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Mingjue se estaba despertando, su ojos pesaban ya que desde que había regresado de la habitación de su hermano trató de dormir sin él, como que le fué difícil; miró por la ventana y vió que aún estaba oscuro pero con ligueros todos de morado y rosa, dando a entender que va a amanecer, serían más o menos como las cinco de la mañana.

Decide levantarse, ha que dudaba poder volver a dormir otra vez, mira aquella cama vacía y suspira, se cambia sus ropas y se prepara para ir a desayunar.

Caminando al comedor se topa con la puerta de la habitación de Huaisang, de detiene unos segundos

Tal vez aún siga durmiendo, aún es muy temprano

Piensa el Nie y abre la puerta con delicadeza logrando abrir una parte, pero ve que estaba vacía, haciendo que abra por completo, afirmando lo visto anteriormente

Sale del cuarto, un discípulo pasó a su lado, no sin antes hacer una reverencia

- dónde está Huaisang?- pregunta mientras veía como el discípulo se erguía

- el segundo maestro se levantó hace una hora, está en el campo de entrenamiento

Bueno, eso no se la esperaba, asiente y luego se despide del discípulo para dirige al lugar donde estaba el menor

El sonido de un sable en el aire en constantes movimientos exactos y precisos, el portador a pesar de que ha cometido unos cuantos errores trabaja de hacer el doble de esfuerzo para mejorar

El menor había cambiado su peinado a una cola de caballo con uno hermoso adorno, su túnica larga y fina fue cambiada a una que le permite movimiento, así como agregó algunas partes de una armadura dorada, que combinaba perfecto con su ropa y sus ojos, su mirada era seria y concentrada mientras se movía con rapidez y una agilidad para pasar los obstáculos.

Mingjue miraba a ese distinto Huaisang, en solo unos cuantos días había mejorado sus movimientos, aprendido las cosas que siempre quiso enseñarle, llegando a un avance extraordinario, se había convertido en el hermano que siempre quiso

Se acercó más, viendo como el contrario derrotaba a los demás discípulos que estaban entrenando con él.

- ya me parecía raro no verte por aquí, Lan-Xiong ha venido o algo?- dijo el del sable en manos deteniendo sus movimientos para luego voltear para estar frente a frente con su hermano

El maestro del Sable Rojo se sonrojó ligeramente al ver de cerca al contrario, si bien le quedaba perfecto ese estilo y se veía mejor de cerca, pero algo le faltaba

La dulce sonrisa que fue reemplazada por una mirada sería e indiferente

Iba a decir algo, pero escucha el sonido del sable en movimiento, saca a Baxia rápidamente logrando bloquear un ataque que fue dado por su mismo hermano, que le miraba con una sonrisa desafiante

- siempre debes estar listo para un batalla- el más bajo retrocede rápidamente, para luego apuntar con su sable a su hermano, dando a entender que quiere pelear por él

Una sonrisa se forma en los labios de Mingjue y sujeta a Baxia aceptando la invitación para luego correr hacia el contrario

Casi una hora duró la batalla, Mingjue nunca pensó que iba a ser complicado pelear con Huaisang, ya que siempre había sigo un cobarde pero ahora era lo contrario

En un rápido movimiento el Nie mayor logra esquivar de nuevo el ataque del sable ajeno, pero logró dejarle una ligera cortada en su mejilla

Pero lo que no esperaba es que su hermano esté detrás de él y logré derribarlo en un movimiento fuerte, haciendo que caída al piso con Baxia a su costado, cuando se dio cuenta, su hermano le estaba apuntando con el sable, aún con una sonrisa victoriosa

- acaso no lo viste venir?- dijo el más bajo en un tono burlesco para luego alejar la espada y por ende el también se empezaba a retirar- una buena pelea para comenzar el día

-nada mal, nunca pensé que mejorarías en tan poco tiempo- dijo el líder mientras se levanta y tocaba su mejilla que notaba un poco de sangre- a dónde vas?

Preguntó incrédulo al ver que el ajeno estaba lléndose dándole la espalda

- a bañarme, que quieres?,  un beso en la mejilla?, Creo que que eres muy grande para eso Mingjue- respondió el menor en un tono frío mientras seguía caminando sin importarle nada el estado de su hermano

Mingjue abrió los ojos del asombro por esa respuesta, era la primera vez que contestaba de esa manera, y hace mucho que lo llamaba por su nombre y no como "da-ge". Así como nunca había demostrado esa personalidad fría e indiferente

"Que le estaba pasando a su hermano?"

- oh Da-ge!, Estás herido!, Déjame curarte- decía un muy preocupado Huaisang que se horrorisó al ver a su hermano con heridas

Le invita a sentarse en la cama y luego saca algunas cosas para curarle con las cuales sus manos gentiles trataban

- solo son unas pequeñas que me hice en la caza nocturna, no es para tanto- dijo pesadamente el mayor aguantando el ardor en las heridas

- deberías tener más cuidado Da-ge, Me preocupas mucho- decía el de cabello corto deprimido mientras atendía las heridas de la cara ajena

Mingjue iba a decir algo pero ruge adolorido por el ardor en una de sus mejillas que tenía una cortada que era tratada por el contrario, pero luego se queda inmóvil al sentir un tierno beso en donde estaba aquel corte, haciendo que el corazón del mayor lata rápidamente

- con eso te curarás- comentó sonriendo dulcemente el menor, contagiando esa calma y alegría a su Da-ge

Recuperando a Huaisang - Niecest Donde viven las historias. Descúbrelo ahora