CAPITULO 2 (FINAL)

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Ha pasado una semana y ya estaba de vuelta en la escuela, me sorprendió como Tae no había vuelto a intentar ir a mi casa y me sentía agradecido por evitarme eso, aunque algo en el fondo de mi se moría por verlo, pero eso es algo que no voy a reconocer.

Entre a la escuela e hice mi recorrido hasta mi salón, temprano, como siempre, lo que no esperaba era encontrar a Taehyung sentado justo en mi asiento designado, estaba durmiendo, por lo que me senté en la silla de alado, pero justo en el momento en el que me senté, el se despertó y me sonrío, sin saberlo, estaba amando esa sonrisa, la extrañaba.

-Qué bueno que has vuelto. – Solo pude sonreír, no quería hablar, pero el sí. – Decidí no ir mas a tu casa para darte espacio, espero que te haya servido un poco de espacio y tal vez paz. – Asentí. - ¿No quieres hablar conmigo o te has quedado mudo de repente? Ya se ¿Ha sido mi belleza? – Me reí de él y decidí hablar. – No, no ha sido tu belleza, simplemente no tengo ganas de hablar demasiado. – El asintió y miro hacia el frente. - ¿Quieres salir hoy? Podemos ir a mi casa. – Tenia tiempo, pero no podía arriesgarme a que pasara lo mismo de la vez pasada. – Tengo que pensarlo. – El me miro. – Esta bien. – Y nuestra conversación termino justo cuando el profesor entro al aula. – Buenos días jóvenes.

Tres clases habían pasado tan rápido, ni siquiera las sentí, tal vez sea el hecho de que en tres clases lo único que había hecho era sido mirar por la ventana. Era mi tiempo libre, fui por mi desayuno y me marché al aula B3 que siempre estaba vacía, desde hace dos años nadie ocupaba esa aula, pero siempre estaba limpia. Tomé asiento en el escritorio que estaba al frente del aula y comencé a desayunar, esto era mil veces mejor que sentarme en el comedor con muchos alumnos y mucho ruido.

Llevaba tal vez quince minutos recostado en el escritorio, había terminado mi desayuno y faltaban cerca de diez minutos para que el receso terminara y cuando menos lo espere, Taehyung abrió la puerta del aula, entro, se paró frente a mí y su mirada transmitía confusión y un poco de enojo tal vez.

-He de suponer que llevas todo el receso buscándome – Su rostro lo decía todo. – Así es, cada vez parece que te escondes más de mí. – Y ahí estaba la razón de lo que creía su enojo. – Bueno, pero ya me encontraste. – Me senté y el hizo lo mismo a mi lado. – Si y ha sido difícil, pero bueno, quería hablarte de lo que te propuse hace un rato. No quiero causar problemas, por lo que, si no quieres ir, lo entiendo, no sé ni si quiera por que hice la pregunta si sé que a veces no puedes salir, pero yo realmente quería que... - Tomé su rostro entre mis manos, estaba hablando mucho. - ¿Puedes dejar de hablar un rato? – El asintió y seguí hablando. – Yo si quiero ir, quiero pasar tiempo contigo, pero hay algo que tienes que entender y es que yo no te hago un bien en tu vida, tienes que alejarte de mí, estoy roto y no hay alguien que pueda parar esto, siento mucho dolor, pocas veces soy capaz de sentir realmente felicidad, desde mi niñez ha sido así, mi padre se ha encargado de hacerme infeliz y soy un cobarde para escapar de casa, así que lo mejor es que te alejes de mí, no hago un bien, soy alguien que no merece a nadie. – Las lágrimas comenzaron a salir. – Por favor, te lo pido, aléjate de mí. – Sin darle tiempo a que respondiera, me fui, salí huyendo como el cobarde que soy, lo deje sin mirar atrás y esperaba que el hiciera lo mismo.

Llegue a mi casa, al final no tenía otro lugar a donde ir, no quería estar cerca de él, no debía estar cerca de él, y aunque me doliera tenía que alejarme y hacer que él se alejara de mí. Subí a mi habitación y me recosté en la cama, simplemente mi cerebro comenzó a traerme el recuerdo de el rodeando mis brazos y eso no era bueno, tenía que alejar cualquier pensamiento que me llevara de vuelta a el, así que decidí levantarme, baje a la cocina y me puse a cocinar algo para mí, tal vez así aleje un poco mis pensamientos.

Termine horneando un pastel, lo decore y lo guarde, tal vez había encontrado una nueva forma de despejar mi mente y concentrarla en algo más. Mientras limpiaba la cocina escuche un golpe en el piso de arriba, no tenía idea de quien se trataba, no había nadie en casa, eso era obvio y mascota no teníamos, papá odiaba todo tipo de animal, decidí subir a ver de qué se trataba y no era nada más que Taehyung, no sé cómo había entrado y no quiero saberlo, solo necesitaba que el saliera de la casa.

A Different Way (VKook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora