Hay miles de Fanfics que adaptan la historia del trágico accidente en el océano, pero ninguno es como este.
¿Te has preguntado que existió más allá del amor de los protagonistas? Efectivamente, se trataba de un amor que no surgió por el físico, ni p...
ACLARACIÓN: ESTE FANFIC ES COMO LA PELICULA JSJSJ, CON MUCHAS COSAS MODIFICADAS CLARO. PORSUPUESTO SOLO ES ENTRENIMIENTO.
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En la gran y famosa Inglaterra, años después de la segunda revolución industrial dónde la sociedad estaba dividida en tres secciones, los nobles y adinerados de la élite, los comerciantes de clase media, los esclavos y los sirvientes, los pobres de la nación.
No todo era perfecto.
Los amos de la sociedad basaban su admiración a otros viendo sus bolsillos llenos de oro y riquezas, los apellidos importantes también eran una característica de la apariencia, en algunos casos femeninos.
Tener poder político era la magia que movía nuestro mundo. Al morir mi padre solo nos dejó un apellido adinerado como manto que cubría varias deudas. Y mi madre esperaba poder desposarme con uno de los integrantes del grupo de solteros cotizados de nuestro mundo. Mi padre no era precisamente un noble de la clase alta inglesa, pero tenía tanto dinero que uno de los lores fallecidos accedió a trasladarle su título noble. Y esa según mi madre, era la única carta que tenemos para tener un futuro asegurado en la gran élite.
Había tumultos de gente ansiosos de abordar al nuevo buque (el arms) construido entre los años 1909 en Irlanda. Nuestro auto arribó justo frente al enorme barco de los sueños, ojos grandes y de colores se asombraban con devoción el gigantesco monstro de acero que literalmente me llevaría en cadenas a América. Bajé del auto con ayuda del chófer a cargo de nuestro transporte.
Por fuera: Una mujer perfectamente bien lustrada con un galante vestido de tonos blancos a rayas, un elegante sombrero negro y un peinado en lo alto mostrando la gracia y elegancia de una dama. Por mis ojos rasgados y pequeños no muy comunes entre los europeos no era de esperarse que fuera el centro de atención en muchas veladas por mi aspecto poco común.
Mi madre salió del auto y posteriormente se asomaba el rostro de... de mi prometido entre los rostros iluminados por el barco.
No era como si me sorprendiera su enorme tamaño. No le veía gracia.
—No entiendo por qué tanto alboroto— deduje mirando a detalle el barco, posteriormente gire mi vista a Jinyoung sin alguna expresión en el rostro sujetando mi elegante sombrero manteniendo una imagen inferida que habitualmente utilizaba en público—. No se ve más grande que el Mauritania.
—Pueden no impresionarte muchas cosas, Jisoo, pero el Titanic no — pronunció mí prometido en un perfecto inglés, quien al parecer si estaba encantando con el gigante de hierro.
Entre tanto bullicio no escuché la puerta del auto donde mi madre salía y rápidamente Jinyoung soltaba uno de sus muchos comentarios que amaba mi madre solo por ser de buena posición.
—Su hija es muy difícil de impresionar.
—Este es el barco que dicen que no puede hundirse— escuché a mamá después de unos segundos.
