El Corazón Del Campeón

Capítulo 8

   Todo se había calmado un poco en cuanto a las discusiones, pero se sentía el aura de las personas aún molestas. Todos se sentaron y continuaron las batallas aunque, todo se sentía algo raro debido a lo ocurrido.

  Hanami seguía narrando dichas batallas mientras que los otros bladers esperaban su turno. Aiger se encontraba viendo las batallas en televisor desde una pequeña habitación. No se concentraba mucho en las batallas por todo lo pasado antes.

  Mientras que veía las batallas con cuidado alguien entró a la habitación.

"¿Huh?¿Lui que haces aquí?"preguntó Aiger con cierto interés.

  Sin embargo, Lui no contestó a dicha pregunta. Hubo un silencio algo incómodo, pero luego Lui empezó a acercarse. Eso empezó a poner nervioso al castaño.

  Rápidamente Aiger empezó a dar pasos hacia atrás para alejarse, pero se topó con la pared, estaba acorralado. Lui aprovechó la oportunidad poniendo sus brazos a ambos lados del cuerpo contrario. Limitando así la movilidad del menor.

  "Lui ¿qué vas a h-hacer?"preguntó  Aiger muy nervioso ante la situación.

"Eso lo veras" dijo en un tono pícaro. Aiger iba escapar pero Lui lo sostuvo más fuerte. Empezó a besarlo por el cuello dejando ciertas marcas visibles. El peli castaño no podía más que gemir ante aquello. No tenía la fuerza para detenerlo.

"Ah~ por favor p-para Lui" dijo Aiger tratando de no rendirse haciendo fuerza para alejarlo pero no podía. Rayos cuanto desearía que Fubuki estuviera ahí para ayudarlo. De seguro que sí lo salvará  mataría a Lui después.

Lui posó sus manos en la cintura del castaño. Para luego, apegarlo más a su cuerpo. Comenzó a besar al menor en el cuello y la boca bruscamente.

  Aiger continuaba los fallidos intentos de separarlo. Lui tomó al castaño y lo cargo hacia un sillón, para luego posarse en cima del menor. Continuó besando al contrario sin importar lo demás o que los encontraran así o al menos para el no es tanto.

Todo continuo por largos minutos lo único que se escuchaba era los pequeños gemidos de el castaño en la habitación.

  Ya se le hacía raro no ver el castaño cerca. Se empezó a preocupar. Así que decidió buscarlo.

  Fubuki iba caminando buscando a el castaño en cada habitación y sala posible. Pregunto a todas las personas posibles pero nada. No pude ser que nadie lo haiga visto. Ya se estaba poniendo preocupado. 

  Se fue a buscarlo a la última habitación que se le ocurría. Al entrar se encontró...

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Este es el capítulo de hoy. Trate de hacerlo un poco más profundo en el tema de relaciones así. Espero que les haiga gustado.

Hasta el próximo capítulo.

¡Adiós!