especie salvaje.

-¡Jake! ¡Jake! -_Gritó una voz que me alarma, rápidamente volteo a ver hacia el camino y allí está, mi pequeño hermano llorandole a su mejor amigo detrás de esa carretilla.

Noto que a través de los barrotes el mencionado levanta la cabeza notando a su amigo tratando de alcanzarlo y corre rápido hasta donde la jaula lo detiene extendiendo su mano para tomar la de Riki.

-¡Nishimura alejate de ese peligro! -_Grita una persona, apenas el menor corre más para tomar la mano de su mejor amigo y decirle millones de cosas, tal vez promesas hermosas que en desgracia serían en vano.

Suspiro suavemente y saltó por otro techo pensando en intervenir antes de que alguien más lo haga, más mi idea fue interrumpida por un trío de hombres que empiezan a separar a Riki de la jaula en donde estaba Jake.

Apenas logran que se suelten el menor empieza a removerse golpeando, pataleando, maldiciendo y gritando, noto que comienzan a acorralarlo más para que se calme, bajo de el techo deprisa pero con cuidado me sacudo con los ojos cerrados para tomar forma humana nuevamente, apartando a varias personas de mi camino sin cuidado alguno y después seguir con los que acorralaban a mi menor.

-¡No se atrevan a tocarle un pelo más! -_Exclamo a la vez que empujo a él más grande delante de mi que sujetaba a mi menor por los brazos este al mirarme hace gestos, típico de castores.

Sin ganas sobre sus ojos lo suelta y el menor vuelve con la necesidad de ir tras de su amigo, pero rápido lo rodeó en un abrazo fuerte por la cintura reteniendolo sin importarme los empujones fuertes o débiles que llega a darme.

Escucho que este le grite a su amigo y este conteste;

-¡Iré por ti Jake, paciencia por favor!

-¡No, Riki tu quédate aquí, regresaré sin importar lo que pase!

Esas palabras alarman a los habitantes pero con eso solo Riki le sigue prometiendo de más cosas hasta verlo irse y llorar, llorar profundamente hasta que se voltea ocultándose sobre mi hombro al ver como otro de sus amigos es alejado de él.

Condena, la misma que nos hace vivir un pedazo de metal tan ridículamente mágico y listo, juzgante que de nuestro futuro, quitandonos todo apenas está predice.

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-¿Cómo está? -_Habla Hueningkai en la sala, voz baja preocupado apenas salgo de la habitación de mi menor.

-¿Cómo supones que este? Le quitaron a otro de sus mejores amigos, luego fue Jake su mayor confidente, ¿qué falta? ¿Le van a quitar a Junhyuk también? -_Digo en voz baja molesto mientras me dejó caer sobre el sillón.

-Aveces creo que nuestra democracia puede cambiar pero después recuerdo ah, es inútil, los líderes no se miran a los ojos sin querer matarse -_Habla Soobin sentado en otro sillón.

-Pero no entiendo la necesidad de alejarnos, osea si la entiendo, pero creo que pueden haber protocolos de seguridad no sé como funcionen esas cosas del otro lado -_Suspiro posando mis codos sobre mis rodillas pasando mis manos sobre mis cabellos dejando caer mi cabeza un poco.

-Ah sería bastante abrumador, de por si ya lo son los de nuestro lado, imaginate de ambas partes, creo que estamos mejor de esta manera -_Dice Huening inclinándose suavemente por mi lado para dar palmadas sobre mi espalda.

-Bueno yo creo que podemos salir de eso, ¿qué paso con los que renunciaron a el collar o lo que les toca? ¿O con los que cambiaron de especie?

-Los que renunciaron a el identificador están usando su propia civilización, una vez pierden el pedazo de metal sus memorias son reemplazadas con otras y llevan otro tipo de vida sin saber más de que esto existió; cada quien por su lado supongo -_La voz de Soobin derrepente suena en la cocina tal vez buscando algo_- Mientras tanto los que cambiaron, no hay casi casos así, después de durar tres años con esta porquería te tienes que adaptar, verle lo bueno y lo malo hasta que decides ya no dejarlo, injusto ya que de todos modos no estas conforme con lo que eres.

Reinó un silencio por nuestras partes, suspiro volviéndome a enderezar para dejarme caer completamente sobre el sillón nuevamente.

-Jake... ¿Qué es? -_Mi voz sale de un susurro cerrando mis ojos suavemente, esperando respuesta por alguno de mis amigos.

-Según su brazalete era un lobo -_Respondio Hueningkai.

-Estoy cansado -_Digo frunciendo el ceño_- Cansado de que nos encariñemos y los arrebaten cruelmente de nuestro lado, Huening perdió a sus hermanas y otros cuatro de sus amigos, Soobin a uno de sus amigos y más de los que quiere, perdí a mi padre y con él a mi madre, Niki perdió a la mayoría de sus amigos y sus padres lo dejaron aquí, ¡estoy arto que lamentemos a los de el otro lado!

-Taehyun hyung...

Abro los ojos de golpe levantándome inmediatamente para mirar a Niki este tallando sus ojos cristalizados e hinchados por tanto llorar.

-Niki... Ven bonito -_Rodeo el sofá extendiendo mis brazos caminando a él, este rápido acude a mis brazos escondiéndose sobre la curva de mi cuello.

-Hyung, tuve una horrible pesadilla -_Su voz empieza a cortarse, dejó caricias suaves en su espalda este me abraza con más fuerza_- Jake era llevado, muchos lo odiaban por la porquería esa y y...

-De verdad eso paso... -_Hablo Soobin con voz suave tanto delicada y aunque no lo dijo de mala manera aún así lo fulmine con la mirada.

-Y días después yo me iba y... -_Con esto el menor estalla en lágrimas y sollozos aferrándose más a mi cuerpo con miedo_- ¡No quiero estar solo hyung, lejos de usted, por favor no me deje solo!

Lo trato de proteger más en el abrazo, respirando algo agitado tras el miedo incluido en mi pecho, el miedo de perder a lo mejor que me paso en mi vida, dejarlo y que él me dejase, no.

-Niki, tranquilo, ni muerto sería capaz de dejarte solo...

La depresión en aquella parte norte es lo único sobre el aire, padres perdiendo a sus hijos, niños perdiendo amigos, hermanos perdiendo a otros, parejas perdiendo a sus seres amados, una población en donde el único aire sobre este es el de la tristeza.