815•Taekook•

Bienvenidos

•Uno •

Estaba lloviendo sobre el coche estacionado , fuera de lo que sería su nuevo lugar de trabajo a partir de ahora. Mantuvieron sus abrigos bien cerrados cuando bajaron del auto. La lluvia empezó más fuerte , empapado sus pantalones y zapatos.
corrieron hacia la entrada ,abriéndola haciendo una campana sonar anunciando su entrada. Dos agentes de policía se reunieron con ellos cuándo atravesaron la puerta.

Eran un hombre y una mujer. El hombre parecía bastante agradable, como un abuelo con cabello y barba blancas. La mujer parecía más estricta, también más joven, y la manera en la que miró a los nuevos trabajadores fue un poco aterradora. Los cinco recién llegados temblaron, tanto por el frío como por el recibimiento. Miraron al rededor de la entrada del salón y sacudieron el agua de sus ropas y cabellos.
Varios murmullos de emoción comenzaron cuando alguien señaló cinco uniformes, que estaban tendidos en una mesa del rincón. Los murmullos no terminaron hasta que la mujer aplaudió rápidamente tres veces. Inmediatamente cinco pares de ojos pusieron toda su atención sobre ella.

—Bienvenidos, oficiales.

Más murmullos comenzaron, pero una tos los silenció de inmediato. El más joven de todos contuvo una sonrisa mientras le daba un codazo al que estaba a su lado.

—Ella suena a problemas —.

Susurró y asintió con la cabeza hacia la mujer. El otro apenas tuvo tiempo de asentir antes de que la mujer fijara su atención a donde provenía el susurro. Se dirigió hacía él, los otros cuatro jadearon y retrocedieron internamente.Se detuvo ante el joven y apuntó con su garrote negro hacía su barbilla.

—¿Cuál es tu nombre, oficial?

Tragó saliva.— Kim, señora. Kim Taehyung.

El hombre al que le había dado el codazo se mordió el labio para no sonreír. Estaba aliviado de no estar en el aprieto lugar de su amigo

—Oficial Kim,—

Dijo y bajó su garrote.

— su trabajo de esté día será limpiar las celdas del tercer piso.

Los otros cuatro sonrieron y él policía cańiento negó con la cabeza, sonriendo como si fuera normal de la mujer.

Taehyung apretó los dientes, pero asintió. Todos ellos aprendieron que no debían meterse con aquella mujer.

—Ahora,—

Dijo ella dándose la vuelta para ubicarse de nuevo al lado del oficial con cabello blanco.

— Si no tenemos ninguna interrupción más, tal vez ustedes tengan la oportunidad de hacer algo productivo el día de hoy.
Taehyung puso su cabeza abajo sintiendo sus mejillas calientes
—Mi nombre es Oficial Son y este es el oficial Choi , nuestros primeros nombres no importan, aquí solo usamos los apellidos. Su trabajo será seguir nuestras ordenes y mantener a los prisioneros felices.
—¿Por qué queremos hacerlos felices?Murmuro el chico llamado Taehyung a su compañero de al lado. Algo que no pasó por las narices de La oficial Son. haciendo que una vez más le dirigió una mirada.
—Ahora que lo pienso las celdas del cuarto piso también necesitan ser limpiadas. Taehyung mordió su labio inferior y maldijo su gran boca.
—Y para tu información, Kim.—Dijo.— Tenemos que mantener a los prisioneros felices por que nosotros no queremos presos enojados, ¿Y por que no queremos eso? cuando los prisioneros están enojados no es fácil estar cerca de ellos y hemos tenido un montón de ojos morados entre los presos y policías. Algunos de ellos son violentos y no dudarán en darte una paliza haciendo terminarte en una cama de hospital. ¿Esta claro?, así que no molesten a los prisioneros
Miró a los chicos recién llegados. Todos fijaron su vista en el suelo escondiéndose de su mirada.
—Ahora, allí están sus uniformes y por allá se pueden cambiar.
Dijo señalando una puerta a la izquierda.
— Vístanse y los veré aquí en cinco minutos. Eso dio por terminado mi discurso, muévanse. Los recién llegados se apresuraron a tomar su uniforme, encontrar su toalla y correr a cambiarse chocando entre sí.

✨

- ¿Crees que alguna maldita vez sonríe?
Se quitó rápidamente los pantalones y se puso los negros del uniforme. Cuando se abrocho el cinturón se volvió hacía Taehyung
—Lo siento por ti, Hombre
Dijo y le palmeó el hombro
—Si yo fuera tú me sentiría miserable. Taehyung se echo a reír
—Solo necesita un poco de amor, eso es todo. Los otros cuatro en la habitación lo voltearon a ver con el ceño fruncido.
Taehyung río.
—Estoy bromeando, es una bruja.
—Vamos a quemarla. —Dijo el de pelo castaño —Oh, por cierto —Sostuvo su mano hacía Taehyung
—Jung Hoseok. Taehyung la estrechó
— Kim Taehyung.
—No envidio tu tarea de hoy, Tae.
Dijo sacudiendo la cabeza.
—Si, pero no creo que cada piso tenga demasiadas celdas, así que sobreviviré.

🐈

Que equivocado estaba.
Había diez celdas en cada piso y estaban tan sucias que parecía que no fueron limpiadas en años. Para el momento que Taehyung había acabado, la hora del almuerzo ya había terminado y su estómago se encontraba llorando a ser alimentado. Mientras estaba limpiando, había visto pasar a Hoseok junto a un chico pelirrojo y el desayuno, luego fue el almuerzo y después los prisioneros. Se pregunto por que ellos? los policías, tenían que hacer trabajos de limpieza y de alimentación. ¿No tienen gente para eso?

Claro, eran recién salidos de la escuela y todo, pero

¿Como iban a aprender a ser oficiales de policía si no tenían nada real que hacer?

Ni siquiera tenía una pistola en el cinturón. Taehyung se secó la frente con la parte trasera de su mano y aparto su pelo gris platinado de su rostro. Puso su trapo, cubeta y el jabón en un armario, se dirigía al corredor cuando una puerta se abrió y dejó salir a una multitud. Eran los prisioneros dirigidos de nuevo a sus celdas por el policía de cabello canoso y una pelirroja que Tae reconoció como recién llegada igual que él. Taehyung frunció el ceño.
¿Qué había echo ella para merecer algo tan interesante como aquello?
Los prisioneros fueron entrando cada uno a su celda. Todos llevaban feas ropas naranjas, un número impreso en el bolsillo delantero de la camiseta y un brazalete en el brazo que parecía imposible de abrir. Algunos de los presos eran grandes, como los que ves en las películas, musculosos, con los brazos tatuados y la cabeza rapada, pero la mayoría de ellos parecían normales. Inquietantemente normales. Taehyung no habría reconocido a la mayoría de ellos como criminales si los viera pasar por la calle. Una mujer con el cabello rubio y sucio a la que le faltaba un diente, le guiño un ojo al ver que la estaba mirando, Tae bajo rápidamente la mirada y sintió como un escalofrío pasó por su pina dorsal. Taehyung observó a los prisioneros acercarse hacía sus celdas, cuando vió a uno que tenía la mirada puesta en él. No era el hombre musculoso, ni la mujer, era un joven pequeño con cabellos negros y largos. Sus ojos eran tan negros como su cabello. Tenía la cabeza inclinada hacía adelante, la mayoría del rostro estaba cubierto por sus cabellos, pero Tae pudo ver una ligera sonrisa escalofriante en sus labios. Los prisioneros pasaron al lado de Taehyung. El de cabello negro no le quitaba los ojos de encima y Tae parecía estar atrapado en sus ojos negros. Parpadeó y apartó los ojos de su penetrante mirada, los dirigió en cambio a el número en su camiseta naranja.
"815"
A medida que paso junto a él, pudo percibir de nuevo su mirada y una sonrisa malvada que se dibujo en sus labios. Taehyung se estremeció sintiendo frío sudor resbalando por detrás de su nuca. Empezó a caminar rápido cuando la mujer del cabello sucio lo empujó por los hombros para que se moviera. A dos puertas de dónde Taehyung se detuvo, el prisionero 815 fue llevado a su celda antes de cerrarla con llave después de que él entrara.Tae se sorprendió al ver que había una cerradura extra en la puerta sin contar el cerrojo.Taehyung miró la puerta del 815.
¿Por que una persona pequeña necesitaría una cerradura extra?
Tae lo apartó de su mente y caminó en dirección contraria, corrió en las escaleras abajo para ver a la oficial Son y obtener una nueva tarea. Se recordó no volver a regarla con ella de nuevo.

❤️
Espero que hagan disfrutado este capítulo porfavor No olviden de comentar y dar una estrella !! Los leo pronto y cuídense mucho !! ><