-¡No me vayai a dejar sacowea!, Tu...tu no harías eso, ¿Verdad?, Tu me lo prometiste... Brasil... Tu lo dijiste... Yo te oi...-dijo aquel chileno mientras apretaba su celular con tristeza y furia. Comenzó a caminar por la casa mientras oía aquellas excusas por teléfono. -Chile... La verdad ya no te amo... En serio... Por favor acéptalo.... Necesitas avanzar. Encontraras a alguien mejor... -¡Maldito cobarde!, ¡Maldito!, ¿Me estai terminando por celular?, ¡ni un brillo saco chuchetumare!, vení po' vení, dímelo a la cara.
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Un pitido en la llamada había dado a conocer al chileno que le habían colgado.
-¡Agh!-tirar el celular contra la pared en un acto de enojo.-¡Te odio!¡Imbécil!, ¡Imbécil!, ¡Imbécil....!, Imbécil....-repitiria esa palabra ya sin emoción alguna mientras se sentaba abrazando sus piernas.-me lo prometiste... Nunca me abandonarias...-dio un largo suspiro.
Despues de un rato chile se acerco a su celular, tenia la pantalla rota pero parecia que aun servia, lo desbloqueo y comenzo a ver las fotos de el y de brasil. "¿Que paso?" se pregunto entre sollozos, no encontraba ninguna explicacion, eran tan apegados, tan unidos, nunca creyo escuchar esas palabras del brasileño. Le envio unos cuantos mensajes de disculpa al brasileño pero solo lo habia dejado en visto.
[...] Como dos semanas después...
Chile se encontraba haciendo las compras en el súper,se había quedado sin provisiones después de pasar viendo una maratón de películas amorosas y románticas en Netflix. Tenía un poleron súper abrigado para tapar sus gigantes ojeras y iba en ropas parecidas a un pijama. Comenzó a oír una voz conocida en un pasillo a lo lejos, decidido a espiar saco la cabeza por detrás de unos estantes. -sapo se nace sapo se muere...-se dijo a el mismo y vio que era bolivia, sospechoso, ¿Que hacía ese boliviano en esta tienda?, el vivía muy lejos y era obvio que debía haber más tiendas por allá. Comenzó a pensar en algunas razones de porque el boliviano estaba ahí, pero no encontraba nada, en su momento de descuido el individuo sin mar ya no estaba. -¿¡Que?!, Pero estaba justo ac...-una sensación en su espalda lo hizo voltear encontrándose con bolivia. -¿asi que el lagarto metiche mete sus narices dónde no le conviene...?-sonrio de lado mientras apoyaba una de sus manos contra el estante que lo tenía acorralado. <<Chucha ya me cacharon, ¿Que hago? Aaa>> El chileno estaba re nervioso, eso le pasaba por sapo. El boliviano se estaba acercando demasiado lo que le resultó incómodo así que como buena persona completamente racional que era le pegó una patada en las pelotas y salió corriendo, tomando el pan que tenía en la mano haciendo que casi lo arresten por robo. Cuando volvió a pagar el pan el boliviano lo veía con una vena en la frente y le hizo una seña de que lo iba a matar.
-ya verás chile, ¡cobraré mi venganzaa!, y de paso tomo mi mar.
-si claro-sonreir sacándole la lengua- es miooo, nunca vas a surfeaaar.-comenzo a reírse del boliviano y salió de la tienda tranquilamente. Quizás no era bueno enojar a bolivia ya que se veían mucho pero no sé divertía tanto desde hace un rato. Se sacudió su ropa de a poco, hasta ya se había olvidado la razón por la que lo espiaba, suponía que había sido por qué había pasado por el lugar, realmente le alegro eso, siempre se puede molestar a bolivia.
Un mensajito en su whatsapp le hizo abrir los ojos.
-oh no... Bolivia está vez si me va a sacar la chucha...
El pesado sin mar💢 Ven al parque a las ocho de la noche, no te tardes... Arreglaremos las cosas... ✓✓ 2:26 pm.
