Castas

Cosquilleo

Disclaimer: los personajes de Kuroko No Basket no me pertenecen y sólo los utilizo con fines de entretenimiento.

Advertencia: violencia, asesinato. Temas para adultos.

Desde que el mundo es mundo la vida es así: los Alfa son los fuertes y dominantes, los Beta están en medio de la escala social con un futuro promedio sin resaltar y por ultimo los Omega.

Si los Alfa nacían con suerte.. Los Omega tenían suerte de nacer.

Los parias, seres inferiores, usados sólo para procrear y para saciar los más bajos instintos de la raza superior.

Incluso en pleno Siglo XXI no son más que una molestia, una plaga para los políticos que quieren ser elegidos pero deben cumplir con los nuevos "derechos humanos del segundo sexo". Es gracias a esa organización sin fines de lucro que los Omega recibieron el derecho a votar cien años atrás, además pueden salir a la calle sin el inminente temor a ser atacados y en caso de serlo,  se pondrá en el expediente permanente del Alfa acusado una nota sobre su abuso.

Las cosas han cambiado, sí, pero a paso de tortuga.

Furihata Kouki confiaba en que las cosas mejorarían aunque se tardaran décadas, pero toda su ingenua ilusión se fue al caño esa tarde, luego de la pacífica marcha multitudinaria en busca de mayores derechos.

Omegas, Betas e incluso un puñado de Alfas se reunieron en el centro de la ciudad, avanzando hacia la magistratura en busca de penas más duras hacia aquellos que incumplían la ley,

Estaba con un grupo de amigos, con el rostro pintado y playeras con frases revolucionarias como: Castas = esclavitud, Los Omegas Son Humanos, Paz y Seguridad Para Todos, etc., pero cuando se oyó el primer disparo muchos creyeron que sólo eran cohetes de humo colorido, como el que había dado inicio a la marcha.

O que cuando los manifestantes comenzaron a correr, era porque la policía había llegado a reprimirlos, cosa común realmente.

O que cuando hubo gritos y llantos, envueltos en nubes de humo que hacía arder los ojos, se debía a que estaban apresando personas para darles una golpiza en la comisarías y luego dejarlos en casa con una ruda advertencia a los padres de los menores, porque ningún Omega es dueño de sus acciones, sino que responsabiliza a sus padres o tutores directos.

Incluso dos personas Omega no pueden unirse porque no habría quién tome responsabilidad por el sexo inferior, aunque de todos modos, este segundo sexo es tan repudiado que ni siquiera entre ellos desean unirse.

Los padres de Kouki son dos Beta, su hermano es un Alfa, pero eso no lo salva de recibir una reprimenda si supieran que está arriesgando su vida en una de esas marchas.

Su familia se preocupa por él y Kouki no los tomó en serio.. Hasta esa tarde.

Por los pelos pudo escapar de los gases lacrimógenos, corrió lejos de la redada que terminó siendo casi una masacre donde los Omegas eran maltratados sin piedad, más tarde se hablaría de "muertes accidentales", con decenas de Omega golpeados hasta la muerte.

Al doblar en un callejón un fornido Alfa lo tomó de los hombros y lo golpeó contra la pared. Fue tan veloz que no tuvo tiempo ni para respirar, tosióasfixiado por los gases que le cerraban la garganta y le quemaba los ojos mientras aquellas robustas manos se paseaban por todo su cuerpo, empujándolo con la cadera para hacerle sentir su masculinidad erecta.