Cuando lo sabes, lo sabes.

Unión

Los mitos y las leyendas sobre el amor son muchos, pero solo dos de estas historias la gente cree que pueden o sean verdaderas.

Hay una leyenda que cuenta que cuando los dioses nos crearon éramos una masa unida por dos cuerpos desde la espalda, teniendo así dos rostros y ocho extremidades, permaneciendo unidos con un hombre o una mujer.

Los dioses nos habían creado de esta forma para que les rindiéramos culto, pero, con el tiempo se dieron cuenta que las creaciones que habían hecho ya no les obedecían y se preocupaban más por ellos mismos cuestionando la existencia de los dioses comenzando a dictar sus propias leyes. Fue por eso que el dios supremo, Zeus, como castigo mandó un rayo a la Tierra con el cual separó los cuerpos, dejándonos con la misión de encontrar a nuestra otra mitad, pues solo hasta que pudiéramos hallarla nos íbamos a sentir completos.

La otra leyenda o mito nos habla sobre el hilo rojo, el cual se supone te conecta con esa persona destinada sin importar donde se encuentre. Dicen que no importa cuánto se tense o se enrede el hilo, siempre vas a terminar encontrando a ese ser especial que la vida creo para ti.

Baekhyun desde niño creció escuchando ambas historias, la favorita de su madre era la del hilo rojo porque ella decía que fue ese mismo hilo el que la conecto a su padre, y por otro lado, la predilecta de su padre era la de los dos cuerpos argumentando que su madre era tan parecida a él que en verdad creía que en otra vida o en otro plano habían sido creados juntos.

Él siempre los escuchó fascinado, no entendiendo a qué se referían pues apenas era un niño, no fue hasta que creció y comprendió lo que eran los sentimientos que se empezó a cuestionar. Si su madre y su padre hablaban con tanto amor y cariño sobre el otro ¿Algún día encontraría él a esa persona?.

Siempre pensó que cuando encontrara a esa persona sería como en las películas románticas que veía con su madre o los dramas que veía a escondidas de su padre, se imaginaba caminando por los pasillos de su escuela cuando de repente chocaría "accidentalmente" con el amor de su vida. Pero pronto descubrió que las cosas no iban a ser de esa forma, no porque no lo quisiera, sino porque no estaba en su naturaleza ser una persona extrovertida.

Baekhyun no siempre fue una persona tímida y reservada, al contrario, cuando era niño no podía quedarse quieto un segundo, quería caminar, jugar, correr, hablaba hasta con las plantas y tenía muchos amigos. Sus padres incluso le aseguraban un futuro brillante rodeado de personas y siendo el líder, sin duda fue una lástima que esa personalidad achispada se apagará conforme fue creciendo.

Durante muchos años le echo la culpa a su naturaleza, creía que el hecho de ser un omega influía en su comportamiento, aunque lo descarto al ver que los demás omegas hombres y mujeres eran alegres, divertidos y extrovertidos, entonces, ¿Qué le pasaba?.

Hubo un momento en el que se lo preguntó a su madre, fue una tarde que ambos se encontraban solos en casa mientras veían una de esas películas que tanto le gustaban a ella, recuerda haberla mirado en una pausa y fue ahí cuando se animó a externar sus dudas

-¿Puedo hacerte una pregunta?-

-Claro ¿Qué te preocupa, cariño?-

-Tú crees...bueno....¿En verdad encontrare a mi pareja?-su madre lo miró a los ojos y le dio una sonrisa que fue correspondida

-Ven aquí, cariño-su madre palmeó el lugar a su lado y obedeció, ella lo tomó de las manos acariciando sus nudillos-¿Cuántos años tienes?-

-Quince-

-¿Recuerdas cuál fue la edad que te dije que tenía cuando conocí a tu padre?-Baekhyun hizo memoria pero al no recordarlo negó con la cabeza-tenía veinte, y a tu edad yo me hacía las mismas preguntas-