>>𝐂𝐡𝐚𝐩𝐭𝐞𝐫 𝐓𝐰𝐞𝐧𝐭𝐲 𝐓𝐡𝐫𝐞𝐞<<

684 50 13
                                    

Leer nota final

Paulina

Era un nuevo día, sábado, día de descanso, habíamos quedado los perdedores y yo, en salir a pasar el rato. Me vestí fodonga porque que flojera arreglarse, lo único que hice fue cepillar mi cabello y arreglar un poco mi cara para no verme como muerta. Me despedí de mis papás, y giré la manija de la puerta, al estar ya afuera me topé con alguien frente a mí.

- Buen día  —me saludó Bill mientras me daba un beso en la mejilla y me daba un par de flores, cortadas del césped de su jardín, pero flores.

- Buenos días Tartajita —lo saludé de vuelta— ¿Pará qué las flores?

- Bueno, dijiste que tenía un mes para hacer que volvieras a confiar en mí, y así es como voy a empezar
—respondió

- Bill... Aunque agradezco el detalle, los regalos no son lo más importante ¿si? Realmente eso no importa —le respondí enternecida

- Entonces supongo que no querrás esto —dijo mostrándome una barra de chocolate

- Oh no amigo, el chocolate siempre es aceptado —dije mientras tomaba el chocolate, el rió, y me tomó de la mano para volver a caminar, y yo reía como loca

- ¿Ahora qué? —dijo él

- Nada, sólo que... Esto —dije señalando nuestras manos— Es demasiado cursi

- Oh. Si te sientes incomoda no es necesario que... —habló él intentando apartar su mano

- No, está bien, eso solo que... Es cursi y nunca creí que yo estaría así alguna vez. Cursi, pero... Lindo —le respondí mientras sonreía

- Tú eres linda —respondió él sonriendo

- Bill ya no digas cosas lindas que es demasiado tierno y dulce que voy a vomitar y me causa cringe pero a la vez me gusta —dije haciendo gestos mientras reía

- De acuerdo, entonces, eres muy tonta y retrasada—dijo él

- Habló la grabadora trabada que se siente muy Machín —le respondí

- Ya no soy tartamudo —dijo él

- No. Pero lo fuiste —respondí, y seguimos el camino en risas.

(...)

Nuevo día, nueva mañana, y mis papás no estaban en casa, lo bueno, podía estar en pijama todo el día, hechar flojera y prácticamente no hacer nada productivo de mi vida. Me acosté en mi camita, me hice tamalito, y puse Netflix. ¿Qué veríamos hoy? Kakegurui, me pareció buena idea, me paré de la cama y me puse a bailar la intro, mi baile se vió interrumpido. Pausé la televisión, y bajé a abrir la puerta.

- Ah, eres tú —dije mientras dejaba que mi amigo pasara

- A ver, no te veo por semanas, ¿y lo qué dices es eres tú? —dijo Sebastián ofendido

- Perdón. Pero me interrumpiste en mi baile de kakegurui, y eso no se hace —le respondí— Y a penas pasó una semana. Relaja la raja

- Como sea. Solo vine para decirte que el abuelo decidió regresar a mis padres y a los de Sofía de vuelta a México —habló él

- ¿Qué? Pero, ¿por qué? —le pregunté

- No lo sé, pero supuestamente nos vamos en un par de días —respondió

- Bueno, pues entonces debo disfrutar a mi mejor amigo el tiempo que le queda aquí. Ven conmigo —le dije mientras subía a mi cuarto con el detrás de mí.

A New Loser? ×Bill Denbrough× (ANL 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora