Capitulo 5

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Bella miró al techo de su habitación, esperando que alguna respuesta a sus preguntas se le diera a conocer. Desafortunadamente, el rayo de luz que entró en la habitación a través de la ventana le dejó claro que no obtendría respuesta de ningún otro lugar y que probablemente había pasado toda la noche en un estado de confusión y pensamiento. A menos que se hubiera quedado dormida en algún momento de la noche y luego se hubiera despertado sin darse cuenta. Lo cual parecía probable porque no se sintió tan cansada, aunque podría deberse a lo activa que estaba su mente sobre la situación en la que se encontró ahora.

De alguna manera, Mama Mia sabía que había sido un hombre y le había preguntado muy clara y sin rodeos por qué no le había dicho eso. Luego dijo que podía pensar en ello y contarle a ella ya las otras chicas la historia por la mañana. Esto, por supuesto, llevó una serie de preguntas en la mente de Bella.

¿Cómo lo supo Mia?

¿Cómo tomarían ella y todos los demás la información?

Y quizás lo más importante, ¿Cuánto detallado? ¿Explicar toda la situación o tratar de omitir cosas?

"¡Uh, simplemente no lo sé!" Bella gimió mientras rodaba de espaldas a su frente, con la intención de enterrar su rostro en la almohada. Desafortunadamente, sus pechos bastante grandes se interpusieron, presionando debajo de ella en un ángulo incómodo, haciéndola rodar hacia atrás antes de sentarse y mirar su pecho. "Estas ... ¿todas las chicas tienen tales problemas con ellas?" preguntó a nadie en particular mientras continuaba mirando por unos segundos antes de que sus manos comenzaran a levantarse hacia ellos. Solo para alejarse en el último momento antes del contacto cuando comenzó a negar frenéticamente con la cabeza "No, eso estaría mal, no seré un ... pervertido", dijo Bella, casi susurrando la última palabra en voz baja como si fuera una maldición .

"¡Bella! ¿Estás despierta, Nyaa?" La voz de Anya resonó desde el otro lado de la puerta tan repentinamente que hizo que Bella se sobresaltara un poco.

"Ah, S-sí. ¡Estoy despierto!" Bella respondió mientras se sonrojaba sin saberlo.

"¡Entonces baja ya! ¡Yo también quiero saber tus cosas Nyaa!" Anya gritó antes de que el sonido de sus pies corriendo indicara su desaparición.

"Eso, es bueno o muy malo", murmuró Bella para sí misma mientras se sentaba y pateaba sus piernas fuera de la cama, mirando al uniforme de la anfitriona de fertilidad colocado en una silla cercana. No recordaba hizo cambiado anoche, pero sabía que estaba usando su otra ropa, así que al menos no estaba desnuda.

Al levantarse y alcanzar el uniforme, Bella vaciló. ¿Estaba bien usarlo ahora? ¿Mama Mia la echaría si no le gustara su respuesta? ¿Se quedaría sin trabajo tan pronto después de conseguir uno? ¿Sería mejor caer como estaba, en caso de que estaba a punto de perder lo que acababa de ganar?

"¡No!" Bella dijo de repente mientras negaba con la cabeza y retiraba el brazo. "Yo, no debería ser tan pesimista. Aunque, supongo que dejaré el uniforme aquí, por si acaso", murmuró mientras se dirigía hacia la puerta y salía. Los pasillos estaban en silencio y Bella se movía lentamente a través de ellos mientras pensamientos negativos llenaban su mente en contra de sus deseos. Para cuando llegó al piso principal, esperaba que la echaran tan pronto como entrara a la sala principal, pero se sorprendió de que pareciera normal. Al igual que la mañana anterior, las chicas estaban sentadas en una mesa comiendo, mientras que Mia estaba detrás del mostrador con una sonrisa de satisfacción en su rostro.

Hasta que vio a Bella, entonces su expresión se volvió exasperada y dejó escapar un suspiro. "El uniforme es tuyo, ¿por qué no lo llevas puesto? ¿O lo olvidaste afuera de tu puerta?"

Reinicio de conejoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora