Seven

5

Avaricia

Dolor.

Es lo único que siento en este momento.

Ni siquiera tengo fuerzas para levantarme e irme a casa.

Tal vez fue una mala idea coquetearle a esa chica pero como se supone que iba a saber que tenia un novio que media como 2 metros

Mierda, en serio me duele mi cara

¿Dónde demonios esta mi teléfono en estos momentos?

Busco en mis bolsillos y luego miro a mi alrededor lo cual no sirve de nada porque esta muy oscuro.

Del bolsillo de mi chaqueta saco mi celular y pongo la linterna.

En que lugar se habrá caído esa cosa, no puedo perderlo por ningún motivo, costo mucho tiempo, esfuerzo y sudor de mi frente el poder comprarlo, mi hermano me matara si lo pierdo.

Desesperado, desbloqueo mi celular y busco a Sean en mis contactos.

Marcando ...

...

...

...

--¿Hola? - Gracias al cielo si contesto-- ¿Noah estas ahí? - pregunta.

--si, aquí estoy pero tengo un problema-- hable, en mi tono se debió notar el miedo porque me empezó a hablar con mas preocupación.

--¿Noah que ocurrió? ¿Estas bien? Estas herido? -

--No te preocupes por eso estoy casi bien pero ahora tengo un problema mayor--

--¿Qué pasa Noah? --

--No encuentro mi teléfono-- el silencio invadió nuestra llamada por unos 30 segundos, seguido de esto el colgó.

¿Vaya para que quiero enemigos con estos amigos?

Procedo a seguir buscando mi teléfono, hasta que 30 minutos después me doy cuenta del porque me colgó Sean.

Tal vez si me pegaron muy fuerte en la cabeza.

Me alejo de esa asquerosa calle, reviso mis bolsillos para asegurarme de que me queda algo de efectivo.

Mierda, mierda, mierda

Primero no conseguí un buen polvo esta noche, luego mi teléfono y ahora no tengo dinero.

Sin duda esta es la mejor noche de mi vida.

 Mejor empiezo a agarrar vuelo a casa, a esta hora las calles son peligrosas.

Podrían robarme.

No, no lo creo, de todas formas no llevo nada de valor conmigo.

En el peor de los casos en vez de tomar algo físico de mi, me tomen a mi.

Pensar en ello me hizo sentir escalofríos, el que tomen mi fino y delicado cuerpo no es una broma, ese derecho solo lo pueden tener unas pocas personas, meto mis manos en mis bolsillos, hace frio, hasta puedo ver mi aliento.

Aaaargh, soy un dragón.

Ya me esta dando el mal del puerco, aun deben faltar unas 2 cuadras para llegar a mi apartamento, a este paso debería llegar en 15 minutos, si llegasen a intentar a robarme serian 7 minutos y si mama llama para preguntar porque no estoy en mi habitación serian 5 minutes, seria una muy buena noticia si ella ahora estuviese trabajando en el turno nocturno.

Acelero un poco mis pasos, el aire frio me golpea en la cara, subo la capucha de mi abrigo y me abrazo a mi mismo, mi ya logro ver mi edificio así que empiezo a trotar.