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Era un nuevo día, me desperté a las 7:30, me levanté y arreglé la cama, agarré mi ropa y una toalla para ir al baño y tomar una ducha, toqué la puerta del baño para comprobar si es que alguien estaba pero al no haber respuesta alguna entré y cerré la puerta con llave.
Me desvestí y contemplé mi cuerpo desnudo en el espejo, era horrible, me odiaba por tener estrías, muslos grandes, odio no tener un estómago plano, lágrimas cayeron por mis mejillas las cuales limpié con mis manos, entré en la ducha y abrí el agua caliente, enjaboné mi cuerpo y luego lo enjuague. Salí de la ducha, me sequé y me vestí, me puse unos jeans negros que me dió Blue y una remera blanca que me había dado Nathan, la cual me quedaba algo grande, salí del baño y fuí bajando las escaleras al bar cuando de pronto escuché un portazo el cual me hizo acelerar el paso. Era Nathan y estaba recostado por la puerta, se había lastimado, también su respiración estaba agitada, corrí hacia el, me puse de cuclillas y posé mi mano en su frente, estaba hirviendo, lo cargué en mi hombro y lo hice sentar en un sillón que había allí, fuí a remojar un paño en agua fría para ponérsela en la frente, también le preparé un té ya que estos dos no tenían ningún medicamento en el bar ni en las habitaciones, me enojaba tener que hacer de "enfermera" con el, se quejaba mucho cuando limpiaba sus heridas pero parecía que al mismo tiempo lo disfrutaba.
–¡Auch! Ten más cuidado estúpida– rodeó los ojos.
–Te curo las malditas heridas porque eres un inútil que no sabe hacerlo y me dices eso, jódete– me levanté para ir a sentarme en otro lugar, aunque Nathan no lo permitiría.
Me agarró de la muñeca –Lo siento– dijo con el cabizbajo.
–¿Acaso no puedes hacerlo tú solo?
–Nop– dijo sonriendo, me irritaba que sea así, a veces se encontraba bien pero podía cambiar su estado de ánimo en segundos, molesto.
Terminé de curarle las heridas y le dí unas palmaditas en la cabeza.
–Ya te puedes ir, desaparece.
–Alice, eres insoportable, te tiraré a la calle– me miro a los ojos.
–Ugh, ¿por qué eres así? Intento ser buena contigo y siempre lo arruinas– crucé los brazos, el tan solo río para salir del bar e ir a su habitación, no sin antes decir.
–Ya vendrá Blue para tu entrenamiento, mañana entrenarás conmigo, así que por hoy te salvaste.
Para pasar el rato agarré algunas revistas que se encontraban en el bar y me recosté en el sofá, luego de unos minutos escuché llegar a Blue.

Me puse de pie al verla se acercó a mi y sonrió un poco, se veía desanimada y triste, le pregunté si es que estaba bien pero ella tan solo asintió, subió las escaleras para ir a su cuarto.

Era todo muy extraño, el maniatico todo golpeado y la enérgica, triste, 

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⏰ Last updated: Feb 13, 2023 ⏰

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The dark side of everythingWhere stories live. Discover now