¿Quién en su sano juicio tendría una hija con Chizome Akaguro o mejor conocido como Stain, el asesino de héroes? Pues por lo visto sólo mi madre pero era de esperarse, ambos son "villanos" y yo... Bueno lo natural sería que fuese villana como ellos...
Desperté perezosamente al sentir movimiento, no estaba de tan buen humor, hubiera preferido seguir durmiendo, pero lamentablemente no se podría. Mire el cuaderno en el escritorio y suspire antes de entrar a bañarme, aun no se me ocurrían nombres para los nuevos ataques..
¿Será que realmente es necesario nombrarlos?
Me costaba mucho hacerlo ya que era pésima con los nombres.
acabe de bañarme, me vestí y salí, no sin antes lavarme los dientes, claro. No tenia hambre así que salude a todos para luego ir a esperarlos al sofá.
-Mm.. ¿No desayunaras, ____(tn)- Me hablo mi mejor amiga por lo que desde la sala le grite:
-¡No gracias, Yaomomo! ¡No tengo hambre!- Saque mi libreta y mire los nombres que tenia anotados:
•Hi no sen no hasshabutsu (Mil proyectiles de fuego) Consiste, obviamente, en lanzar mil proyectiles de fuego hacia el enemigo.
•Suffocating fire (Fuego sofocante) Consiste en crear un remolino únicamente de fuego sofocando al contrincante.
•Hinoken (Espada de fuego) [N/A: No creo que necesite explicar esto xd].
•Hi no kabe (Muro de fuego) Como su nombre indica crearía un muro de fuego ocultando el próximo ataque.
[N/A: Los 2 más votados se quedan, pero no significa que los otros no puedan estar mas adelante, solo que perfeccionados y con algún cambio.]
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Las clases pasaron rápido, en la practicas le pedí a ectoplasm sensei entrenar todos los ataques, incluso la de la espada ya que era la que más costaba, ya que darle forma al fuego no es tan fácil como decirlo.
Ya en las habitaciones me puse algo cómodo, un top gris con una camisa roja a cuadros y un pantalón gris oscuro con una cadena con un candado de detalles y como me quedaba algo grande usaba un cinturón, en los pies unas viejas zapatillas negras :
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Lamentablemente no podía estar con mi pijama y sin sostén como en casa, más que nada por Mineta y sus raras manía de estar de pervertido.
Salí del cuarto para bajar a la sala, la cual estaba repleta con mis compañeros, sonreí al verlos y decidí ir al patio. Una vez allí di una vuelta a los dormitorios para ver si podía subir al techo sin necesidad de usar mi singularidad, desgraciadamente no había otra forma por lo que tuve que usarlo para impulsarme y subirme sentándome en la orilla del tejado viendo el paisaje que, a decir verdad, no era tan lindo como el de la casa en la que viví con papá.
