flos pueri ¡! hopegi

Rose

– A ver si entendí, ¿hay alguien que te ha estado dejando flores en tu casillero y notitas sin razón alguna? – preguntó Jimin algo algo confundido y también sorprendido.

Yoongi asintió levemente sin levantar la mirada de su desayuno, ya habían pasado más de dos semanas desde que encontró aquella linda flor en su casillero, la primera de muchas.

Todos los días sin falta encontraba una pequeña flor en su casillero junto con una notita, aunque habían varías veces en el que se repetían las florecitas.

-¿Y no te da curiosidad saber quién es? - Le preguntó Namjoon, que estaba entretenido jugando con el cabellito de su novio, Jimin.

-Pues la verdad sí, tengo varios días queriendo dejarle una notita para preguntarle quién es y el porqué lo hace, pero me da algo de pena.- dijo levantando la mirada hacia la parejita.

Y es que era verdad, el realmente quería saber quien era la persona misteriosa que le dejaba lindas notitas y flores.

– Gigi, deja la pena de lado, el que no arriesga no gana, dice mi santa madre.– habló Jimin haciendo que el más bajo de los tres soltara una risita.

Después de pensarlo unos segundos, sacó de su mochila un lapicero de tinta rosa junto con una pequeña libreta a la cual le arrancó una hoja para comenzar a escribir.

El realmente estaba decidido a saber quién era.

.

Al terminar la última clase del día, Yoongi corrió por los pasillos hasta llegar a su casillero, para dejar la notitas que había escrito unas horas atrás ahí.

Al abrir su casillero encontró una pequeña rosa roja, era la primera vez que la persona misteriosa le dejaba una rosa y Yoongi estaba realmente muy feliz ya que era una de sus flores favoritas.

Tomó rápidamente la hojita que estaba junto a la rosa para poder leerla.

"Un pajarito muy chismoso me contó que tienes curiosidad por saber quién soy, así que te daré una pequeña pista; mis iniciales son JH."

El peliazul sonrió al leer lo último, tenía una pequeña sospecha de quién podía ser, así que decidió no dejar la notita que había escrito, ya que el anónimo se había adelantado.

Metió la hoja junto con la rosa en su mochila, con cuidado de no hacerle daño a esta última para después cerrar su casillero y caminar hacia la salida.

– peachykss.