¿Quién te crees?

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Luego de convencer al profesor de que tuve una emergencia y por eso me tarde en entrar, me permitió seguir al aula.

Todas me echan una mirada sorprendida, mientras que Hanna interesada y los amigos de Polo extrañada.

La case sigue y pasan maso menos 15 minutos para que al fin aparezca Polo. Realmente quería conmigo, de lo contrario no se hubiera demorado tanto para venir a buscarme.

-¡Señor Montesinos!- exclama el profesor mientras Polo cierra la puerta del salón- llega tarde.

-Si...-escanea todo el salón con cuidado hasta dar conmigo, está furioso- lo lamento mucho.

-Bien, pero necesito que se siente para continuar la clase.- el profesor se gira nuevamente al tablero y agrega- De todas forma esto va hacia su observador.

-Claro.- su mirada no se retira de la mía mientras que camina y toma asiento al lado de Elías.

-Bien, continuemos- dice el profesor.

-¡Está furioso!- susurra Hannah para nuestro grupo, y las demás chicas ríen bajo.

-¿Cómo creen que iba a estar después de dejarlo emocionado esperando en el baño?- dice Paola con tono de burla, y todas sueltan una gran carcajada sin evitar mirar a Polo.

-¡Señoritas por favor silencio!- dice el profesor ya cansado- ¿Por qué no nos cuentan a sus compañeros y a mí el chiste? no han dejado de hablar desde que llego la señorita Avril- me da una mirada de desaprobación.

No puedo evitar girar y mirar a Polo, sabe perfectamente que se ríen de él.

-Tranquilo maestro, mañana todo el colegio estará hablando de eso y usted lo sabrá- dice Hannah, ella es la que más disfruta esta situación.

Escucho como alguien arrastra contra el piso una mesa, todos centramos nuestra atención en Polo, quién está rojo, parado frente a su silla- No te atrevas Hannah.- la amenaza.

-¿Yo? Yo no he hecho nada Polo ¿O sí?

-Es suficiente, si no se callan tendremos problemas. ¡Polo siéntate!- dicta el profesor.

Realmente esto a afectado a Polo, le herí su ego, me burle de él, y eso le quema.

Él sigue mirando a Hannah, pero su vista pasa de ella a mí. Y leo claramente en su mirada que me quiere destruir, pero aunque esa mirada intimidaría a cualquiera, a mí no. Me tiene sin cuidado lo que piense hacer, por lo que me acomodo en mi silla y sigo poniendo atención a la clase.

...

Suena la campana, todos nos levantamos y recojo mis cosas en la maleta.

-Polo y Hannah se acercan aquí por favor.-Aprovecho el llamado del profesor a Polo para salir rápido del aula. Y no, no es que me preocupe lo que me pueda decir, solo quiero evitar enfrentamientos, llegar a casa y comer.

Estoy apunto de salir de la institución cuando recuerdo que necesito algo de mi casillero.

-Agh genial, ¿es en serio?- me devuelvo sobre mis pasos, corro hasta mi casillero, el pasillo está despejado.

Abro rápidamente, y tomo los libros que necesito.

*Pom* el casillero se cierra de golpe, produciendo un fuerte sonido que se extiende por todo el pasillo. Al tomarme desprevenida pego un brinco mientras que agradezco que quite mi mano a tiempo.

-¡¿Qué te pasa imbécil?!- le grito a Polo - pudiste haberme machucado idiota, ushh.

-¿Qué buscabas con tu broma de mierda Karina?- dice, ignorando mi reclamo.

-Nada, solo era un reto, lo cumplí y listo, no tiene mayor ciencia- me giró con el fin de alejarme, aunque sé que no lo permitirá.

-¿Cómo te atreves?-me dice mientras me empuja contra el casillero y me encierra con sus brazos. Ya está colmando mi paciencia- ¡Me humillaste! ¿Pero quién te crees?

-¡Fue un reto ¿Sí?!-grito histérica- ¿Entiendes eso? ¿O te lo explico con plastilina?- empujo uno de sus brazos y empiezo a caminar cuando siento su agarre fuerte en mi brazo, provocando que frene, y le pegue un manotazo- Ya supéralo Polo, déjalo ir, y no me jodas más!- digo y empiezo a caminar hacia la salida de forma rápida, pero al notar que ya no me sigue disminuyo el paso.

Al parecer me salí con la mía.

Polo

Me paso la mano por la cabeza, estoy colérico.

Veo como Karina se aleja a paso lento. Es que se nota que ni le importa, pero ¿Quién se cree esa estúpida?

Mañana todos estarán hablando de eso y me niego, a qué manchen mi reputación así.

-Caíste en su juego,- reconozco esa voz perfectamente- te ves tan ridículo- empieza a reír.

Trato de parecer tranquilo y nada afectado.

-¿Su juego? A eso no se le puede llamar juego, para que realmente sea uno se necesita mucho más que eso.-rio- juego, por ejemplo, es el que te armé yo a ti.-veo como su sonrisa se desvanece.

-Di lo que quieras, te crees mucho ¿No?

-Lo soy linda, lo soy- le digo mientras guiño un ojo y me alisto para irme.

-Que pena que no todas te vean de ese modo, por ejemplo- hace como si pensara, chasquea los dedos- ¡Karina!. Ella te ve como realmente eres, un estúpido e idiota.

Y así empezará a pensar todo mundo cuando se enteren de lo que me hizo esa tonta.

Rio- sí quisiera, ella podría caer rendida a mis pies como tú, y como... todas.- sonrío.

-Lo dudo- dice y se voltea para irse.

-Te lo demostraré. Ella me lo debe y me lo pagará de la misma forma que lo hace quien me reta.

-Suerte con eso.- me dice dándome la espalda.

Yo les mostraré cómo se crea un juego, y como todos los que te rodean, son tus juguetes.


Nota de autora:

Hola querido lector, si has llegado hasta aquí te doy la bienvenida, muchas gracias por darle la oportunidad a esta historia.

Te tengo que informar que esta historia aun no la estoy desarrollando, pues estos primeros capítulos los subí única y exclusivamente para un concurso. Sin embargo te invito a guardarla en biblioteca y a seguirme para que no te pierdas de ninguna actualización.

Ademas te invito a leer mi otra historia "Te encontré" que la puedes encontrar en mi perfil.

Muchas gracias.

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⏰ Última actualización: Dec 02, 2020 ⏰

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