El Tiempo De Mi Amor

Capitulo 2 "Accidente"

La noche, siempre abrumadora y fría.

Solitaria la mayoría del tiempo, se vio interrumpida por el paso veloz de una ambulancia, las luces tintineantes y el sonido de las sirena anunciaba a todos que tenía prisa.

Cuerpos policiacos y de bomberos la socorrian hasta llegar al lugar en el que habían sido invocada. 

Al llegar los paramédicos intentaban llegar rápido al afectado, aquel auto rojo estampado contra un árbol roto quedando, aplastado por este mismo.

Dentro un hombre rubio de aspecto fino desmayado y con múltiples heridas.

— Rápido debemos sacarlo de ahí!!

Gritó el jefe de bomberos mientras ayudaba a sus subordinados en un intento de abrir la puerta del vehículo.

El teléfono sonaba insistentemente, su sueño nunca había sido muy pesado y no le costo mucho al sonido levantarla.

— ¿Bueno?
Respondió desganada, talladonse un ojo aún con sueño.

— ¿Hablo con Pudding Vinsmoke?

La castaña levantó una ceja y se sentó sobre su cama 

— Sí, ella habla. 

— Le hablamos del hospital Drum, su esposo acaba de tener un accidente.

La mujer quedó en shock y todo el sueño que tenía había desaparecido.

— Es...estaré ahí en seguida.

Respondió con voz temblorosa antes de colgar.

— Lilin!!

El grito de su madre la despertó abruptamente alertando que algo estaba pasando.
Salió de su habitación y corrió hasta el cuarto de sus padres. 

— Cambiate, tenemos que irnos, me llamaron del hospital.
Tu padre tuvo un accidente.

— ¿A mí?— le cuestionó Zoro, aquello le resultaba algo extraño.

— Eres el que me arregla la campana de la entrada ¿No?

— Eh...nop.
Respondió el peliverde remarcando la "P" en aquel no, como un niño pequeño debido al nerviosismo.

— Ese idiota otra vez me dejó plantado—
bufó la voz, no podía verle pero estaba seguro de que se trataba de un anciano.

— Como sea, ¿Buscas algo en especial?

Zoro se acercó al mostrador y en efecto aquella voz pertenecía a un anciano, se veía bastante viejo y parecía que los años no le habían caído bien.

— Yo...estoy aquí por el letrero de afuera. Por los cuchillos, para ser más exactos.

— Claro que sí—
el anciano le sonrió.

— están en la parte de arriba por el pasillo a la izquierda.

Zoro le dio las gracias y subió las escaleras tal y como le había dicho hace un momento, al entrar se dio cuenta que había mucho de donde escoger.
Miró primero los de oferta, no eran muy bonitos y no eran algo digno de Sanji pero aunque así fuera incluso aquellos cuchillos de oferta estaban muy por fuera de su presupuesto.
Empezó a mironear en los estantes donde estaban los más caros, sin mucha esperanza ya que sabía que no podía comprar ninguno.

—Puede ser.

Uno de ellos había llamado su atención, se veía fino, bastante elegante,su mango era negro y la hoja de acero inoxidable. Era perfecto.