𝒄𝒐𝒖𝒏𝒕𝒓𝒚 𝒈𝒊𝒓𝒍 - 𝒉𝒂𝒏 𝒋𝒊𝒔𝒖𝒏𝒈

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—Oigan, chicos. —Llamó Suzy a sus compañeros, quienes estaban descansando bajo un gran árbol que estaba cerca de la pradera.— ¿Qué les parece hacer un fogón como todos los años?, esta noche.

—Eso suena genial, pero, ¿crées que la abuela Shin nos deje?. —Habló Josh un poco preocupado.

—Chico, todos los años nos deja, ¿por qué no nos dejaría este?. —Dijo ChanYeol, abrazandolo por los hombros.

—Claro, además, Jisung es su nieto. Será su primer fogón. —Continuó Dal Mi, mirando al chico y este sonrió con pena.

—Entonces, ¿qué esperamos?. Comencemos a preparar todo. —Suzy animó a todos y se levantaron del pasto para ir caminando a pasos lentos hacia la casa de la abuela.

—Ah Suzy. —Le susurró Dal Mi a la chica, y esta prestó atención.— Debo buscar mi guitarra a ya sabes donde...

—¿Te acompaño?. —Dal Mi negó sonriendo sin preocupación alguna. Jisung sabia donde debia ir, y no le gustaba para nada. Luego de unos segundos, entraron a la casa.

—Abuelita Shin. —Llamó Josh a esta.

—Vamos a armar algo que hacemos todos los años. —Dijo Suzy.

—¿El fogón tan famoso?. —Cuestionó la abuela soltando una risa.

—Correcto. —ChanYeol habló con una sonrisa.

La abuela notó algo extraño.

—¿Y Dal Mi?. —Habló preocupada al ver que no estaba.

—Fué a... ya sabe... —Le respondió Suzy, y esta entendió. Y Jisung no queria dejar las cosas asi, debia hacer algo.

[...]

Dal Mi entró a su hogar sin hacer ruido, habian muchas botellas de alcohol tiradas por toda la casa y comida por todos lados. Entró a su habitación y abrió su armario, allí estaba su guitarra.

Cuando tenia la edad de diez años, comenzó a tocar ese instrumento por su madre. Ya que siempre disfrutaba de sus canciones y escucharla cantar.

Esos recuerdos fueron interrumpidos por la puerta principal abrirse y cerrarse de golpe, habia llegado.

Tomó el estuche con la guitarra dentro y salió de su cuarto.

—¡¿Dónde mierda te metiste niña malcriada?!. —Tomó del cabello de esta bruscamente y la empujó hacia el sofá, haciendo que esta se golpeé bruscamente en él.

—Me fuí... para no ver tu estúpida cara denuevo... —Habló entrecortada debido al dolor y se levantó con cuidado. Este aprovecho y la tomó de su camisa

—Eres... enserio una maldita perra. ¡¿Dónde está mi dinero?!. —Ella le escupió y le pegó con el estuche de su guitarra para safarse de su agarre y salir de casa corriendo. No podía parar de soltar lágrimas y podía escuchar algunos gritos de su padre maldiciendola.

Una vez a mitad de camino, seguia soltando lágrimas abrazandose a si misma por el dolor que sentía, lo odiaba esto con todo su corazón. No podía ir a casa de la abuela asi, sabiendo lo hecha un desastre que estaba, asi que retomó camino hasta al pueblo nuevamente y fué a su lugar favorito.

Por otro lado Jisung estaba esperandola en la entrada del lugar muy preocupado.

—Está tardando demasiado. —No podía con los nervios que invadian su cuerpo.