El Sentir

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Podías besarla y sentir el infierno en su labios.
Podías encenderla a tu antojo.
No importaría el lugar, la hora o las circunstancias, ella te eligió a ti por encima de todo.
Evitaba quemarse por tus manos de  fuego que la recorrían, se resistía a tu cuerpo seductor y tu sonrisa burlona.
Eres su lado opuesto.
¿Querías someterla a tus fantasías?
¿Te atraía su ingenuidad y falta de experiencia?

Entonces sucedió, nadie pudo resistirse tanto a tus encantos, ella quiso ser la diferencia entre todas.
¿La dejarías serlo? ¿Te convencería de intentar ser algo más de una noche?

Cada noche se volvía más adicta a ti.
El placer de tus movimientos la hacían temblar hasta no dar más.
No hubo palabras para explicarte lo que sentía, solo respiraciones agitadas y gemidos ahogados por tus labios.
Sus miradas reflejaban pasión, salvajismo y una sonrisa juguetona.

Eras la diferencia.
Tu marcaste un antes y después en su vida.
Simplemente, ella se lanzó a sentir el infierno que existía en ti.



Existen personas que despiertan tus más oscuras fantasías. Aquellas que te hacen sentir una verdadera pasión inolvidable.
Aveces pueden irse de tu vida, pero siempre volverán


Escritos de 3amDonde viven las historias. Descúbrelo ahora