XI

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Advertencia: sexo gay

No es el mejor, pero es trabajo honesto.

Derry estaba lloviendo ese día, la chica más bella se iba, rumbo a una mejor ciudad. Cuando se lo comento a su novio soltó algunas lágrimas, pero como siempre él la apoyo y le dijo que todo estaría bien, porque para eso tienen un celular, una relación a distancia no es fácil pero lo intentaran. Todos fueron a despedirla, incluso el pequeño Georgie. Richie y Eddie juntaban sus meñiques discretamente, pero nada pasaba desapercibido para la pelirroja, quien miraba con alegría a sus amigos, el sonrojo del menor y la gran sonrisa del de lentes. Otro detalle que no pasó desapercibido fue un chupetón en el cuello de Stanley, el cuello de su camisa lo tapaba por los lados, pero era tan grande que se podía ver. Ben tenía una cajita guardada a sus espaldas, se la entrego y le pidió que la abra cuando los extrañe. Todos la abrazaron al momento de despedirse y claro Richie hizo una escena aferrándose a su pierna en un intento de convencerla que se quedara, pero la decisión ya estaba tomada.

– ¿Quién será mi compañera ahora? –

–podemos hacer video llamada –

–claro, es de lo más normal fumar frente a tu celular –

–oh, vamos, pronto estaremos todos juntos –

–es una promesa –

–Tengo algo para ti – le entrego una cajita– es solo una pulsera para ocultar tu tatuaje –

–eso fue una locura –

– ¿preferías una orgia? –

–cállate, imbécil –

Así es, decidieron hacerse un tatuaje ante la noticia de Beverly, la muñeca de todos, para ser exactos la derecha llevaba la palabra "LOSER" porque una vez eres un perdedor, serás siempre un perdedor. En el caso de Richie y Eddie la S era tapada por una V, tal como se veía en el yeso que Eddie uso durante la batalla con Pennywise. Claro que la mamá de Eddie no sabía nada de eso, le daría un infarto si lo descubre, así que se puso una venda indicándole a su madre que era para evitar cualquier cortada letal en una zona sensible como esa.

¿Qué les espera? Nadie lo sabe...

Todos se fueron en sus bicis luego de despedir a Bev, la vieron alejarse en el auto de su tía. Stan recibió una llamada y tuvo que separarse del grupo.

– ¿A dónde vas? – pregunto Bill

–tengo que encontrarme con alguien –

–Henry Bowers querrás decir –

–silencio, Richie –

–pídele a un pez que deje de nadar –

– ¿tan necesarias son las asesorías? –

–son temas personales, Bill, nos vemos luego –

Bill siguió su camino junto a Georgie, Mike también se fue a su casa porque ya había tardado demasiado, Ben hubiera acompañado a sus amigos pero se sentía de mal tercio así que prefirió ir a su casa. Richie miro a Eddie cuando estaban solos, y su bici se tropezó con una piedra en la calle.

–esto se veía más romántico en mi mente –

–Tú lo dijiste en tu mente – se paró a su lado

–necesito una enfermera –

–ven párate no es un golpe tan fuerte – lo tomo del brazo para que se levantara y vio un gran raspón en la pierna de su novio

–Demonios – lo volvió a sentar –no te muevas, creo que tengo lo necesario en mi cangurera –

Eddie empezó a curar la herida de el de lentes, era lindo verlo preocupado por él y tan dedicado a su labor. Sin duda sería un gran médico, y él un comediante; polos opuestos pero que combinan muy bien.

Un final felizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora