Gritos Insonoros

Epílogo

Derek se encontraba sentado en los escalones de la mansión con un niño de dos años en sus brazos, el pequeño era de cabello azabache de ojos azul.

- Por favor no vayas a llorar mocoso, la última vez que lo hiciste casi nos dejas sordos – dijo el alfa levantando al bebé que hacía muecas

- Vamos Derek mi bebé no es tan malo – dijo Niall quitándole al pequeño de sus brazos

- Es porque contigo no llora y recuerda que al parecer el mocoso es un híbrido y grita tan fuerte como Zayn – dijo Derek levantando una ceja

- Bueno es hijo de un banshee, no puedes esperar que sea callado – le dijo el rubio divertido

- Solo por Stiles lo soporto, es su padrino yo no lo soy – dijo frunciendo el ceño

- Vamos lobo no seas tan amargado además solo estás molesto de que tu cachorro quisiera ir con Mieczyslaw a la comisaria. Por cierto me alegro tanto de que por fin estemos en casa, él puede descansar mejor y así no se preocupa tanto del cachorro. Cada vez que venía con Zayn se quejaba de lo mucho que Mieczyslaw se peleaba con sus compañeros y jefe por obtener el traslado

- Ya sabes como Stiles pero recuérdale a Zayn que él fue quien se ofreció para estar con Stiles, yo creo que tu hubieras soportado más

- Zayn quiere demasiado al gatito, esa no es nuestra culpa – dijo Niall restándole importancia – por cierto, ¿dónde está Evan?

- No me recuerdes a ese chiquillo, al aparecer esta con su novia, ni siquiera sabía que tenía novia

Evan era un chico de 15 años que adoptaron en Washington, el pequeño era un lobo que fue separado de su manada. Stiles y Derek buscaron a sus padres pero habían muerto y no había nadie que cuidara de él así que se convirtió en el primer hijo del matrimonio Hale Stilinski porque sí ellos dos se habían casado justo un año antes de que el castaño terminara la universidad.

- ¡Papá! – gritó un pequeño de seis años de cabello castaño de ojos verdes con motas café, su piel tan blanca cubierta de lunares

- Noah – dijo Derek cargando entre sus brazos a su cachorro

- Hola Der – le saludó Stiles con una hermosa sonrisa para después dejar un beso sobre los labios de su esposo – vamos a entrar, necesito hacer la comida para todos, por cierto Niall, Zayn fue a comprar unas cosas para el pequeño

Niall asintió entrando a la mansión y la pareja entró detrás de él, el pequeño cachorro reía divertido y Derek estaba realmente agradecido por tener una gran manada. Stiles agradecía que alguien hubiera escuchado sus gritos insonoros y lo hubiera salvado de ahogarse en su mido, ahora era muy feliz.