bienvenida a Fairbanks

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-Cariño,¿Ya terminaste con tus maletas?-Mi madre era muy responsable,todo lo contrario a mi,en 3hs tomaría un vuelo hasta Alasta,hasta Fairbanks específicamente.

-Ya casi termino-Fairbanks es una ciudad muy fria y tenia que empacar más ropa abrigada de la que acostumbraba a ponerme aquí en Florida.

Me mire al espejo,mi cabello negro ya me llegaba hasta el busto y mis labios siempre iban pintados de rojo,había cambiado mucho aquella niña de 16 años que soñaba con ser modelo y hoy se esta llendo lejos para estudiar Filosofía hasta Alaska.

-Frida tu padre ya esta abajo,el nos llevara al aeropuerto-Mi madre entro en la habitación y al ver que mis pertenencias ya no estaban en sus estantes se entristeció- Extrañare el desorden que era tu habitación-dijo mientras pasaba los dedos por el polvo que había sobre mi escritorio.

La bosina se escucho tan fuerte que me hizo extremeser,mi padre era un tipo ocupado,no lo veía hacia 4 años y ahora que lo iba a ver seria para despedirse...

Abrase fuerte a mi madre y le hice una seña de que nos teníamos que apresurar.Ella soltó un suspiro y me ayudo con una maleta,bajamos la escalera y le di un ultimo vistazo de adiós a mi casa.

Cuando llegamos afuera mi padre estaba aferrado atrás de el volante mirando hacia el horizonte,yo me subí a la parte de atrás y mi madre al asiento de el acompañante. Ellos se llevaban muy mal,pero si era algo que tenía que ver con mis estudios o con mi vida cooperarían sin dudarlo dos veces.-¿Ansiosa?-dijo mi padre mirándome a los ojos atravez del espejo retrovisor.

-Eso ni lo dudes-Le conteste con algo de pánico,estaba ansiosa,pero seria la primera vez que viviría sola y tan alejada de mis padres,no podía evitar estar un poco aterrada.

El viaje fue acompañado por un silencio bastante incomodo,así que llegar a el aeropuerto fue una de las cosas más divertidas del día.Papá llevo mis dos maletas,yo una cartera y mi mamá iba aferrada a mi llorando como una Magdalena,nos sentamos en unas sillas esperando a que avisaran sobre mi vuelo.Mi padre fue a buscar algo para tomar y comer mientras mi madre chequeaba todos los papeles-Aqui tienes tus favoritos-Papa traía en las manos unos cupcakes de frambuesa,cuando era pequeña solíamos comerlos todo el tiempo junto con jugó de naranja exprimido y el todavía lo recordaba,al recordar esto se me llenaron los ojos de lágrimas y lo abrase,pude sentir como el también se entriztecia y largaba un suspiro.Era su única hija,su niña de papá que ya tenia 19 y estaria muy lejos de el.

Mamá volvió con todos los papeles ya revisados y listos como para abordar el avion,no había desayunado así que me termine esos cupcakes en cuestión de segundos.Mi madre tenia la nariz colorada y seguía sirviendo los mocos mientras yo le acariciaba la espalda y le repetía una y otra vez que estaría bien.

-En 10 minutos sale el vuelo hacia Fairbanks,Alaska,por favor los pasajeros abordar el avión numero 5 - Ya era tiempo,sentí un escalofrío recorrer mi espalda y me levante de golpe,tome mis maletas y les di un último abrazo a mis padre. -Los adoro,gracias por todo,los veré en un tiempo...- Mi madre rompió en llanto y me abrazo lo más fuerte que pudo,papá trato de hacerce fuerte pero aun así se el calleron algunas lágrimas.

Camine por el pasillo hasta el avión y le deje mis maletas a una de las azafatas. Ya sobre el avión y en mi asiento me deje llevar y caí en un largo sueño.

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-Señorita,¿Se encuentra bien?- Estaba muy transpirada,había tenido un sueño muy extraño, era un chico de cabello muy oscuro con ojos pardos que me seguía y me aterraba un poco.-Me podría traer un vaso de agua?-La azafata asintió con la cabeza y fue en busca de uno.Ya era de noche y casi todos dormían exsepto por un bebe que me miraba divertido, era muy bonito,tenia las mejillas regordetas y unos ojos verdes muy grandes,su madre era muy pálida y dormía como un oso pero no lo soltaba sino que lo abrazaba como a un peluche,la azafata llego con mi vaso de agua yo lo acepte y me lo tome rápido para tratar de dormir devuelta.

Por suerte tenia el sueño muy fácil.

Cuando desperté el avión estaba aterrizando,ya estábamos en Fairbanks y eso me ponía feliz.En el aeropuerto me estaban esperando mi tia materna que ya vivía allí.Ella era muy bohemia y se había ido de Florida porque le estrezaban los lugares con mucha gente y mucho calor,era algo parecida a mi,aunque yo soy bastante amigable pero no mucho que digamos...

Ya bajada de el avión corrí a buscar mis maletas y a buscar a mi tía Rosana,fue fácil divisarla,solía hablar con ella por cartas y me mandaba fotos de como se vestía,peinaba,de sus viajes,sus aventuras,su casa,etc.Llevaba una coleta alta y unos leggis ajustados con un saco de lana claro,era muy hermosa y también muy adinerada.Una mujer independiente y admirable.

Me recibió con una sonrisa y yo fui corriendo hasta sus brazos.-¿Como estas Frida?-Me sonrió y yo le devolví la sonrisa,la verdad era que tenia bastante frío y estaba exausta así que le pregunte si no podríamos hablar en la casa,a lo que asintió contenta me tomó de la mano y me dirigió a su auto que se encontraba en el estacionamiento.En el camino fuimos hablando sobre que estudiaría y donde viviria,había adelantado un alquiler de un monohambiente allí a unas 10 cuadras de la universidad y eso me ponía muy feliz.

Llegamos,era un lugar precioso,era una especie de cabaña con Codina,una cama,television,baño,todo perfecto para una sola persona,muy bien decorada a mi gusto la tía Rosana se había lusido esta vez.

Me dejo en la puerta y me entrego las llaves,prometió que mañana vendría a visitarme porque hoy tenia mucho trabajo,yo sin poder quitarme la emoción por mi casa asenti rápidamente y la abraze fuerte.

Ella se fue en su auto y yo entre en mi nueva casa a ordenarla a mi gusto.Sin dudas era perfecta.Tenía un ventanal gigante con vista a un lago precioso.
-Bienvenida a Fairbanks-me dije a mi misma en vos alta,estaba maravillada.

Puntos DébilesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora