02

142 17 7
                                    

Hwasa sonríe ligeramente mientras su madre peinaba con cuidado sus cabellos, le encantaba esos momentos donde podía sentir los pequeños mimos que su madre le daba, además de la delicadeza con lo cual lo hacia.

-Te gusta como te ves?- pregunta Momo, viendo a su hija a través del espejo del tocador.

La pequeña se miro en el espejo, pero rápidamente apartó la vista, no le gustaba su reflejo.

-Si- mintio en un susurro, cerró los ojos al sentir como su madre dejo un pequeño beso en su cabeza.

-Mami, mami, falto yo- dijo el pequeño Jungkook corriendo a los brazos de su madre.

-Claro amor- Momo observó a su hija, diciéndole con la mirada que se parará de la silla, lo cual Hwasa hizo rápidamente.

Mordiendo su labio inferior, Hwasa se sentó en la orilla de su cama, observando como su madre peinaba delicadamente a su hermano.

Los ojos de la niña, no dejaban de ver las delicadas facciones del menor, sintiendo una mayor inseguridad en si, al ver lo bello que era este.

Jungkook era una belleza a pesar de su edad, en cambio ella, no era nada comparada con su hermano.

-Amor, es hora de vallan a la escuela- ordeno Heechul entrando a la habitación de sus hijos.

-Si papá- respondieron los menores, tomando cada uno sus cosas.

Antes de salir, Momo dejo un beso en la frente de cada uno, mientras que el Beta, solo dejo un pequeño beso en la mejilla del menor, el cual se había acercado a abrazarlo, para luego finalmente salir de la habitación.

Jungkook salió rápido, pues quería desayunar antes de ir a la escuela.

Cuando Hwasa estuvo completamente segura de estar sola, dejo por fin salir las lágrimas. Y con un silencioso llanto, dejo que su cuerpo se liberará, aunque sea, de un poco de aquel profundo dolor, por la indiferencia de su padre.

[...]

Momo suspiro de placer al sentir como las manos callosas acariciaban sus pechos, sin duda disfrutaba de los momentos en los que dejaba a sus hijos iban a la escuela. 

El beta sonrió con arrogancia al ver las reacciones de su jefa, sin duda aceptar el trabajo de chofer en la mansión Jeon había sido la mejor decisión de todas.

-Sera mejor que guardes silencio si no quieres que alguien se dé cuenta- ordeno el beta mientras alineaba su pene en la entrada de la omega.

-Porque no te callas y mejor me follas- ordeno la pelinegra mientras restregaba su vagina con el pene del beta. Después de todo Heechul quería un nuevo hijo, y ella como la buena esposa que era se lo conseguiría rápidamente.

Espero que les haya gustado el capítulo.

Nos leemos a la próxima 💋.

Si leen todas mis historias, la mayoria de estas serán actualizadas en celebración de mi cumple 😉.

Alfa ~ || Nammin || Namjoon HaremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora