♔︎𝑬𝒍 𝒔𝒆𝒄𝒓𝒆𝒕𝒐 𝒅𝒆𝒍 𝒓𝒆𝒊𝒏𝒐 ✔︎𝐶𝑖𝑒𝑙 𝑥 𝑡𝑢✔︎

I

Me encontraba en Londres, era el año de 1891, mi nombre es _____ , tengo 16 años; a esta edad soy una condesa y estoy a cargo de la compañía de mi familia.

Aunque tenga esta corta edad me puedo dar cuenta de que Londres está lleno de delincuentes y de acontecimientos inexplicables para la sociedad, la reina se encarga de esos problemas acudiendo a su perro guardián, la mayoría de gente desconoce quien es el perro guardián.

La gente no le toma importancia a cómo se resuelven los problemas, solo dejan de existir matando a la gente que los provoca, pero, lo que no sabe la gente es que esos inconvenientes se resuelven con criaturas terroríficas; demonios, shinigamis; que son criaturas que recogen tu alma al morir, ángeles, que por muy encantador que suene, ellos al querer "purificarte" pierden la cordura y pueden llegar a ser los peores, todas esas criaturas existen entre nosotros disfrazados de personas normales, además la reina es poseedora de un ángel.

¿Cómo es que se esto? Es gracias a mi socio Ciel Phantomhive, él, a sus 16 años, es poseedor de un mayordomo demonio llamado Sebastián Michaels, por el momento lo que sé, es que hicieron un pacto en donde Sebastián debía de cuidar a Ciel hasta que realizara su venganza contra quien asesinó a sus padres. Pero lo de la reina lo supe por mi cuenta.

Según Ciel, el conocía muy bien al perro guardián de la reina y me contaba una que otra anécdota sobre como se "resolvían" los problemas, además Ciel estimaba mucho a la reina, lo contrario a mi, había muchas razones de mi parte para querer destituir a la reina, pero, como no se había metido conmigo, no había necesidad, ya que no me interesaban los demás.

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Nos encontrábamos en una competencia de curry, acompañé a Ciel, ya llegando ahí me pidió ayuda con el príncipe Soma, en pocas palabras quería que lo mantuviera alejado de él.

-¿Solo vine para esto? tks, para la otra mejor dime directamente para que me ocupas.-dije irritada.

-Si te lo hubiera dicho no estarías aquí.

-Mmmm, tienes razón, Ciel luego de esto hay que reunirnos para hablar sobre nuevas ideas para las empresas.

-Esta bien, luego nos ponemos de acuerdo, maldición, ahí viene Soma, ya sabes que hacer ____.-Ciel se fue con Sebastián.

Ya todo estaba listo para que empezara la competencia, hasta la reina estaba presente y eso conmovió a todos los presentes, cada persona de ahí apreciaba a la reina, pero yo no era una de ellas.

-Oi ____!!!.

Dirigí mi mirada hacia donde provenía ese grito, mire al príncipe Soma muy emocionado, esto será pesado.

El tiempo pasó, ya me había cansado de estar con el príncipe, es buena persona, pero su energía me cansa. Salí por un momento del lugar, estuve caminando alrededor del edificio, hasta que me encontré al mayordomo de la reina.

-Vaya señorita ____, no espere encontrarla aquí, pensé que estaría observando la competencia.

-Sali por un momento, a veces hay que tomar un respiro, ¿no?, yo tampoco espere encontrarlo aquí,¿ que no debería estar cuidando a la reina?

-Oh si, claro, pero como usted dijo hay que tomarse un respiro, ¿no?, debería entrar a ver la competencia, ¿le gustaría que la acompañe condesa?- me extendió la mano.

-Le agradezco pero no hace falta, en un momento regresare.

-Entonces me retiro, espero verla dentro.

Ash se retiró y yo seguí con mi paseo, cualquier persona que escuchara la conversación diría que hay honestidad y amabilidad en nuestras palabras, cuando en realidad es todo lo contrario, increíblemente, aunque sepa su secreto no me han amenazado o algo por el estilo, pero por mi instinto, se están acercando las amenazas.

Al regresar al edificio mire que era un caos, había varias personas heridas, muchos guardias, pude ver a Ciel y a Sebastián que estaban hablando con Ash y la reina, me fui acercando a ellos, las únicas palabras que pude escuchar de Ash fueron "espero te haya ayudado" y se fue.

-Ciel, ¿Qué pasó? -los vi preocupada.

-Hubo un pequeño inconveniente condesa _____-dijo Sebastián en un tono neutro- si nos permite mi amo y yo debemos retíranos.

Antes de poder articular una palabra, ellos ya se habían retirado, quede perpleja, Sebastián me había hablado muy formal, desde que nos conocimos acordamos en que no existiría esa formalidad, además Ciel nunca volteo a verme, algo paso o Ash los puso en mi contra.

Pasaron algunos meses, en ese transcurso de tiempo, Ciel y yo no nos habíamos reunido, antes, ya era costumbre que cada fin de semana él venia a mi mansión o yo iba a la suya, ya sea para jugar ajedrez o tomar té, pero ahora las reuniones eran solo para negocios y eran escasas.

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Estaba en la oficina de Ciel, hablando sobre los nuevos negocios que queríamos implementar en nuestras empresas, todo iba de maravilla, hasta que Sebastián entró y dijo algo que me sorprendió.

-My lord, siento interrumpir, pero la policía esta buscando a la condesa, por favor, acompáñeme condesa.

Salí de prisa de la oficina para luego encontrarme con la policía y con Ash.

-Señorita ____, me podría acompañar por favor.

-Quisiera saber cual es el motivo por el que me esta buscando.

-Oh, la acusan de tráfico de drogas y lavado de dinero condesa.

-Se puede saber de dónde sacaron semejante mentira- dije algo enfadada.

-Al parecer su socio Ciel Phantomhive fue quien la acuso y presentó papeles que lo confirmaban, la reina los vio y me ordeno venir por usted, así que además de ser "descubierta" por su socio fueron órdenes de la reina, en este momento los llevaremos a la corte - dijo Ash con un tono de gracia.

Me llevaron con el juez, me acusaban de varios delitos que no había cometido, al terminar, me dijeron que me despojaban de mi puesto en la empresa, pero, seguiría siendo condesa, al salir, el mayordomo de la reina estaba en la puerta y antes de buscar Ciel me acerqué a Ash.

-Lo que sea que estés planeando, lo descubriré y te destrozare.

-Eso veremos - dijo con una sonrisa ladina.

Fui con Ciel, estaba más que decidida, nadie se mete conmigo.