Capítulo único

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Después de un largo día de trabajo, JungKook se dirigía a la casa que compartía con su pequeño amigo, hacía calor así que remangó las mangas de su blanca camisa revelando sus tatuajes. Cuando llegó dejó el maletín al costado de la puerta y se dirigió al living para mirar un poco de televisión. Pero ya era de tarde, 19:00 para ser exactos, así que se dispuso ir al cuarto de su compañero de vivienda.

Subía las escaleras pensando en qué harían para comer, tocó la puerta del cuarto y nadie respondió así que entró.

No sabe si fue una mala o buena idea

Logró divisar la cama perfectamente hecha y sobre ésta a su pequeño amigo, que sólo vestía unas braguitas negras que dejaban ver parte de sus glúteos y una mini falda del mismo color, que dejaba ver sus hermosas piernas. Todo por el calor.

JungKook sabía que en las épocas de verano a TaeHyung le gustaba vestir femenino ya que, según él, era mas fresco.

El chico que se encontraba boca abajo se dio vuelta quedando de costado, dándole al pelinegro una mejor vista de su abultado trasero gracias a que la falda se levantó completamente. Aunque sin ser consiente de ello, su acción le provocó una erección al mayor.

JungKook se dirigió a la cama y sacudió suavemente el hombro al castañito, despertándolo. El menor se avergonzó por ser encontrado vestido así, a lo que bajó su cabecita.

Al pelinegro le causó ternura la acción de Taehyung, le tomó el mentón e hizo contacto visual con el pequeñito.

- ¿Ya tenemos que cenar? - a JungKook casi le causa un orgasmo auditivo por la inocencia en las palabras del menor.

- ¿Qué tal si mejor nos cenamos a nosotros?

El pequeño no había entendido a la primera a lo que Jeon repitió "¿Y si tú te conviertes en mi cena y yo en la tuya?" Bastantes ganas le tenía al menor, y no hiba a desaprovechar esta oportunidad de insinuarse a él sexualmente.

Al darse cuenta de lo que su hyung había dicho, TaeHyung habrió los ojos como platos y sus mofletes se tornaron de un tono rojizo intenso.

Aunque pensándolo bien...

Tener al azabache arrodillado al costado de la cama tomando su mentón, con el pelo húmedo por el sudor y un poco largo... Le tentaba. Más si llevaba las mangas arremangadas dejando ver sus brazos venosos y los primeros cuartos botones desprendidos dejando ver su pecho trabajado... de sólo verlo su pene se endureció un poco. Estaba agradecido con el aire acondicionado por no funcionar, así pudo tener esa imagen gloriosa de Jeon.

- ¿L-lo dices e-encerio?

- Si tú quieres sí, esas bragitas - dijo mientras ponía su mano en el borde de ésta - me exitan bastante, siendo sincero.

No faltaba más palabras para que Kim lo bese tímidamente y Jeon aceptara gustoso mientras acostaba al menor y se posicionaba encima de éste.

Bajó sus besos al cuello de su pequeño Tae e hizo varios chupetones que tardarían días en irse por completo, mientras acariciaba los botoncitos cafés de éste. ¿Y TaeHyung? Pues él rodeó con sus piernas las caderas de JungKook y enredó el cabello del azabache en sus dedos.

Jeon se separó haciendo que Kim hiciera un puchero en respuesta, se paró y empezó a desvestirse mirando fijamente al pequeño. Una vez ya desnudo volvió a posicionarse entre las piernas que Kim habría para él y comenzó un beso lleno de lujuria mientras manoseaba el cuerpecito del menor a su antojo, terminando en sus nalguitas. Separandolas y apretandolas a su gusto, dejando su trasero marcado por las yemas de sus dedos.

Bragitas [KookV] OSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora