Mi mirada choca con la suya haciendo que cada rincón de mi ser se estremezca, se descontrole. Siento como un calor extraño recorre mi ser, mis piernas flaquean y aún con nuestras miradas conectadas... Hace que todo lo que tengo a mi alrededor se me olvide, solo somos él y yo.
El se acerca a mí con su sonrisa que lo caracteriza, con sus ojos color miel brillando. Inmediatamente siento como mis mejillas se sonrojan, pero aún así no aparto mi mirada de la suya, mi respiración se entre corta, mi corazón late fuerte.
Se para frente a mi cortando lentamente la distancia que nos separa, está tan cerca que su respiración golpea mi rostro, su fragancia me invade. Comienzo a recorrer con mi mirada su rostro, sus ojos en éstos momentos están oscuros y cuando mi mirada cae en sus labios, siento un cosquilleo recorrerme pero no dejo de mi mirar sus labios que están entreabiertos, vuelvo a verlo a los ojos pero estos están mirándome los labios.
Puedo ver que su respiración está acelerándose...
No decimos nada, absolutamente nada, solo nos observamos...
Él se acerca más a mí, posa una de sus manos en mi mejilla y la otra la lleva a mi cintura haciendo que nuestros torsos queden pegados.
Nos devoramos con la mirada que es más que suficiente para decir lo que muchas palabras no podrían...
Y allí en ése momento, siento que voy a explotar, quiero gritar, mi corazón se acelera al cien cuando aquella pequeña distancia que nos separaba ya no existe. Siento sus suabes y cálidos labios junto a los míos.
Primero hace suaves caricias con sus labios en los míos, lentamente va abriendo más sus labios al igual que los míos haciendo que sienta su sabor mentolado, inmediatamente llevo una de mis manos a su cuello y la otra a su pelo haciendo suaves caricias.
La sensación que siento en estos momentos no se compara con nada, siento que estoy volando, es una sensación tan única.
Nos separamos unos centímetros para poder respirar, abro mis ojos y me encuentro con su sonrisa. No decimos nada nuevamente. Con la yema de sus dedos trasa leves caricias por mi brazo.
-Eres tan hermosa- él rompe el silencio haciendo que me estremezca, no digo nada, solo lo sigo mirando.
Suspiro sonoramente y le sonrio, me acerco a él y le doy besos cortos.
Él entrelaza nuestras manos.
-En estos momentos siento una sensación extraña y a la vez tan linda aquí- lleva nuestras manos en su pecho- contigo siento cosas que nunca antes había sentido, son sensaciones nuevas que hace estragos en mi, que me lleva lejos con solo mirarte. Cuando te tengo cerca me siento tan bien, tanto que me gustaría que siempre estés a mi lado- suelta mis manos y toma mi mentón- y estoy seguro que esto es un gran sentimiento, esto es amor.
