Capítulo 2: Un intercambio interesante

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Una persona podría decir que se siente cómoda con alguien después de haberla conocido hace unos minutos, otra podría adoptar un enfoque más reservado y nunca bajar la guardia con esa persona. Hay muchos factores que influyen en cómo actuaría alguien, como los gestos, la apariencia exterior de esa persona y sus gustos y disgustos.

Y cuando uno ha encontrado a una persona de gustos y gustos similares, es probable que ambos lados quieran saber más el uno del otro, lo que lleva al conocimiento y finalmente a la amistad.

Después de conocer a Kawasaki-san, me encuentro en una especie de predicamento.

Aunque dije que me siento cómodo con ella, lo suficiente como para que el silencio entre nosotros no sea incómodo, todavía tengo esta voz detrás de mi cabeza que dice que no confíe en ella, aunque aparté esos pensamientos groseros de mi mente antes porque los consideré inadecuados. ya que Kawasaki-san me trató amablemente y sería inapropiado que no la tratara de la misma manera.

Después de su partida del frente de nuestra casa, seguí a Komachi adentro y cambiamos nuestros zapatos por pantuflas.

Noté que Komachi me dio una mirada extraña y arqueé una ceja.

"Onii-chan, estás sudando tanto que es un milagro que no tuvieras olor cuando estabas con Kawasaki-nee."

Ahora que lo mencionó, estaba sudando mucho. Cuando miré el espejo cercano, mis sospechas se hicieron valer cuando vi gotas de sudor goteando de mi cabello y mi camisa tenía manchas de sudor.

Wow, me veía realmente asqueroso.

"Jajaja Onii-chan que eran realmente tan nerviosa cuando estabas con Kawasaki-nee el que comenzó a sudar que tanto? Hubiera sido más divertido si usted fuera un desastre tartamudeo! Debe haber sido bruta para Kawasaki-nee estar cerca ¡tú!" Komachi exclamó mientras se reía, de hecho se estaba riendo tan fuerte que comenzó a resoplar.

¡Gruñir! ¡Gruñir!

¡Dejen de reír, cerdos!

Le hice un kárate en la cabeza y la escuché gritar al impactar. Se frotó la cabeza con los ojos llorosos e hizo un puchero.

"Mou onii-chan, solo estaba bromeando... jejeje" ¡Oye, no te disculpes por reírte de mí cuando te ríes mientras te disculpas!

"Date prisa y báñate, vayamos temprano a ese centro comercial para que podamos irnos temprano y yo pueda volver a casa". A decir verdad, no estaba de humor para ir al centro comercial, pero ya le dije a Komachi que iría con ella. ¡Y dañaría mi orgullo como hombre si me retracto de mi palabra!

Al darse cuenta, corrió hacia la sala de estar y subió las escaleras a su habitación.

Santo cielo, qué niño tan excéntrico.

Con ella fuera del camino, finalmente podré terminar mi café matutino que dejé hace un tiempo. Maldita sea, apuesto a que ya hace frío ...

Mientras me dirigía a la mesa, noté a una mujer con una mata de cabello castaño oscuro sentada donde estaba papá y leyendo el periódico como él.

Ah, entonces las mamás ya están despiertas.

Sin decir palabra, me senté frente a ella y tomé mi café ya frío.

"Buenos dias mama."

"Buenos días Hachi, ¿tu padre ya se fue?" Mamá me preguntó sin apartar los ojos del periódico.

"Si."

"Bueno, volvió a dejar su computadora portátil".

"Ah, ya veo. Bueno, papá es bastante inteligente, así que creo que estará bien sin él".

El camino de la reforma del Hikigaya  HachimanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora