La suerte (no) es un poder

Capítulo 2

Abriendo los ojos con la alarma sonando de fondo, levanta la cabeza al mismo tiempo en el que su perrita se levanta a su lado lado y se coloca encima de su estómago, para después dar un salto al suelo haciendo presión en ella.

-Uff hija de....- Sin terminar la frase camina hacia su teléfono para apagar la alarma y se sienta en su silla de escritorio entrando a WhatsApps para ver los mensajes que le llegaron durante la noche, revisa unos cuantos chats y apaga el teléfono mientras camina hacia la cocina para beber algo antes de prepararse.

Al abrir la nevera la luz de ésta parpadea un par de veces.

-Ya se está estropeando, lo que faltaba-Comentó tras ver que la luz ya empezaba a fallar, toma la leche y se acerca al armario para agarrar un vaso donde echar la leche y beber.

Camina hacia hacia la sala de estar y coge la manta que tenía encima del sofá,se la coloca encima cual vieja de pueblo, incluso por encima de la cabeza mientras su pelo sobresale de ésta.

Vuelve a tomar su teléfono y abriéndolo mira su fondo de pantalla unos segundos.

-Es que soy una artistaza, mira que fondo de pantalla me hice en diez minutos-Dijo mientras asentía con la cabeza y sonreía observando su precioso fondo.

Volvió a apagar su teléfono y recapacitó unos segundos.

-Ostia,si yo quería ver la hora-volvió a encender el teléfono y miró la parte superior de la pantalla la cual indicaba que eran casi las siete y media.

Caminó a su habitación donde procedió a cambiarse de ropa, unos pantalones anchos, rotos por las rodillas y una camisa blanca de manga larga con un jersey por encima.

Preparó su mochila y bajó dónde sus amigas la esperaban, caminando a paso rápido ya que eran casi las ocho, como siempre llegando tarde.

-Vamooooos, no eres más lenta porque tienes la cabeza pegada y no la tienes que buscar-Dijo Bea irritada mirando a Noah mientras tambien caminaba a paso rápido.

-Vamos, no seamos más lentas-Le dijo Marina a Bea mientras empezaba a caminar.

Las tres subieron en silencio hasta llegar al instituto ya que les faltaba el aire para empezar con una conversación.

Empezaron normal la primera hora con clase se Historia, Noah llevó un pañuelo de cuello que usaba como manta cuando tenía sueño o frío, hoy era uno de esos días en los que tenía ganas de quedarse en casa durmiendo así que sacó el pañuelo de la mochila y se tapó con él, tampoco le iban a decir nada, todos se estaban helando de frío ese día, y como Noah a la moda menos Noah precavida,da como resultado a Noah con pantalón roto.

Se lo volvió a colocar a lo vieja de pueblo, ésta vez tomando la típica posición encorvada, colocando la cabeza encima el pupitre abrazándose a sí misma bajo el pañuelo, observando las diapositivas que ponía su profesora en el proyector, desvío la mirada a la venta por un segundo y casi juró que vio algo agacharse.

-Genial, ahora soy espiada por la NASA JAJAJA-pensó para sus adentros, con una pequeña sonrisa mientras seguía mirando por la venta unos cuantos segundos más.

Terminó la clase y se levantó para ir a su siguiente asignatura, cogió su mochila y se la puso encima con el pañuelo puesto todavía, era estúpido, pero ella también lo es.

Bajó hasta el aula de tecnología, la cual también era la de informática, llegó y se sentó en su sitio, última fila ordenador de la derecha, al llegar toda la clase lo encendió y como el profesor todavía no había dicho nada, hizo como todo adolescente aburrido con una pantalla delante haría, buscar juegos por internet, todos sus juegos de la infancia ahora estaban tambien en su aula de tecnología/informática.

Ésta vez solo llevaba la manta por la espalda, estaba cerca de la puerta y no quería que nadie la viera hacer el idiota en clase y menos si era una de sus crushes de bachillerato.

-Podéis empezar a hacer éstos ejercicios-Dijo el profesor mientras se levantaba y apuntaba en la pizarra.

Empezaron a hacer los ejercicios hasta que casi todos terminaron,Noah, como siempre, era de las últimas, casi terminando apartó el teclado y se asomó a la puerta, volviendo a ver algo apartarse, se quedó unos segundos más viendo la puerta, pero al no ver nada extraño otra vez, siguió con los deberes que le habían mandado.

Al terminar la clase Noah fue con sus amigas para contarles lo que le estaba ocurriendo, subió las escaleras y en el aula se las encontró reunidas en círculo.

-Chicas, chicas... Me pasa algo raro-Dijo Noah mientras se acercaba a ellas apartando los pupitres a su paso.

-¿Qué pasa?¿Qué dices?-Preguntó Bea viéndola acercarse.

-Que sí que sí, que ya van dos veces que veo como una sombra apartarse cuando miro-Respondió Noah alterándose, recordando las dos veces que le ocurrió.

-pero que tú eres muy paranoica, que no será nada-Le dijo Laila intentando dar una razón lógica.

-Es enserio, no sé pero me siento observada-Siguió diciendo mientras se cruzaba de brazos

-Bueno, si te vuelve a pasar nos lo dices,¿Vale?-contestó Marina intentando tranquilizarla.

Horas pasaron hasta que llegó a casa, vestida para cama, se acostó con la luz encendida, su madre no estaba en casa pues esa semana tenía horario de noche.

De un momento a otro se escuchó ruido desde el balcón que dada desde su habitación, dos golpes secos, como si la estuvieran llamando, su perro empezó a ladrar pero la cortina tapaba el vidrio, ambos se acercaron con cuidado hasta colocar su mano en el borde de la tela.