El Lago

CAPITULO 1: Antes de todo.

Hace frío, mis pulmones se llenan de agua, y mi mente moribunda solo pensaba, ¿Cómo lo supo él?...
Pero empecemos desde el principio...

Todo comienza desde el primer año de preparatoria, era joven ingenua y en una nueva ciudad, nueva escuela, nueva vida, mi rota y disfuncional familia y yo acabamos de mudarnos de Brooklyn al bello Chicago, mis padres acababan de separase y mi madre acababa de recibir una oferta de trabajo y sin dudarlo me hizo abandonar a mis amigos, pasatiempos, y todo a lo que estaba acostumbrada. La odie por eso, pero ya no me quedaba más que despedirme y empezar mi nueva vida.

Era 26 de Septiembre lo recuerdo muy bien entre por ese pasillo la preparatoria era gigante y yo no tenía ni idea de a dónde debía ir, fue ahí cuando apareció Melani.

-!HEY¡ Tú debes ser la nueva, encantada me llamo Melani -era hermosa tenía tes morena, el pelo rizado y negro, labios grandes y unos ojos presiosos, ah y era muy alta.

-Hola, mi nombre es Jane, mucho gusto...-realmente no sabía que decir siempre fui muy mala socializando

-No sabes a dónde ir cierto? Te miras desubicada, tranquila dame tu horario y yo te guío, puedo darte un recorrido en el receso para que sepas dónde está cada aula -ella era presiosa y además de eso era increíblemente amable

-Claro muchísimas gracias nose que habria sido de mi sin ti -realmente no lo sabía

-Claro no te preocupes para eso estoy - dijo sonriendo mientras tomaba el horario de mi mano y avanzaba

-Tienes clase de informática, genial estás en mi clase, vamos -dijo emocionada

Avanzamos por unos cuantos pasillos mientras ella saludaba a todos a su paso, se notaba a simple vista que era la chica guapa que es amiga de todos, realmente era un ángel o eso creía.

-Profesor, lamentamos la tardanza, estaba guiando a la recién llegada - dijo mientras abría con cuidado la puerta del aula y asomaba su cabeza por ella

-Tranquila señorita Melani, puede tomar asiento, alumnos les presento a su nueva compañera -dijo señalandome y haciendo una larga pausa para lo que supuse era presentarme

- Ah... Mi nombre es Jane... Un gusto, supongo -dije nerviosa

-Puede tomar asiento señorita Jane, empezaremos la clase chicos -dijo mientras abría su libro y comenzaba a hablar de la clase

Todo iba bien, aparentemente ya tenía una amiga o por lo menos alguien a quien recurrir si necesitaba ayuda, era el primer día y había llegado más lejos de lo que había creído que llegaría, talvez las cosas no serían tan difíciles después de todo... Talvez.