My Sexy CEO

El compromiso

-Eleonora sarina Maquiavelo te estás comprometiendo con Dante Rinaldi desde hoy- *dijo mi padre con tono firme en aquella reunión con la familia Rinaldi*

-Quiero una buena esposa para mí hijo, ya que él es uno de los hombres más ricos de estés país- *dijo la mamá de dante con tonos muy fríos y sin apartar su vista de mi*

-Sere la esposa que ustedes necesitan-

Me había echo a la idea de ser una Rinaldi desde que nuestra familia poco a poco se va a la quiebra, mi padre no sabía administrar su dinero siempre gastando en lujos que ya no nos podíamos permitir.

Lo mismo pasaba con mi madre y mi hermana Anastasia a donde fuera que iban presumían de mucho dinero, iban de compras todo el tiempo, la familia Rinaldi sabía que ellas eran así, por lo tanto tenía que elegir a alguien diferente para presentar a la sociedad.

Yo casi nunca salía de la biblioteca amaba leer sobre todo historias románticas podía pasar todo el día en ese lugar tan tranquilo luego de eso también ayudaba a las sirvientas con los deberes de la casa, ya no podíamos pagar a tanta gente así que las pocas personas que quedaron tenían tanto trabajo que hacer, ayudaba en lo que podía y mi hermana abusaba de ello pidiéndome que le llevará cosas a su habitación, yo lo hacía sin renegar porque la quiero mucho a pesar que ella nunca me considero parte de la familia teniendo tanto odio y envidia hacia mi.

Y así pasaron los días acercándose la fecha de la boda, tenía que probarme vestidos de novia, lencería para la noche de boda tengo que estar bien preparada para hacer feliz a mi futuro esposo, las cosas con mi hermana iban de peor en peor siempre con comentarios absurdos de lo mal que me veía, yo era una persona delgada no tenía grandes pechos pero si algo notorios, en cambio mi hermana tiene buenas curvas, rubia con ojos verdes y grandes pechos, éramos tan diferentes porque yo soy peliroja con ojos azules a veces pienso que puedo ser adoptada pero un día pude observar en la habitación de mis padres un gran cuadro con la fotografía de mis abuelos paternos, mi abuela era idéntica a mi, cuando preguntaba por ellos jamás me decían nada así que decidí ya no buscar más sobre el tema algún problema debieron tener para nunca hablar de ellos, según sé aún están vivos y viven en Canadá.

El día de hoy estamos llendo a una revisión médica tienen que asegurarse que este sana y en perfectas condiciones para tener los hijos herederos de los Renaldi....

Escuché que me llamó el médico, me levanté para entrar en su oficina estaba más que nerviosa, me hizo muchas preguntas que me incomodaron, después de unas horas nos entregaron rápidamente los documentos que necesitamos, mi madre los tomo rápidamente sujetando mi brazo me saco del lugar..

-Me desespera tener que estar tanto tiempo en un hospital, incluso cuando naciste tenías que complicar la situación para que yo permaneciera hospitalizada por varias semanas, súbete al auto-

-Lo lamento mucho mamá por todos los problemas que he causado desde que nací, voy a ser una buena hija así que te voy a obedecer- *subí al auto después subió mi mamá con mis resultados en la mano*

Al parecer todo salió bien en el hospital porque mi madre fue corriendo hacia el despacho de mi padre para contarle las buenas noticias, las cosas marchaban de acuerdo a sus planes, pero yo estaba más que nerviosa por lo que pasaría en la noche de bodas, yo no sabía nada de eso nunca había podido tener un novio mucho menos haber dado mi primer beso soy una romántica completamente ya que he leído muchas historias sobre el primer amor, quería que todo saliera bien al fin tendría algo de alegria en mi vida, lo triste sería que no vería tanto a mi familia especialmente a mi padre que aunque no tuviera mucho tiempo para mí nunca deje de quererlo no podría odiarlo, se que busca mi felicidad y la estabilidad de la familia......

Fui directo a mi habitación, era color rosa pastel con muchos peluches en mi cama, me sentía protegida al dormir entre ellos, por las tardes entraban la luz de la puesta de sol, me sentaba en la cama admirando los bellos colores que nos regala la naturaleza, algún día iré a un campo a tener un picnic Dante Rinaldi, comeremos sandwiches, pastel mientras nos abrazamos y miramos esa puesta de sol, espero que eso pase....

Y por fin llegó el día tan espero de la boda, todos en la casa estaban corriendo de un lado tratando de acamodar todo, algunos de los invitados ya habían llegado, se decidió que la boda sería en el gran jardín de mi casa pues era muy hermoso para una boda familiar, aunque algunos reporteros se había reunido afuera de las puertas de la casa no se les dió permiso de entrar, Los Rinaldi contrataron guardias para custodiar todo el lugar, sin duda alguna Dante Rinaldi era de suma importancia para el país entero eso alteró aún más mis nervios.

Mi madre y hermana entraron a la habitación donde me preparaban me dirijieron una extraña mirada....

- Me veo mal?- *dije mirándome al espejo*
-La verdad es que tú te vez mal con cualquier cosa que te pongas así que no veo que haya cambio alguno- *me dijo mi hermana en un tono burló*

Ella usaba un hermoso vestido rojo muy pegado a su cuerpo, de largo hasta la rodilla con un buen escote que dejaba ver sus enormes pechos, mi madre usaba un vestido azul marino largo tipo corte de sirena, ambas se veían hermosas

-No te preocupes por eso hija todos estarán atentos a Dante no es como si te fueran a prestar mucha atención-

Guarde silencio yo jamás peleaba y menos con ellas eran mi familia, llegó el momento y el padre de Dante el señor Alonzo Rinaldi me ofreció su brazo para llevarme a entregar, mientras caminábamos por el pasillo hacia el jardín me decía que me veía muy bonita y lo contento que estaba porque era yo quien me casaba con su hijo....

Mis nervios estaban de más ya justo en el principio del camino de rosas hacia el altar, apreté fuerte el brazo del señor Alonzo y levanté mi mirada, lo que estaba ante mi no podía creerlo..............